¿En qué condición se hallará usted cuando esté de pie delante del trono de juicio?
“Cuando el Hijo del hombre llegue en su gloria, y todos los ángeles con él, entonces se sentará sobre su glorioso trono.” (MATEO 25:31.)
1-3. ¿Por qué podemos ser optimistas respecto a la justicia?
‘¿CULPABLE, O INOCENTE?’ Muchas personas se hacen esa pregunta cuando oyen que se juzga a alguien. Puede que los jueces y los jurados intenten ser honrados, pero ¿suele prevalecer la justicia? ¿No ha oído de las injusticias que se han cometido en los procedimientos judiciales? No se trata de nada nuevo, como muestra la ilustración de Jesús recogida en Lucas 18:1-8.
2 Prescindiendo de las experiencias que usted haya tenido con la justicia humana, observe la conclusión a la que llegó Jesús: “¿No hará Dios que se haga justicia a sus escogidos que claman a él día y noche [...]? Les digo: Él hará que se les haga justicia rápidamente. Sin embargo, cuando llegue el Hijo del hombre, ¿verdaderamente hallará la fe sobre la tierra?”.
3 Jehová se encargará de que finalmente se haga justicia a sus siervos. Jesús también está implicado en este asunto, especialmente ahora, porque vivimos en “los últimos días” de este inicuo sistema. Dentro de poco Jehová utilizará a su poderoso Hijo para erradicar la maldad de la Tierra. (2 Timoteo 3:1; 2 Tesalonicenses 1:7, 8; Revelación [Apocalipsis] 19:11-16.) Comprenderemos mejor el papel que desempeña Jesús si analizamos una de las últimas ilustraciones que presentó, generalmente conocida como la parábola de las ovejas y las cabras.
4. ¿Qué entendíamos hasta el presente en cuanto al tiempo en que se cumple la parábola de las ovejas y las cabras, pero por qué vamos a dar atención a la parábola ahora? (Proverbios 4:18.)
4 Durante mucho tiempo hemos entendido que la parábola representa a Jesús sentándose en su trono como Rey en 1914 y desde entonces dictando sentencias: vida eterna para las personas que demuestran ser como ovejas y muerte permanente para las que son como cabras. Sin embargo, un nuevo examen de la parábola requiere una modificación en el modo de entender el tiempo de su cumplimiento y lo que ilustra. Este entendimiento más claro reafirma la importancia de la predicación y de la reacción de la gente. Para fundamentar esta nueva manera de entender la parábola, examinemos lo que enseña la Biblia acerca de Jehová y Jesús en su calidad de Reyes y Jueces.
Jehová, el Juez Supremo
5, 6. ¿Por qué es apropiado ver a Jehová como Rey y Juez?
5 Jehová gobierna el universo y ejerce poder sobre toda la creación. Como no tuvo principio y no tendrá fin, es el “Rey de la eternidad”. (1 Timoteo 1:17; Salmo 90:2, 4; Revelación 15:3.) Tiene la autoridad para emitir estatutos o leyes y hacer que se cumplan. Pero esta autoridad incluye ser Juez. Isaías 33:22 dice: “Jehová es nuestro Juez, Jehová es nuestro Dador de Estatutos, Jehová es nuestro Rey; él mismo nos salvará”.
6 Durante mucho tiempo, los siervos de Jehová lo han reconocido como el Juez de causas y cuestiones. Por ejemplo, cuando “el Juez de toda la tierra” sopesó la prueba respecto a la maldad de Sodoma y Gomorra, juzgó que los habitantes merecían ser destruidos y ejecutó la merecida sentencia. (Génesis 18:20-33; Job 34:10-12.) Cuánto debe tranquilizarnos saber que Jehová es un Juez justo que siempre ejecuta sus sentencias.
7. ¿Cómo fue Jehová Juez en Israel?
7 En el antiguo Israel, Jehová a veces dictaba los fallos directamente. Si hubiera vivido en aquellos días, ¿no le habría confortado saber que las decisiones le correspondían a un Juez perfecto? (Levítico 24:10-16; Números 15:32-36; 27:1-11.) Dios también suministró “decisiones judiciales” que constituyeron normas perfectas para juzgar. (Levítico 25:18, 19; Nehemías 9:13; Salmo 19:9, 10; 119:7, 75, 164; 147:19, 20.) Él es el “Juez de toda la tierra”, lo cual nos engloba a todos nosotros. (Hebreos 12:23.)
8. ¿Qué visión pertinente contempló Daniel?
8 Confirma este hecho el testimonio de un “testigo ocular”. El profeta Daniel recibió una visión de bestias feroces que representaban gobiernos o imperios. (Daniel 7:1-8, 17.) Añadió: “Se colocaron tronos y el Anciano de Días se sentó. La ropa de él era blanca justamente como la nieve”. (Daniel 7:9.) Observe que Daniel vio tronos “y el Anciano de Días [Jehová] se sentó”. Pregúntese: ‘¿Presenció Daniel la entronización de Dios como Rey?’.
9. ¿Cuál es uno de los significados de ‘sentarse’ en un trono? Mencione algunos ejemplos.
9 Pues bien, cuando leemos que alguien “se sentó” en un trono, pudiéramos pensar que llegó a ser rey, pues la Biblia a veces utiliza esa expresión con ese sentido. Veamos un ejemplo: “Cuando [Zimrí] empezó a reinar, en cuanto se sentó sobre su trono [...]”. (1 Reyes 16:11; 2 Reyes 10:30; 15:12; Jeremías 33:17.) Una profecía mesiánica decía: “Tiene que sentarse y gobernar en su trono”. Por consiguiente, ‘sentarse en un trono’ puede significar llegar a ser rey. (Zacarías 6:12, 13.) La Biblia dice que Jehová es un Rey y que se sienta en un trono. (1 Reyes 22:19; Isaías 6:1; Revelación 4:1-3.) Él es el “Rey de la eternidad”. Sin embargo, al asumir un nuevo aspecto de su soberanía, podía decirse que llegaba a ser Rey, como si se sentara en su trono de nuevo. (1 Crónicas 16:1, 31; Isaías 52:7; Revelación 11:15-17; 15:3; 19:1, 2, 6.)
10. ¿Cuál era una de las funciones principales de los reyes israelitas? Ilústrelo.
10 Pero tengamos presente esta idea clave: una de las funciones principales de los reyes de la antigüedad era oír casos y dictar fallos. (Proverbios 29:14.) Recordemos el veredicto sabio que emitió Salomón cuando dos mujeres afirmaban ser las madres de la misma criatura. (1 Reyes 3:16-28; 2 Crónicas 9:8.) Uno de sus edificios estatales era el “Pórtico del Trono donde él había de juzgar”, llamado también “el pórtico de juicio”. (1 Reyes 7:7.) Se decía que Jerusalén era el lugar donde estaban “asentados los tronos para juicio”. (Salmo 122:5.) Es obvio que estar ‘sentado en un trono’ también puede significar ejercer autoridad judicial. (Éxodo 18:13; Proverbios 20:8.)
11, 12. a) ¿Qué se quiere decir en el capítulo 7 de Daniel con que Jehová se siente? b) ¿Cómo confirman otros textos bíblicos que Jehová se sienta para juzgar?
11 Dirijamos la atención ahora a la escena en que Daniel vio ‘al Anciano de Días sentarse’. Daniel 7:10 agrega: “El Tribunal tomó asiento, y hubo libros que se abrieron”. Sí, el Anciano de Días se sentó para emitir un fallo sobre la dominación del mundo y juzgar que el Hijo del hombre es digno de gobernar. (Daniel 7:13, 14.) Luego leemos que “vino el Anciano de Días y juicio mismo se dio a favor de los santos”, los que son juzgados dignos de gobernar con el Hijo del hombre. (Daniel 7:22.) Finalmente, “el Tribunal mismo procedió a sentarse” y emitir un fallo desfavorable contra la última potencia mundial. (Daniel 7:26.)a
12 Por consiguiente, el que Daniel viera a Dios ‘sentarse en un trono’ significó que venía para juzgar. Anteriormente David había cantado: “[Tú, Jehová,] has ejecutado mi juicio y mi causa; te has sentado en el trono juzgando con justicia”. (Salmo 9:4, 7.) Y Joel escribió: “Que las naciones sean despertadas y suban a la llanura baja de Jehosafat; porque allí me sentaré [yo, Jehová,] para juzgar a todas las naciones”. (Joel 3:12; compárese con Isaías 16:5.) Tanto Jesús como Pablo estuvieron en juicios en que un ser humano se sentó para oír el caso y juzgar.b (Juan 19:12-16; Hechos 23:3; 25:6.)
La posición de Jesús
13, 14. a) ¿Qué garantía tenía el pueblo de Dios de que Jesús sería Rey? b) ¿Cuándo se sentó Jesús en su trono, y en qué sentido ha gobernado desde 33 E.C.?
13 Jehová es Rey y Juez. ¿Qué puede decirse de Jesús? El ángel que anunció su nacimiento declaró: “Jehová Dios le dará el trono de David su padre, [...] y de su reino no habrá fin”. (Lucas 1:32, 33.) Jesús sería el heredero permanente del reino del linaje davídico. (2 Samuel 7:12-16.) Gobernaría desde el cielo, pues David dijo: “La expresión de Jehová a mi Señor [Jesús] es: ‘Siéntate a mi diestra hasta que coloque a tus enemigos como banquillo para tus pies’. La vara de tu fuerza Jehová enviará desde Sión, diciendo: ‘Ve sojuzgando en medio de tus enemigos’”. (Salmo 110:1-4.)
14 ¿Cuándo sucedería eso? Jesús no reinó mientras estuvo en la Tierra. (Juan 18:33-37.) En 33 E.C. murió, fue resucitado y ascendió al cielo. Hebreos 10:12 dice: “Este hombre ofreció un solo sacrificio por los pecados perpetuamente, y se sentó a la diestra de Dios”. ¿Qué autoridad tenía Jesús? “[Dios] lo sentó a su diestra en los lugares celestiales, muy por encima de todo gobierno y autoridad y poder y señorío, [...] y lo hizo cabeza sobre todas las cosas en cuanto a la congregación.” (Efesios 1:20-22.) Como Jesús tenía entonces autoridad real sobre los cristianos, Pablo pudo escribir: “[Jehová] nos libró de la autoridad de la oscuridad y nos transfirió al reino del Hijo de su amor”. (Colosenses 1:13; 3:1.)
15, 16. a) ¿Por qué decimos que Jesús no llegó a ser Rey del Reino de Dios en 33 E.C.? b) ¿Cuándo empezó a gobernar Jesús en el Reino de Dios?
15 Ahora bien, en aquel entonces Jesús no actuó en calidad de Rey y Juez sobre las naciones. Estaba sentado al lado de Dios, a la espera del tiempo en que reinaría en el Reino de Dios. Pablo escribió acerca de él: “¿Con respecto a cuál de los ángeles ha dicho él alguna vez: ‘Siéntate a mi diestra, hasta que coloque a tus enemigos como banquillo para tus pies’?”. (Hebreos 1:13.)
16 Los testigos de Jehová han publicado muchas pruebas de que el tiempo de espera de Jesús terminó en 1914, cuando llegó a ser el gobernante del Reino de Dios en los cielos invisibles. Revelación 11:15, 18 dice: “El reino del mundo sí llegó a ser el reino de nuestro Señor y de su Cristo, y él reinará para siempre jamás. Pero las naciones se airaron, y vino tu propia ira”. Sí, las naciones expresaron su ira unas contra otras durante la I Guerra Mundial. (Lucas 21:24.) Las guerras, los terremotos, las pestes, las escaseces de alimento y otras condiciones que hemos visto desde 1914 confirman que Jesús gobierna en la actualidad en el Reino de Dios y que el fin definitivo del mundo está cerca. (Mateo 24:3-14.)
17. ¿Qué puntos clave hemos establecido hasta ahora?
17 A modo de repaso: puede decirse que Dios se sienta en un trono como Rey, pero en otro sentido puede sentarse en su trono para juzgar. En 33 E.C. Jesús se sentó a la diestra de Dios, y ahora es Rey del Reino. Ahora bien, además de estar reinando, ¿desempeña Jesús también la función de Juez? ¿Por qué debe interesarnos este asunto especialmente hoy día?
18. ¿Qué prueba hay de que Jesús también sería Juez?
18 Jehová tiene el derecho de nombrar jueces, y escogió a Jesús como Juez que satisface sus normas. Así lo expresó Jesús cuando habló de personas que llegarían a vivir en sentido espiritual: “El Padre no juzga a nadie, sino que ha encargado todo el juicio al Hijo”. (Juan 5:22.) No obstante, la función de juez que desempeña Jesús abarca mucho más, pues es el juez de vivos y de muertos. (Hechos 10:42; 2 Timoteo 4:1.) Pablo dijo en cierta ocasión: “[Dios] ha fijado un día en que se propone juzgar la tierra habitada con justicia por un varón [Jesús] a quien ha nombrado, y ha proporcionado a todos los hombres una garantía con haberlo resucitado”. (Hechos 17:31; Salmo 72:2-7.)
19. ¿Por qué es apropiado decir que Jesús se sienta en calidad de Juez?
19 Por lo tanto, ¿tenemos razón para concluir que Jesús se sienta en un trono glorioso específicamente como Juez? Sí. Jesús dijo a los apóstoles: “En la re-creación, cuando el Hijo del hombre se siente sobre su trono glorioso, ustedes los que me han seguido también se sentarán sobre doce tronos y juzgarán a las doce tribus de Israel”. (Mateo 19:28.) Aunque Jesús es actualmente Rey del Reino, su otra labor mencionada en Mateo 19:28 incluirá sentarse en un trono para juzgar durante el Milenio. Entonces juzgará a toda la humanidad, tanto a justos como a injustos. (Hechos 24:15.) Es importante que tengamos esto presente mientras dirigimos la atención a una de las parábolas de Jesús que tiene que ver con nuestros días y nuestra vida.
¿Qué dice la parábola?
20, 21. ¿Qué pregunta hicieron los apóstoles a Jesús en relación con nuestros tiempos, y qué otra pregunta se suscita?
20 Poco antes de la muerte de Jesús, sus apóstoles le preguntaron: “¿Cuándo serán estas cosas, y qué será la señal de tu presencia y de la conclusión del sistema de cosas?”. (Mateo 24:3.) Jesús predijo que habría acontecimientos importantes en la Tierra antes de que ‘viniera el fin’. Poco antes de ese fin, las naciones “verán al Hijo del hombre viniendo sobre las nubes del cielo con poder y gran gloria”. (Mateo 24:14, 29, 30.)
21 ¿Cómo le irá a la gente de esas naciones cuando el Hijo del hombre llegue en su gloria? Veamos lo que nos indica la parábola de las ovejas y las cabras, que empieza con estas palabras: “Cuando el Hijo del hombre llegue en su gloria, y todos los ángeles con él, entonces se sentará sobre su glorioso trono. Y todas las naciones serán reunidas delante de él”. (Mateo 25:31, 32.)
22, 23. ¿Qué hechos indican que la parábola de las ovejas y las cabras no empezó a cumplirse en 1914?
22 ¿Empezó a cumplirse esta parábola cuando Jesús se sentó con poder real en 1914, como hemos entendido por muchos años? Pues bien, Mateo 25:34 dice que es Rey, de modo que es lógico que la parábola empezara a cumplirse cuando Jesús llegó a ser Rey, en 1914. Pero ¿a quiénes juzgó poco después de su entronización? No juzgó a “todas las naciones”, sino que dirigió su atención a los que decían ser “la casa de Dios”. (1 Pedro 4:17.) En conformidad con Malaquías 3:1-3, Jesús, el mensajero de Dios, inspeccionó judicialmente a los cristianos ungidos que todavía quedaban en la Tierra. También era el tiempo de dictar sentencia sobre la cristiandad, que alegaba falsamente ser “la casa de Dios”.c (Revelación 17:1, 2; 18:4-8.) Sin embargo, no hay indicación alguna de que en 1914 o después de ese año Jesús se sentara para juzgar finalmente a las personas de todas las naciones como ovejas o cabras.
23 La labor que Jesús realiza, según la parábola, es juzgar finalmente a todas las naciones. La parábola no indica que ese juicio dure muchos años, como si se hubiera juzgado merecedora de muerte eterna o vida eterna a toda persona que haya muerto durante las pasadas décadas. Es lógico pensar que la mayoría de las personas que han muerto en las últimas décadas están en la sepultura común de la humanidad. (Revelación 6:8; 20:13.) De modo que la parábola representa el tiempo en que Jesús juzga a las personas de “todas las naciones” mientras aún están vivas y en espera de la ejecución de su sentencia judicial.
24. ¿Cuándo se cumplirá la parábola de las ovejas y las cabras?
24 En otras palabras, la parábola tiene un cumplimiento en el futuro, cuando el Hijo del hombre venga en su gloria. Se sentará para juzgar a las personas que estén vivas entonces. Su juicio se basará en lo que hayan demostrado ser. En ese tiempo quedará manifiesta claramente “la distinción entre uno justo y uno inicuo”. (Malaquías 3:18.) La sentencia se dictará y ejecutará dentro de un tiempo limitado. Jesús tomará decisiones justas basadas en lo que cada persona haya demostrado ser. (Véase también 2 Corintios 5:10.)
25. ¿Qué indica Mateo 25:31 al decir que el Hijo del hombre se sienta sobre su glorioso trono?
25 Eso significa, pues, que lo que Mateo 25:31 dice respecto a que Jesús ‘se sienta sobre su glorioso trono’ se cumplirá en el futuro, cuando este poderoso Rey se siente para dictar y ejecutar sentencia sobre las naciones. Sí, la escena de juicio que implica a Jesús descrita en Mateo 25:31-33, 46 es comparable a la que menciona el capítulo 7 de Daniel, en la que el Rey entronizado, el Anciano de Días, se sentó para cumplir con su papel de Juez.
26. ¿Qué nueva explicación de la parábola ha llegado a entenderse?
26 Este modo de entender la parábola de las ovejas y las cabras indica que su juicio tendrá lugar en el futuro. Será después de que estalle “la tribulación” mencionada en Mateo 24:29, 30 y el Hijo del hombre “llegue en su gloria”. (Compárese con Marcos 13:24-26.) Entonces, al final de todo el sistema inicuo, Jesús juzgará, dictará sentencia y la ejecutará. (Juan 5:30; 2 Tesalonicenses 1:7-10.)
27. ¿Qué debería interesarnos respecto a la última parábola de Jesús?
27 Esta información aclara nuestro modo de entender el cumplimiento de la parábola de Jesús en lo que respecta a cuándo se juzgará a las ovejas y las cabras. Ahora bien, ¿qué efecto tiene en nosotros, los que predicamos con celo las buenas nuevas del Reino? (Mateo 24:14.) ¿Hace que nuestra obra sea menos importante, o supone una mayor responsabilidad? El siguiente artículo mostrará cómo nos atañe.
[Notas a pie de página]
a La palabra que se traduce “Tribunal” en Daniel 7:10, 26 también aparece en Esdras 7:26 y Daniel 4:37; 7:22.
b Debido a que algunos cristianos llevaban a otros compañeros a los tribunales, Pablo preguntó: “¿Es a los hombres a quienes se menosprecia en la congregación a quienes ustedes ponen por jueces [literalmente, “están sentando”]?”. (1 Corintios 6:4.)
c Véase Apocalipsis... ¡se acerca su magnífica culminación!, páginas 56, 73, 235-245, 260, editado por Watchtower Bible and Tract Society of New York, Inc.
¿Recuerda usted?
◻ ¿En qué sentido sirve Jehová de Rey y Juez?
◻ ¿Qué dos significados puede tener la expresión ‘sentarse en un trono’?
◻ ¿Qué pensábamos anteriormente respecto al tiempo del cumplimiento de las palabras de Mateo 25:31, pero qué base hay para modificar nuestro modo de entenderlas?
◻ ¿Cuándo se sienta en su trono el Hijo del hombre, según indica Mateo 25:31?