Lealtad... ¿a qué precio?

“Con alguien leal tú actuarás en lealtad.” (SALMO 18:25.)

 1, 2. a) ¿Qué es lealtad, y cómo afectan nuestra vida sus diferentes facetas? b) ¿Por qué es bueno tener a Jehová como nuestro Ejemplo sobresaliente?

FIDELIDAD, deber, amor, obligación, devoción. ¿Qué tienen en común esas palabras? Son diferentes facetas o aspectos de la lealtad. La lealtad es una cualidad piadosa que proviene de una devoción sincera. Sin embargo, para muchos hoy día la lealtad significa poco. La fidelidad al cónyuge, las responsabilidades para con parientes de edad avanzada, la lealtad del empleado a su patrono... todo se ve con indiferencia y a menudo se transige en cuanto a ello. ¿Y qué sucede cuando surge un conflicto entre lealtades? Hace poco, un tenedor de libros de Inglaterra perdió su empleo porque al hablar con los inspectores de impuestos les dijo la verdad sobre el estado financiero de su compañía.

² Es fácil el sencillamente hablar sobre la lealtad, pero la lealtad verdadera tiene que estar apoyada por acción libre del transigir por temor. Puesto que somos humanos imperfectos, a menudo fallamos en esto. Por eso es bueno que consideremos el ejemplo de Jehová Dios mismo, cuya lealtad no se puede poner en tela de juicio con éxito.

Ejemplo de lealtad

 3. ¿Cómo ha mostrado Jehová lealtad al propósito que declaró en Génesis 3:15?

³ Cuando Adán pecó, Jehová expresó claramente su propósito de redimir a la familia humana todavía no nacida. La base de esa acción fue su amor a su creación humana. (Juan 3:16.) Al tiempo debido, Jesucristo, la prometida descendencia o simiente predicha en Génesis 3:15, resultó ser el sacrificio de rescate, y hubiera sido inconcebible que Jehová no cumpliera su propósito expresado. Si aceptamos el sacrificio de Jesús, nuestra fe no nos conducirá a la desilusión. (Romanos 9:33.)

 4. ¿Cómo ha mostrado Jehová lealtad a Jesús, y con qué resultado?

⁴ La lealtad de Jehová a Jesús fortaleció muchísimo al Hijo durante su tiempo en la Tierra. Jesús sabía que tenía que afrontar la muerte, y estaba firmemente resuelto a permanecer leal a su Dios hasta el fin. Al tiempo de su bautismo y ungimiento con espíritu santo se le reveló mayor conocimiento de la existencia que había tenido antes de ser humano. En la noche que fue traicionado, pidió en oración que su Padre celestial lo recibiera de nuevo en el cielo, con ‘la gloria que había tenido al lado de Jehová antes que el mundo fuera’. (Juan 17:5.) ¿Cómo sería posible eso? Solo si Jehová no abandonaba a su Hijo en el sepulcro, si evitaba que viera la corrupción. Jehová lo levantó de entre los muertos a la inmortalidad, y así cumplió lealmente la promesa profética registrada en Salmo 16:10: “No dejarás mi alma en el Seol”. (Hechos 2:24-31; 13:35; Revelación 1:18.)

 5. ¿Qué otros actos de lealtad se relacionan con las promesas de Jehová a Jesús?

⁵ También después de su resurrección Jesús sabía que podía confiar en la declaración de Jehová de que ‘colocaría a sus enemigos como banquillo para sus pies’. (Salmo 110:1.) El tiempo para eso llegó en 1914, al terminar “los tiempos señalados de las naciones”, cuando el Reino fue establecido en los cielos. La prometida dominación de Jesús sobre sus enemigos comenzó cuando él echó del cielo a Satanás y sus demonios. Culminará cuando estos sean abismados por mil años y ‘los reyes de la tierra y sus ejércitos’ hayan sido destruidos. (Lucas 21:24; Revelación 12:7-12; 19:19; 20:1-3.)

 6. ¿Qué esperanza segura nos extiende Dios, y cómo podemos mostrar que la apreciamos?

⁶ El salmista exhortó: “Espera en Jehová y guarda su camino, y él te ensalzará para tomar posesión de la tierra”. (Salmo 37:34.) Podemos confiar en que Jehová seguirá cumpliendo su palabra, y en que a través del fin de este mundo inicuo salvará a hombres, mujeres y niños que ‘guardan su camino’. En el hebreo original esa frase comunica la idea tanto de diligencia como de fidelidad al servir a Jehová. Por lo tanto, este no es el tiempo de cansarnos ni de renunciar a privilegios de servicio que se nos dan. Es el tiempo de esforzarnos en servicio leal a nuestro Dios y su Reino. (Isaías 35:3, 4.) Hay ejemplos excelentes que pueden animarnos. Consideremos algunos.

Patriarcas que reflejaron lealtad

 7, 8. a) ¿Qué asignaciones dio Jehová a Noé y su familia? b) ¿Cómo demostró que era digna de la protección divina durante el diluvio mundial la casa de Noé?

⁷ Cuando Jehová se propuso destruir a la sociedad humana inicua mediante un diluvio, hizo un pacto con el cabeza de familia patriarcal Noé para la conservación de su familia y la continuación de la vida en esta Tierra. (Génesis 6:18.) Noé agradecía la perspectiva de recibir protección divina, pero él y su familia tenían que demostrar que eran dignos de ella. ¿Cómo? Al hacer lo que Jehová mandaba. Primero se encararon con la enorme tarea de construir el arca. Una vez terminada, Noé tenía que llenarla con representantes del reino animal y con suficiente alimento para sustentarlos por un largo período. Pero eso no era todo. Durante el largo tiempo de la preparación Noé hizo cuanto pudo en una obra de predicar sin precedente, y advirtió acerca del juicio divino venidero. (Génesis, capítulos 6 y 7; 2 Pedro 2:5.)

⁸ La Biblia nos dice que “Noé procedió a hacer conforme a todo lo que le había mandado Dios. Hizo precisamente así”. (Génesis 6:22; 7:5.) Noé y su familia demostraron su lealtad al cumplir con sus asignaciones. Su espíritu abnegado significó que aprovecharon bien su tiempo, pero la tarea era dura y la predicación difícil. Por no tener hijos antes del Diluvio, los hijos de Noé y sus respectivas esposas pudieron concentrarse en el trabajo asignado y en coordinar su actividad. Aquel Diluvio cataclísmico puso fin, con justicia, a un mundo inicuo. Solo Noé, su esposa y sus tres hijos y tres nueras sobrevivieron. Podemos alegrarnos de que fueran leales a Dios y a sus instrucciones, pues cada uno de nosotros ha descendido directamente de Noé por alguno de sus hijos: Sem, Cam o Jafet. (Génesis 5:32; 1 Pedro 3:20.)

 9. a) ¿Cómo fue una prueba para la lealtad de Abrahán la que Jehová le impuso? b) ¿Cómo manifestó lealtad Isaac al respecto?

⁹ Cuando Abrahán se preparó para ofrecer a Isaac como sacrificio, actuó en obediencia fiel al mandato de Jehová. ¡Y qué prueba de lealtad fue aquella! Sin embargo, Jehová detuvo la mano de Abrahán y le dijo: “Ahora sé de veras que eres temeroso de Dios, puesto que no has retenido de mí a tu hijo, tu único”. No obstante, hacemos bien en reflexionar sobre lo que sucedió antes de eso. Durante su viaje de tres días al monte Moria, sin duda Abrahán tuvo suficiente tiempo para pesar los asuntos y cambiar de parecer. ¿Y qué se puede decir de Isaac, quien llevó la leña para el sacrificio y permitió que su padre lo atara de manos y pies? No vaciló en su lealtad a su padre, Abrahán, ni cuestionó el papel que tenía que desempeñar, aunque parecía que su proceder leal le costaría la vida. (Génesis 22:1-18; Hebreos 11:17.)

Lealtad cristiana

10, 11. ¿Qué ejemplos de lealtad dan los cristianos primitivos?

¹⁰ Jehová siempre ha obrado con verdadera lealtad. “Háganse imitadores de Dios”, exhorta el apóstol Pablo. (Efesios 5:1, 2.) Tal como respondieron los patriarcas, así habrían de responder los cristianos. Los cristianos primitivos dieron un ejemplo excelente respecto a la adoración leal, como lo muestra la siguiente experiencia.

¹¹ El emperador romano Constancio I, padre del emperador Constantino, parecía respetar profundamente a los seguidores de Jesucristo. Para someter a prueba la lealtad de los cristianos que servían en su palacio, les dijo que podían permanecer en su servicio solo si concordaban en ofrecer sacrificios a ídolos. Les informó que si no lo hacían los despediría y castigaría. Mediante esta simple táctica Constancio quiso identificar a los que nunca transigirían en cuanto a su lealtad. Los que fueron leales a Dios y sus principios siguieron rindiendo servicio al emperador, y algunos hasta llegaron a ser consejeros de confianza. Los que fueron desleales al mandato de Dios fueron despedidos ignominiosamente.

12. ¿Cómo deben mostrar lealtad los superintendentes cristianos, y por qué es esencial esto para el bienestar de la congregación?

¹² Aunque debe ser una característica en la vida de todo cristiano, la lealtad se menciona específicamente en Tito 1:8 entre las cualidades necesarias para que un hombre pueda ser superintendente cristiano. William Barclay dice que hó·si·os, la palabra griega traducida aquí “leal”, describe “al hombre que obedece las leyes eternas que eran y que son más importantes que toda ley humana”. Es esencial que los ancianos desplieguen tal lealtad al obedecer las leyes de Dios. Este buen ejemplo ayudará a la congregación a crecer y a estar lo suficientemente fuerte como para afrontar pruebas y presiones que quizás amenacen a la congregación como cuerpo o a sus miembros individuales. (1 Pedro 5:3.) Los ancianos nombrados tienen para con el rebaño la gran responsabilidad de nunca transigir en cuanto a su lealtad a Jehová, pues se aconseja a la congregación que ‘imite la fe de ellos’. (Hebreos 13:7.)

Lealtad... ¿a qué precio?

13. ¿Qué significa el axioma: “Todo hombre tiene su precio”, y qué ejemplos parecen confirmar esto?

¹³ “Todo hombre tiene su precio” es un axioma atribuido a sir Robert Walpole, primer ministro británico del siglo XVIII. Resume bien el hecho de que en el transcurso de la historia a menudo ha sucedido que la lealtad ha sido vendida por ganancia egoísta. Considere a William Tyndale, traductor de la Biblia, quien cometió el error de aceptar como amigo leal a Henry Phillips. En 1535 Phillips traicionó deslealmente a Tyndale y lo entregó a sus enemigos, lo cual resultó en el encarcelamiento inmediato de Tyndale y su muerte prematura. Un historiador dice que Phillips, probablemente un agente del rey de Inglaterra o de los católicos ingleses, “recibió una buena suma por aquella acción semejante a la de Judas”. Por supuesto, el historiador aludía a Judas Iscariote, quien aceptó 30 piezas de plata como el precio por traicionar a Jesucristo. No obstante, al considerar estos ejemplos no debemos concluir que el “precio” por la lealtad de alguien siempre sea dinero. No es así.

14. ¿Cómo fue sometida a prueba la lealtad de José a Jehová, y qué resultado tuvo la prueba?

¹⁴ Cuando la esposa de Potifar importunó a José para que ‘se acostara con ella’, la lealtad de él a Jehová fue sometida a prueba. ¿Qué haría? Puesto que conocía bien los principios implicados, José salió corriendo de la casa, resuelto a nunca “cometer esta gran maldad y realmente pecar contra Dios”. La posibilidad de experimentar placer sexual no logró que José fuera desleal a su Dios, Jehová. (Génesis 39:7-9.)

15. ¿Cómo manifestó deslealtad Absalón, y con qué consecuencias?

¹⁵ Sin embargo, hay otros peligros; la ambición puede socavar la lealtad. Ese fue el motivo tras la rebelión de Absalón contra su padre, el rey David. Por trama e intriga Absalón procuró ganarse el favor del pueblo. Con el tiempo formó un ejército para pelear contra los apoyadores leales de su padre. Absalón murió a manos de Joab, lo cual puso fin a su deslealtad a su padre, David, pero ¡qué precio tuvo que pagar por su intento de derribar el arreglo teocrático! (2 Samuel 15:1-12; 18:6-17.)

La lealtad que no tiene precio

16. ¿Qué revela 2 Corintios 11:3 sobre los motivos de Satanás?

¹⁶ Aunque Satanás alega que toda persona tiene su precio, lo cual fue cierto en el caso de Absalón, no fue cierto de José y nunca ha sido cierto de los adoradores leales de Jehová. Con todo, Satanás ofrece cualquier cosa para quebrantar nuestra lealtad al Creador. El apóstol Pablo expresó su temor de que “de algún modo, así como la serpiente sedujo a Eva por su astucia”, nuestro modo de pensar fuera corrompido, lo cual nos llevaría a transigir en cuanto a nuestra lealtad a Jehová y su adoración. (2 Corintios 11:3.)

17. ¿Qué han aceptado algunos a cambio de sus inestimables privilegios de servicio?

¹⁷ Es apropiado que nos preguntemos: ‘¿Aceptaría yo algún precio a cambio de mi privilegio de adorar lealmente a mi Creador?’. Es lamentable que, a diferencia de José, algunos que eran siervos dedicados de Jehová aceptaron muy poco a cambio de su privilegio. Hasta algunos ancianos han cambiado sus inestimables privilegios de servicio sagrado por el disfrute temporal de placeres sensuales inmorales. Fueran ancianos o no, muchos de los que han hecho esto han perdido —sin poder ganar de nuevo— la unidad familiar, el amor y respeto de la congregación y la aprobación de Jehová... el Mismísimo que puede suministrar la fortaleza que uno necesita para mantenerse leal y resistir toda tentación que traiga Satanás. (Isaías 12:2; Filipenses 4:13.)

18. ¿Por qué es importante prestar atención a la advertencia de 1 Timoteo 6:9, 10?

¹⁸ Otros, resueltos ambiciosamente a progresar en el mundo, se han “acribillado con muchos dolores” a pesar de las advertencias claras de la Biblia. (1 Timoteo 6:9, 10.) Demas, cristiano a quien Pablo mencionó, salió perdiendo temporal o permanentemente debido a eso. (2 Timoteo 4:10.) Nunca podemos violar nuestra integridad a Jehová sin experimentar resultados desastrosos. “De Dios uno no se puede mofar. Porque cualquier cosa que el hombre esté sembrando, esto también segará.” (Gálatas 6:7.)

19, 20. a) Mencione peligros relacionados con pasar demasiado tiempo ante el televisor. b) ¿Qué ejemplo ha dado una familia de Testigos al respecto?

¹⁹ A veces el precio se presenta de manera muy sutil. Por ejemplo, un informe procedente de los Estados Unidos dice que muchas familias pasan cerca de la mitad del tiempo en que están despiertas en su hogar viendo programas de televisión, y especialmente los jóvenes son adictos a esto. Si ante todo el cristiano alimentara su mente con lo que viera en la televisión, con la inmoralidad sexual y la violencia que se presentan, eso pronto podría socavar sus principios cristianos. Fácilmente podría llevarlo a la deslealtad y a que se apartara de Jehová. Esa mala compañía sí echa a perder los hábitos útiles. (1 Corintios 15:33.) No debemos olvidar que las Escrituras nos aconsejan que dediquemos tiempo al estudio de la Palabra de Jehová y a meditar sobre ella. ¿Vale la pena pasar demasiado tiempo descansando enfrente de un aparato de televisión en vez de dedicarlo a adquirir conocimiento que conduce a uno a la vida eterna como adorador leal de Jehová? Muchos que han llegado a conocer la verdad hoy han tenido que hacer grandes ajustes en su modo de pensar al respecto. (1 Timoteo 4:15, 16; 2 Timoteo 2:15.)

²⁰ Takashi es un negociante japonés que vive en Inglaterra. Solía pasar de tres a cuatro horas la mayoría de las noches ante el televisor con su familia. Después que él y su esposa se bautizaron, hace tres años, él se resolvió a dar más importancia a su estudio bíblico personal y al que tenía con su familia. Al reducir el tiempo que pasaba ante la televisión a un promedio de solo 15 o 30 minutos diarios, pudo dar excelente dirección a su familia. Aunque Takashi tiene que usar dos Biblias al estudiar, una en inglés y la otra en japonés, su progreso espiritual ha sido rápido, y ahora es siervo ministerial en una congregación de habla inglesa. Su esposa es precursora auxiliar. “Para salvaguardar la espiritualidad de nuestros dos hijitos —dice él—, cada día también controlo lo que mi esposa y yo les permitimos ver en la televisión.” Esa autodisciplina trae recompensas.

21. ¿Qué sabemos sobre las tácticas de Satanás, y cómo podemos protegernos de ellas?

²¹ Podemos estar seguros de esto: Satanás conoce nuestras debilidades, quizás mejor que nosotros mismos. Va a hacer cuanto pueda para que transijamos en cuanto a nuestra lealtad a Jehová, o para debilitarla. (Compárese con Mateo 4:8, 9.) Entonces, ¿cómo podemos protegernos? Mediante mantener constantemente ante nosotros nuestra dedicación, y deleitarnos en desarrollar nuestras aptitudes mientras efectuamos nuestro ministerio de satisfacer las necesidades espirituales de otras personas. Como siervos leales de Jehová tenemos que mantenernos ocupados en su servicio y seguir la guía de su santa Palabra en todo momento. Esto nos ayudará a apegarnos a nuestra firme resolución de no permitir que ningún precio que Satanás ofrezca socave nuestra lealtad a Dios. (Salmo 119:14-16.)

¿Qué contestaría usted?

◻ ¿Cómo han mostrado lealtad Jehová y Jesús?

◻ ¿Qué otros ejemplos bíblicos de lealtad hay?

◻ ¿Qué pudiera ofrecernos Satanás, o qué podría intentar?

◻ ¿Cómo podemos fortalecernos para seguir siendo leales como adoradores de Jehová?