El punto de vista bíblico
¿Qué tiene de malo la poligamia?
Los problemas de Jane comenzaron cuando su padre encontró trabajo en una ciudad.a Allí, lejos de su hogar en la zona rural de África, empezó a vivir con otra mujer. “La vida no era fácil para nosotros —explica Jane—, pues mi padre no nos mantenía; estaba manteniendo a su segunda esposa y a los hijos de esta. En mis últimos años de escuela, muchas veces me acostaba por la noche con hambre. Teníamos la casa en muy mal estado. Los fines de semana vendía fruta para ayudar a mi madre, pero no podíamos vivir de nuestros ingresos. Lloraba todas las noches.”
LA EXPERIENCIA de Jane señala las penurias a las que muchas veces se ven sometidas personas inocentes debido a un matrimonio polígamo. En la lengua de los habitantes de Venda (enclave territorial de África del Sur) existe el término muhadzinga, con el que una esposa puede calificar a otra en una familia polígama. Se deriva de una palabra que significa “achicharrar”, lo que describe muy bien los problemas que suelen surgir entre esposas a causa de la poligamia.
“Pero, ¿es mala la poligamia? —quizás pregunte usted—. Entonces, ¿por qué fueron polígamos algunos personajes bíblicos conocidos?”
La poligamia en la Biblia
Dios permitió la poligamia por un tiempo porque contribuía al cumplimiento de la promesa dada a Abrahán: “Haré de ti una nación grande”. (Génesis 12:2; Éxodo 1:7.) En aquella época su esposa Sara no tenía hijos y por eso con el tiempo le suplicó a Abrahán que tuviese descendencia con su esclava Agar. No obstante, la Biblia explica con claridad los problemas que esto produjo en la casa de Abrahán. (Génesis 16:5, 6; 21:8-10.)
En cuanto a Jacob, el nieto de Abrahán, pretendía casarse con una sola mujer: Raquel. (Génesis 44:27.) Fue su suegro Labán quien lo engañó para que se casase con sus dos hijas: Raquel y Lea. (Génesis 29:21-28.) A instancias de ellas, Jacob tuvo relaciones con sus siervas Bilhá y Zilpá y estas le dieron a luz hijos. Pero la Biblia tampoco oculta en este caso los numerosos problemas que ocasionó la poligamia en la familia numerosa de Jacob. (Génesis 29:30, 31; 30:1-3, 15, 16, 20; 37:2-4; 44:20-29.)
La Biblia también registra la historia de Elqaná (el padre del profeta Samuel) y de sus dos esposas: Ana y Peniná. Peniná trataba con tanta crueldad a Ana, que esta muchas veces lloraba y perdía el apetito. Por su parte, parece que Peniná estaba celosa porque Elqaná mostraba más amor por Ana. (1 Samuel 1:4-7.)
No hay duda de que la poligamia ha causado dificultades. Aunque en tiempos antiguos era una costumbre tolerada en el pueblo de Dios, la Biblia no deja lugar a dudas sobre el propósito original de Dios, si era que el hombre fuese polígamo o no.
La norma original de Dios
Para comprender la norma de Dios respecto al matrimonio tenemos que remontarnos al comienzo de la historia humana. La Palabra de Dios muestra la atracción que Adán sintió cuando le fue presentada Eva, su única y recién creada esposa. “Esto por fin es hueso de mis huesos y carne de mi carne”, expresó. “Por eso —continúa la Biblia— el hombre dejará a su padre y a su madre, y tiene que adherirse a su esposa, y tienen que llegar a ser una sola carne.” (Génesis 2:21-24.)
Respecto a los matrimonios cristianos, Jesús restableció la norma original de Dios: la monogamia. (Mateo 19:4, 5.) Asimismo, mostró que las personas casadas deberían adherirse a partir de entonces a este criterio divino. Explicó: “Ya no son dos, sino una sola carne. Por lo tanto, lo que Dios ha unido bajo un yugo, no lo separe ningún hombre”. (Mateo 19:6.) Por consiguiente, el cristiano debe proteger el vínculo que existe entre él y su cónyuge legal, el que ambos sean “una sola carne”.b Las relaciones sexuales polígamas con una tercera persona profanarían esa institución divina y por lo tanto están prohibidas en la congregación cristiana. (1 Corintios 5:11; 6:9, 16, 18; Hebreos 13:4.)
No sorprende entonces que los cristianos casados que la Biblia menciona con favor tuvieran una sola esposa. (1 Corintios 9:5; 1 Timoteo 3:2.) La Biblia explica: “Que cada hombre tenga su propia esposa [no esposas] y que cada mujer tenga su propio esposo [no un hombre que ya tenga una esposa legal]”. (1 Corintios 7:2; Proverbios 5:18.)
Al aprender que la Biblia prohíbe la poligamia algunos hombres han dado pasos valerosos para poner su vida en armonía con la voluntad de Dios. Considere el caso de John, quien vive en una ciudad del África central.c Tenía tres esposas, pero al estudiar la Biblia con los testigos de Jehová habló con ellas y tomó una decisión personal. Una vez que hubo dispuesto todo lo necesario para que su segunda y tercera esposa, así como los hijos que tuvo con estas, estuvieran atendidos en el futuro, estos regresaron a sus anteriores hogares en la parte rural de África. De este modo John calificó para el privilegio de servir a Dios junto con la congregación local. Pero también experimentó otras bendiciones.
“Cada noche —explica él—, cuando regresaba a mi hogar, me encontraba con una casa llena de problemas. Por ejemplo, una esposa quizás había criticado a los hijos de otra, y los chicos defendían un bando o el otro. Lo primero que tenía que hacer era resolver el lío. Ahora que he aprendido a vivir con una sola esposa, mi hogar es un lugar de descanso y paz.”
Desde luego, vale la pena hacer cualquier esfuerzo con tal de conseguir la paz y la bendición de Dios. (Romanos 12:1, 2.)
[Notas a pie de página]
a Este no es su verdadero nombre.
b El Diccionario teológico del Nuevo Testamento señala que la expresión griega que se traduce “una sola carne” en Mateo 19:5b tiene un significado especial como traducción de las palabras hebreas utilizadas en Génesis 2:24 y denota “una comunión total entre hombre y mujer, que no puede romperse sin perjuicio del ser mismo del hombre”.
c Este no es su verdadero nombre.
[Comentario en la página 27]
“Los celos sexuales y las discusiones son problemas comunes en la familia [polígama]; y un esposo debe ser sabio, fuerte, diplomático y perspicaz para conservar la armonía.” (The New Encyclopædia Britannica)
[Fotografía en la página 26]
Terracota de una familia africana; marido ibo con sus esposas
[Reconocimiento]
Cortesía de The British Museum