BARAQUÍAS
(Jehová Ha Bendecido).
Padre del Zacarías a quien se asesinó “entre el santuario y el altar”. (Mt 23:35; Lu 11:50, 51.)
La expresión “hijo de Baraquías” no se halla en el libro de Lucas, y el Códice Sinaítico (escriba original) también la omite en el relato de Mateo. Se ha dicho que Jehoiadá, el padre de un Zacarías que fue asesinado, pudo haber tenido dos nombres, como ocurre en el caso de otros personajes bíblicos. (Compárese Mt 9:9 con Mr 2:14; Mt 10:2, 3.)
Por lo general se entiende que Jesús aquí se refirió a Zacarías, “hijo de Jehoiadá el sacerdote”. (2Cr 24:20-22.) Esta es la conclusión más lógica, puesto que Crónicas es el último libro del canon judío tradicional, de modo que Abel fue el primero y Zacarías el último de los hombres justos asesinados que se registran en las Escrituras Hebreas. Según 2 Crónicas 24:21, a Zacarías se le asesinó “en el patio de la casa de Jehová”. El altar de la ofrenda quemada estaba en el patio interior, frente a la entrada del santuario, lo que correspondería con la ubicación que dio Jesús del incidente: “Entre el santuario y el altar”.
Tanto en el caso de Abel como en el de Zacarías, se profetizó que habría un ajuste de cuentas por derramamiento de sangre. (Gé 4:10; 2Cr 24:22.) Hubo también un notable paralelo entre lo sucedido en los días de Zacarías, el hijo de Jehoiadá, y los acontecimientos de la generación que vivía cuando Jesús pronunció esas palabras. Mientras se estaba muriendo, Zacarías dijo: “Jehová lo vea y lo reclame”. Sus palabras proféticas empezaron a cumplirse muy pronto. Jehová dio el poderoso ejército de Judá en mano de una pequeña fuerza siria, que arruinó a los príncipes de Judá y se llevó su despojo. Los sirios ejecutaron actos de juicio en Jehoás y le dejaron muy enfermo, después de lo cual sus siervos lo asesinaron. (2Cr 24:23-25.) Tras haber puesto de manifiesto la culpa de sangre de aquellos a quienes hablaba, Jesús dijo: “Todas estas cosas vendrán sobre esta generación”. (Mt 23:36.) La profecía de Jesús se cumplió en Jerusalén y Judea en gran escala durante los años 70 a 73 E.C.