La resurrección de Jesús: ¿por qué es tan importante?
“Ha sido levantado.” (MAT. 28:6)
1, 2. a) ¿Qué querían saber algunos líderes religiosos? b) ¿Qué les contestó Pedro? (Vea la ilustración del principio.) c) ¿Cómo es que Pedro pudo responder con tanta valentía?
POCOS días después de morir Jesús, el apóstol Pedro tuvo que enfrentarse a un grupo de poderosos líderes religiosos que le exigían una explicación. Eran los mismos líderes judíos que habían tramado la muerte de Jesús. Pedro acababa de curar a un hombre que había nacido paralítico, y ellos quisieron saber quién le había dado el poder para hacerlo. Con valor, les contestó: “Jesucristo el Nazareno, a quien ustedes fijaron en un madero, pero a quien Dios levantó de entre los muertos, por este se halla este hombre de pie aquí sano delante de ustedes” (Hech. 4:5-10).
2 Pedro, poco antes, había negado tres veces conocer a Jesús porque sentía miedo (Mar. 14:66-72). ¿Cómo es que ahora pudo responder con tanta valentía? Por un lado, gracias al espíritu santo, pero también porque estaba convencido de que Jesús había resucitado y estaba vivo. Pero ¿por qué estaba tan seguro? ¿Y por qué podemos estarlo nosotros?
3, 4. a) ¿Qué resurrecciones hubo antes de los apóstoles? b) ¿Qué resurrecciones hizo Jesús?
3 Mucho antes de que nacieran los apóstoles de Jesús, ya había habido resurrecciones. Así que la idea de que los muertos pudieran volver a vivir no era nueva para ellos. Por ejemplo, sabían que los profetas Elías y Eliseo habían resucitado a muertos gracias al poder de Dios (1 Rey. 17:17-24; 2 Rey. 4:32-37). Un hombre incluso volvió a vivir cuando, después de que lo arrojaran a la tumba de Eliseo, su cuerpo tocó los huesos de este (2 Rey. 13:20, 21). Los primeros cristianos creían que estos relatos eran ciertos, tal como nosotros creemos que lo que dice la Palabra de Dios es cierto.
4 ¿Verdad que a todos nos conmueven las resurrecciones que hizo Jesús? Recordemos, por ejemplo, la ocasión en que devolvió la vida al único hijo de una viuda. ¿Imaginamos la cara de asombro de ella? (Luc. 7:11-15.) Jesús también resucitó a una niña de 12 años. ¡Qué alegría sintieron sus desconsolados padres al ver que estaba viva de nuevo! (Luc. 8:49-56.) Y pensemos en los que vieron a Lázaro salir de la tumba en perfecto estado. ¡Qué emocionante! (Juan 11:38-44.)
LA RESURRECCIÓN DE JESÚS FUE DIFERENTE
5. ¿En qué se diferenció la resurrección de Jesús de las anteriores?
5 Los apóstoles sabían que la resurrección de Jesús era diferente de las anteriores. Hasta entonces, quienes habían resucitado lo habían hecho con un cuerpo de carne y hueso y, finalmente, murieron de nuevo. Pero a Jesús se le dio un cuerpo espiritual incorruptible, que no puede deteriorarse ni morir (lea Hechos 13:34). Pedro escribió que Jesús había muerto “en la carne” y resucitado “en el espíritu”. Lo que es más, añadió que estaba “a la diestra de Dios” en el cielo y que “ángeles y autoridades y poderes fueron sujetados a él” (1 Ped. 3:18-22). Las resurrecciones anteriores fueron extraordinarias, pero la de Jesús fue sin duda el mayor milagro de la historia.
6. ¿Qué efecto tuvo la resurrección de Jesús en sus discípulos?
6 La resurrección de Jesús tuvo un profundo efecto en sus discípulos. A diferencia de lo que creían sus enemigos, Jesús ya no estaba muerto. Ahora era un poderoso espíritu al que ningún hombre podía hacer daño. Además, su resurrección había demostrado que era el Hijo de Dios. Como resultado, sus discípulos dejaron de sentir tristeza y miedo, y se llenaron de alegría y valor. Podían proclamar las buenas nuevas con convicción. ¡Jesús estaba vivo y el propósito de Jehová se cumpliría sin falta!
7. a) ¿Qué está haciendo Jesús actualmente? b) ¿Qué preguntas vamos a contestar?
7 Los siervos de Jehová sabemos que Jesús no fue solo un buen hombre que hizo cosas sorprendentes. Actualmente está dirigiendo la predicación mundial de las buenas nuevas. Y, como Rey del Reino de Dios, pronto limpiará la Tierra de toda maldad y la transformará en un paraíso donde la gente vivirá para siempre (Luc. 23:43). Si Jesús no hubiera resucitado, nada de esto sería posible. Ahora bien, ¿qué razones tenemos para creer que resucitó y está vivo? ¿Y por qué es importante para nosotros su resurrección?
JEHOVÁ TIENE PODER SOBRE LA MUERTE
8, 9. a) ¿Por qué querían los líderes religiosos judíos que se vigilara la tumba de Jesús? b) ¿Qué pasó cuando las mujeres llegaron?
8 Tras la muerte de Jesús, los sacerdotes principales y los fariseos se presentaron ante Pilato y le dijeron: “Señor, hemos recordado que ese impostor dijo mientras todavía estaba vivo: ‘Después de tres días he de ser levantado’. Por lo tanto, manda que se asegure el sepulcro hasta el día tercero, para que nunca vengan sus discípulos, y lo hurten, y digan al pueblo: ‘¡Fue levantado de entre los muertos!’, y esta última [mentira] será peor que la primera”. Pilato accedió y les dejó poner guardias para vigilar la tumba (Mat. 27:62-66).
9 El cuerpo de Jesús estaba en una tumba excavada en la roca y sellada con una gran piedra. Allí, muerto y enterrado, es donde los líderes religiosos querían que se quedara. Pero Jehová tenía otra cosa en mente. Cuando, al tercer día, María Magdalena y la otra María fueron a la tumba, se encontraron con que la piedra había sido retirada y un ángel estaba sentado sobre ella. El ángel les dijo que miraran dentro de la tumba para comprobar que estaba vacía. “No está aquí —les aclaró—, porque ha sido levantado.” (Mat. 28:1-6.) ¡Jesús estaba vivo!
10. ¿Qué pruebas sobre la resurrección de Jesús mencionó Pablo?
10 Lo que sucedió durante los siguientes cuarenta días confirmó que Jesús, en efecto, había resucitado. En su primera carta a los cristianos de Corinto, el apóstol Pablo mencionó algunas pruebas de ello. Escribió: “Les transmití, entre las primeras cosas, lo que yo también recibí: que Cristo murió por nuestros pecados según las Escrituras; y que fue enterrado, sí, que ha sido levantado al tercer día según las Escrituras; y que se apareció a Cefas, entonces a los doce. Después de eso se apareció a más de quinientos hermanos de una vez, de los cuales la mayoría permanece hasta ahora, pero algunos se han dormido en la muerte. Después de eso se apareció a Santiago, luego a todos los apóstoles; pero último de todos también se me apareció a mí como si fuera a uno nacido prematuramente” (1 Cor. 15:3-8).
CUATRO RAZONES POR LAS QUE SABEMOS QUE JESÚS RESUCITÓ
11. ¿En qué sentido ocurrió “según las Escrituras” la resurrección de Jesús?
11 La resurrección de Jesús ocurrió “según las Escrituras”. La Palabra de Dios había predicho que Jesús resucitaría. Por ejemplo, David habló de alguien, a quien llamó “leal”, que no sería dejado “en el Seol”, en la tumba (lea Salmo 16:10). ¿A quién se refería? En el Pentecostés del año 33 de nuestra era, el apóstol Pedro dejó claro que se refería a Jesús, pues dijo: “David [...] vio de antemano y habló respecto a la resurrección del Cristo, que ni fue abandonado en el Hades ni su carne vio corrupción” (Hech. 2:23-27, 31).
12. ¿Quiénes vieron a Jesús resucitado?
12 Muchas personas vieron a Jesús resucitado. Durante los cuarenta días que siguieron a su resurrección, Jesús se apareció a sus discípulos en el jardín donde estaba su tumba, en el camino a Emaús y en otros lugares (Luc. 24:13-15). En ciertas ocasiones habló con una sola persona —por ejemplo, con Pedro— y en otras se dirigió a varias. De hecho, ¡una vez se apareció a más de quinientas! Desde luego, nadie puede dudar de lo que vieron tantos testigos.
13. ¿Cómo demostraron los discípulos que estaban convencidos de que Jesús había resucitado?
13 Los discípulos de Jesús predicaron con convicción que él había resucitado. Muchos fueron perseguidos, sufrieron o incluso murieron por proclamar que Jesús estaba vivo. Recordemos que Pedro defendió su resurrección ante los líderes religiosos que odiaban a Cristo y que habían tramado su ejecución. ¿Habría arriesgado su vida por una mentira? Tanto Pedro como los demás discípulos estaban seguros de que Jesús vivía y dirigía la predicación. Es más, su resurrección les garantizó que ellos también serían resucitados. Así sucedió con Esteban, quien murió convencido de que volvería a vivir (Hech. 7:55-60).
14. ¿Qué lo convence a usted de que Jesús está vivo?
14 Tenemos pruebas de que Jesús está gobernando como Rey y es Cabeza de la congregación cristiana. El cristianismo verdadero está floreciendo. ¿Sería así si Jesús no estuviera vivo? Si no hubiera resucitado, quizá nunca habríamos oído hablar de él. Pero tenemos pruebas convincentes de que está vivo y encabeza la predicación de las buenas nuevas en toda la Tierra.
POR QUÉ ES IMPORTANTE PARA NOSOTROS LA RESURRECCIÓN DE JESÚS
15. ¿Por qué nos da valor para predicar saber que Jesús resucitó?
15 Saber que Jesús resucitó nos da valor para predicar. Los enemigos de Dios llevan dos mil años haciendo todo lo posible por detener la predicación de las buenas nuevas. Han usado contra nosotros un sinfín de armas: apostasía, burlas, ataques violentos, prohibiciones, torturas y ejecuciones. Pero la Biblia predijo: “Sea cual sea el arma que se forme contra ti, no tendrá éxito” (Is. 54:17). Así que los agentes humanos de Satanás no nos asustan. Jesús está de nuestro lado y nos apoya, tal como prometió (Mat. 28:20). ¡No hay razón para tener miedo! Por mucho que lo intenten, nunca lograrán silenciarnos.
16, 17. a) ¿Cómo demuestra la resurrección de Jesús que todo lo que enseñó es verdad? b) Según Juan 11:25, ¿qué poder le ha dado Jehová a Jesús?
16 La resurrección de Jesús demuestra que todo lo que enseñó es verdad. El apóstol Pablo dijo que, si no fuera cierto que Cristo resucitó, la fe del cristiano y la predicación no tendrían ningún sentido. Un comentarista bíblico escribió: “Si Jesús no fue resucitado, [...] los cristianos no son más que unos pobres ingenuos que se han creído una enorme mentira”. De hecho, lo que cuentan los Evangelios sería tan solo la triste historia de un hombre bueno y sabio que acabó siendo asesinado por sus enemigos. Pero Jesús sí resucitó. Y eso confirma que todo lo que enseñó, incluido lo que dijo sobre el futuro, es absolutamente cierto (lea 1 Corintios 15:14, 15, 20).
17 Jesús dijo: “Yo soy la resurrección y la vida. El que ejerce fe en mí, aunque muera, llegará a vivir” (Juan 11:25). Esta emocionante declaración sin duda se hará realidad. Jehová le dio poder a Jesús para devolver la vida a los que reinarán con él en el cielo y a millones de personas que vivirán para siempre en la Tierra. El sacrificio de Jesús y su resurrección garantizan que la muerte desaparecerá. ¿Verdad que esto nos anima a aguantar las pruebas y hasta a enfrentarnos con valor a la muerte?
18. ¿Qué garantía nos da saber que Jesús resucitó?
18 La resurrección de Jesús nos garantiza que seremos juzgados de acuerdo con las amorosas normas de Jehová. Notemos lo que Pablo le dijo a un grupo de personas en Atenas: “[Dios] se propone juzgar la tierra habitada con justicia por un varón a quien ha nombrado, y ha proporcionado a todos los hombres una garantía con haberlo resucitado de entre los muertos” (Hech. 17:31). En efecto, Jesús es el Juez nombrado por Jehová, y podemos estar seguros de que nos juzgará de manera justa y amorosa (lea Isaías 11:2-4).
19. ¿Qué efecto tiene en nosotros creer en la resurrección de Jesús?
19 Creer que Jesús resucitó nos motiva a hacer la voluntad de Dios. Si no fuera por su sacrificio y resurrección, no tendríamos ninguna posibilidad de liberarnos del pecado y la muerte (Rom. 5:12; 6:23). Seguramente diríamos lo mismo que la mayoría: “Comamos y bebamos, porque mañana hemos de morir” (1 Cor. 15:32). Sin embargo, nosotros no vivimos centrados en los placeres de la vida. Como sabemos que habrá una resurrección, estamos resueltos a obedecer a Jehová en todo.
20. ¿Cómo demuestra la resurrección de Jesús la grandeza de Jehová?
20 La resurrección de Jesús demuestra la grandeza de Jehová, quien recompensa a los que lo buscan con empeño (Heb. 11:6). ¿Hemos pensado alguna vez en el poder y la sabiduría que Jehová demostró al resucitar a su Hijo como un espíritu inmortal? La resurrección de Jesús dejó claro que Dios tiene la capacidad de cumplir todo lo que promete. Jehová había predicho que una “descendencia” tendría un papel clave en defender su soberanía. Para que se cumpliera esta profecía, Jesús, la Descendencia prometida, tenía que morir y ser resucitado (Gén. 3:15).
21. ¿Por qué es especial para usted la esperanza de la resurrección?
21 ¡Cuánto le agradecemos a Jehová la esperanza de la resurrección! El apóstol Juan escuchó esta fascinante promesa: “‘¡Mira! La tienda de Dios está con la humanidad, y él residirá con ellos, y ellos serán sus pueblos. Y Dios mismo estará con ellos. Y limpiará toda lágrima de sus ojos, y la muerte no será más, ni existirá ya más lamento ni clamor ni dolor. Las cosas anteriores han pasado’. Y Aquel que estaba sentado en el trono dijo: [...] ‘Escribe, porque estas palabras son fieles y verdaderas’”. Pensemos: ¿quién le dio a Juan esta revelación? ¡El propio Jesucristo ya resucitado! (Rev. 1:1; 21:3-5.)