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Identificación del “hombre del desafuero”La Atalaya 1990 | 1 de febrero
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6. ¿Qué otra información da Pablo sobre el desaforado?
6 Pablo añade esto a su descripción del desaforado: “Él está puesto en oposición y se alza a sí mismo sobre todo aquel a quien se llama ‘dios’ o todo objeto de reverencia, de modo que se sienta en el templo del Dios, y públicamente ostenta ser un dios”. (2 Tesalonicenses 2:4.) Como vemos, Pablo advierte que Satanás levantaría a un desaforado, un falso objeto de reverencia, que hasta se pondría por encima de la ley de Dios.
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Identificación del “hombre del desafuero”La Atalaya 1990 | 1 de febrero
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Se ensalzan a sí mismos
10. ¿Qué relación ha tenido el desaforado con los gobernantes políticos?
10 La historia muestra que los que componen esta clase del hombre del desafuero han desplegado tanto orgullo y arrogancia que en realidad han dictado a los gobernantes del mundo. Con la doctrina del ‘derecho divino de los reyes’ como pretexto, el clero ha alegado ser el intermediario esencial entre los gobernantes y Dios. Ha entronado y destronado a reyes y emperadores y ha podido mover a las masas de la gente a favor o en contra de los gobernantes. En realidad han dicho, como lo hicieron los sacerdotes principales judíos que rechazaron a Jesús: “No tenemos más rey que César”. (Juan 19:15.) Sin embargo, Jesús enseñó claramente: “Mi reino no es parte de este mundo”. (Juan 18:36.)
11. ¿Cómo se ha elevado a sí mismo el clero?
11 Para elevarse todavía más sobre la gente común, esta clase desaforada ha adoptado vestidura diferente, por lo general negra. Además, se ha adornado con todo tipo de imponente adorno de realeza, junto con coronas, cruces y mitras. (Compárese con Mateo 23:5, 6.) Pero Jesús y sus seguidores no tenían tal vestidura; se vestían como la gente común. Los clérigos también se han dado a sí mismos títulos como “Padre”, “Santo Padre”, “Reverendo”, “Reverendísimo”, “Su Excelencia” y “Su Eminencia”, para más ‘ensalzarse sobre todos’. Sin embargo, Jesús enseñó lo siguiente en cuanto a títulos religiosos: “No llamen padre de ustedes a nadie sobre la tierra”. (Mateo 23:9.) De manera similar, Elihú, al rebatir a los consoladores hipócritas de Job, dijo: “No vaya yo, por favor, a mostrar parcialidad a un hombre; y a un hombre terrestre no otorgaré título”. (Job 32:21.)
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