La familia cristiana participa junta en actividades
“Ahora los exhorto, hermanos, [...] que estén aptamente unidos en la misma mente y en la misma forma de pensar.” (1 CORINTIOS 1:10.)
1. ¿En qué situación se encuentran muchas familias con relación a la unidad?
¿ESTÁ unida su familia, o parece que cada cual va por su lado? ¿Participa junta en actividades, o son raras las ocasiones en que toda la familia se reúne al mismo tiempo y en el mismo lugar? La palabra “familia” transmite la idea de un hogar unido.a Sin embargo, no todas las familias están unidas. Un conferenciante británico llegó hasta el grado de decir: “Lejos de ser el fundamento de la buena sociedad, la familia [...] es la fuente de todos nuestros disgustos”. ¿Es cierta esa afirmación en el caso de su familia? Si así es, ¿tiene que permanecer de ese modo?
2. ¿Qué personajes bíblicos demostraron que procedían de buenas familias?
2 La unidad o la desunión de una familia suele depender de los que llevan la delantera, sean dos padres o solamente uno. En tiempos bíblicos, la familia unida que adoraba junta a Jehová contaba con su bendición. Así era en el antiguo Israel, donde la hija de Jefté, Sansón y Samuel demostraron que procedían de familias piadosas. (Jueces 11:30-40; 13:2-25; 1 Samuel 1:21-23; 2:18-21.) En los primeros tiempos del cristianismo, a Timoteo, compañero fiel de Pablo en algunos de sus viajes misionales, le enseñaron las Escrituras Hebreas su abuela Loida y su madre Eunice. ¡Y qué sobresaliente discípulo y misionero llegó a ser! (Hechos 16:1, 2; 2 Timoteo 1:5; 3:14, 15; véase también Hechos 21:8, 9.)
¿Por qué hacer cosas juntos?
3, 4. a) ¿Qué cualidades se ven en una familia unida? b) ¿En qué sentido puede ser un hogar más que una simple casa?
3 ¿Por qué es provechoso que la familia participe junta en actividades? Porque hace aumentar la comprensión y el respeto mutuos. En vez de apartarse unos de otros, los miembros de la familia se mantienen apegados y se apoyan. Hace poco, un artículo de la revista Family Relations (Relaciones familiares) comentó: “Se han determinado con relativa claridad los atributos específicos de las ‘familias estables’. Entre esas cualidades se encuentran la fidelidad y el aprecio mutuos, la unidad, la buena comunicación, la capacidad de resolver problemas y una sólida dimensión espiritual”.
4 Cuando la familia manifiesta estas cualidades, el hogar deja de ser como una estación de servicio, donde uno se detiene para repostar combustible. Es más que una simple casa. Es un lugar agradable que atrae a los miembros de la familia. Es un refugio de calor y cariño, compasión y comprensión. (Proverbios 4:3, 4.) Es un nido donde hay unidad familiar, no un cubil de escorpiones lleno de fricción y división. Ahora bien, ¿cómo se consigue?
La unidad en el estudio de familia
5. ¿De qué nos valemos para conocer la adoración verdadera?
5 Llegamos a conocer la adoración verdadera de Jehová si nos valemos de nuestra “facultad de raciocinio”. (Romanos 12:1.) Nuestra conducta no debe regirse por emociones momentáneas, como las que suscitan los sermones elocuentes y los astutos televangelistas. Más bien, lo que nos impulsa a actuar es el estudio regular de la Biblia y la meditación sobre lo que aprendemos de ella y de las publicaciones bíblicas que nos provee “el esclavo fiel y discreto”. (Mateo 24:45.) Nuestras obras cristianas en cualquier situación o tentación que pueda surgir son la consecuencia de haber conseguido la mente de Cristo. En este sentido Jehová es nuestro Magnífico Educador. (Salmo 25:9; Isaías 54:13; 1 Corintios 2:16.)
6. ¿Qué ejemplo tenemos de un estudio de familia a escala mundial?
6 El estudio bíblico de familia desempeña un papel esencial en la espiritualidad de todas las familias cristianas. ¿Cuándo se reúne su familia para estudiar? Si no programan una ocasión específica y lo dejan a la casualidad o para cuando haya un momento, es muy probable que no estudien con frecuencia o que no estudien nunca. Para que haya unidad en el estudio familiar, es necesario tener un horario fijo y regular. Así todos saben el día y la hora en que deben estar presentes para disfrutar de una reunión espiritual como familia. Los más de doce mil miembros que componen mundialmente la familia Betel saben que su estudio de familia se celebra los lunes por la noche. Anima a estos voluntarios de Betel recordar que todos han estudiado la misma información al terminar el día, empezando en las islas del Pacífico y Nueva Zelanda, y siguiendo por Australia, Japón, Taiwan, Hong Kong, toda Asia, África, Europa y finalmente el continente americano. Aunque miles de kilómetros y muchos idiomas separan a los miembros de la familia Betel, este estudio de familia produce un sentimiento de unidad entre ellos. En escala más pequeña, ustedes pueden cultivar el mismo sentimiento mediante su estudio de familia. (1 Pedro 2:17; 5:9.)
7. ¿Cómo debemos ver la palabra de la verdad, según dice Pedro?
7 El apóstol Pedro nos aconseja: “Como criaturas recién nacidas, desarrollen el anhelo por la leche no adulterada que pertenece a la palabra, para que mediante ella crezcan a la salvación, con tal que hayan gustado que el Señor es bondadoso”. (1 Pedro 2:2, 3.) ¡Qué imagen más hermosa presenta Pedro con esas palabras! Empleó la forma verbal griega e·pi·po·thé·sa·te, que, según explica la obra Clave Lingüística del Nuevo Testamento Griego, significa en infinitivo “desear ardientemente, anhelar, ansiar”. Supone un deseo intenso. ¿Se ha fijado en que las crías de los mamíferos buscan con anhelo el pezón de su madre?, ¿y ha observado lo contento que se pone el bebé humano cuando la madre le da el pecho? Debemos desear del mismo modo la palabra de la verdad. El helenista William Barclay dijo: “Para el cristiano sincero estudiar la palabra de Dios no es un trabajo sino una delicia, porque sabe que en ella encontrará el alimento que su alma anhela”. (Traducción de Ernesto Suárez Vilela.)
8. ¿Qué desafío afronta el cabeza cuando dirige el estudio de familia?
8 El estudio de familia coloca sobre el cabeza una seria responsabilidad. Tiene que cerciorarse de que el estudio sea interesante para todos y de que todos puedan participar. Los niños no deben pensar que el estudio es solo para los mayores. La calidad del estudio es más importante que la cantidad de información que se abarque. Haga que la Biblia cobre vida. Cuando sea apropiado, ayude a sus hijos pequeños a visualizar los lugares y las características de Palestina, donde ocurrieron los sucesos que están estudiando. Se debe animar a todos a hacer investigación personal y a comunicarla a la familia. De este modo, los niños también pueden ‘crecer con Jehová’. (1 Samuel 2:20, 21.)
Unidos en evangelizar
9. ¿Qué se puede hacer para que la familia disfrute de predicar junta?
9 Jesús dijo: “En todas las naciones primero tienen que predicarse las buenas nuevas”. (Marcos 13:10.) Estas palabras indican que todo cristiano concienzudo tiene una asignación: evangelizar, hablar a otros de la gobernación del Reino de Dios. Efectuar esta obra como familia puede ser muy animador y gozoso. Ambos padres se sienten orgullosos cuando escuchan a sus hijos presentar las buenas nuevas. Un matrimonio que tiene tres hijos con edades comprendidas entre 15 y 21 años dice que siempre acostumbra predicar en público con sus hijos los miércoles después de la escuela y los sábados por la mañana. El padre comenta: “Cada vez que predicamos juntos, les enseñamos algo, y nos aseguramos de que sea una ocasión agradable y animadora”.
10. ¿Cómo pueden ayudar los padres a sus hijos en el ministerio?
10 Predicar y enseñar juntos como familia puede ser muy provechoso. A veces, las personas responden mejor a la presentación sencilla y sincera de un niño. Luego, mamá o papá añaden alguna idea si es necesario. Los padres pueden cerciorarse de que los hijos estén recibiendo preparación progresiva a fin de que lleguen a ser ministros ‘que no tienen de qué avergonzarse, que manejan la palabra de la verdad correctamente’. Predicar juntos permite que los padres observen la actitud, eficacia y comportamiento del hijo en el ministerio. Si lo hacen regularmente, ven el progreso del hijo y le dan instrucción y ánimo constantes para fortalecer su fe. Al mismo tiempo, los hijos ven que sus padres son buenos ejemplos en el ministerio. El predicar como una familia unida y amorosa en estos tiempos críticos y violentos puede ser incluso una protección en vecindarios donde hay mucho crimen. (2 Timoteo 2:15; Filipenses 3:16.)
11. ¿Qué puede debilitar fácilmente el celo que un niño tenga por la verdad?
11 Cuando los adultos tienen normas dobles, los niños se dan cuenta enseguida. Si los padres no demuestran un verdadero amor a la verdad ni al ministerio de casa en casa, difícilmente puede esperarse que los hijos tengan celo por la verdad. De modo que el padre que goza de buena salud, pero cuya participación en el servicio del campo se limita solo al estudio semanal con los hijos, tal vez lo pague muy caro cuando los niños crezcan. (Proverbios 22:6; Efesios 6:4.)
12. ¿Cómo pueden las familias recibir una bendición especial de Jehová?
12 Una ventaja de estar “aptamente unidos en la misma mente” es que la familia puede cooperar para que por lo menos uno de ellos sea ministro precursor de tiempo completo en la congregación. Muchas familias de todo el mundo lo han hecho, y se han beneficiado de las experiencias y la mayor eficiencia del precursor. (2 Corintios 13:11; Filipenses 2:1-4.)
Unidos en resolver dificultades
13, 14. a) ¿Qué situaciones pueden afectar la armonía de la familia? b) ¿Cómo pueden evitarse muchos problemas familiares?
13 Todos pasamos por momentos de presión en estos tiempos “difíciles” y “peligrosos”. (2 Timoteo 3:1, Nácar-Colunga; Versión Reina-Valera de 1960.) Hay dificultades en el empleo, la escuela, las calles y hasta el hogar. Algunos sufren de mala salud o de problemas emocionales desde hace mucho tiempo, lo que a veces causa tensión o malentendidos en la familia. ¿Cómo podemos tratar estas situaciones? ¿Dejando de comunicarnos con los demás? ¿Aislándonos de la familia aunque vivamos bajo el mismo techo? No. Más bien, tenemos que decir qué nos inquieta y pedir ayuda. ¿Y hay mejor lugar para ello que el círculo familiar amoroso? (1 Corintios 16:14; 1 Pedro 4:8.)
14 Cualquier médico le dirá que más vale prevenir que curar. Lo mismo es cierto respecto a los conflictos familiares. La conversación abierta y sincera muchas veces impide que se agraven. Incluso cuando son graves, se pueden tratar y hasta resolver si la familia analiza junta los principios bíblicos pertinentes. Muchas veces la fricción se puede convertir en una buena relación cuando se aplican las palabras de Pablo anotadas en Colosenses 3:12-14: “Vístanse de los tiernos cariños de la compasión, la bondad, la humildad mental, la apacibilidad y la gran paciencia. Continúen soportándose unos a otros y perdonándose liberalmente unos a otros si alguno tiene causa de queja contra otro. [...] Vístanse de amor, porque es un vínculo perfecto de unión”.
Unidos en la recreación
15, 16. a) ¿Qué cualidad debería distinguir a las familias cristianas? b) ¿Qué clase de personas producen algunas religiones, y por qué?
15 Jehová es un Dios feliz, y la verdad es un mensaje de felicidad, un mensaje de esperanza para la humanidad. Además, uno de los frutos del espíritu es el gozo. Este gozo es muy diferente de la euforia momentánea que siente el deportista que triunfa en un encuentro deportivo. Es un profundo sentimiento de satisfacción que rebosa en el corazón como resultado de haber cultivado una relación íntima con Jehová. Es un gozo que se basa en valores espirituales y relaciones edificantes. (Gálatas 5:22; 1 Timoteo 1:11.)
16 Por lo tanto, los testigos cristianos de Jehová no tenemos razón para sentirnos melancólicos ni estar malhumorados. Algunas religiones producen esa clase de personas porque su fe se concentra en factores negativos. Sus enseñanzas resultan en una forma de adoración sombría y sin gozo, que no es ni bíblica ni equilibrada. No producen familias felices en el servicio a Dios. Jesús vio la necesidad de recrearse y descansar. Por ejemplo, en cierta ocasión invitó a sus discípulos a ir ‘en privado, a un lugar solitario, y descansar un poco’. (Marcos 6:30-32; Salmo 126:1-3; Jeremías 30:18, 19.)
17, 18. ¿De qué maneras apropiadas pueden entretenerse las familias cristianas?
17 Las familias también necesitan tiempo para entretenerse. Un padre dijo lo siguiente acerca de sus hijos: “Nos divertimos juntos de muchas maneras: vamos a la playa, jugamos a la pelota en el parque o nos vamos a merendar a las montañas. De vez en cuando programamos un ‘día de precursores’, en el que predicamos juntos todo el día como los precursores; luego lo celebramos con una comida especial, y hasta intercambiamos regalos”.
18 Los padres también pudieran llevar a la familia de excursión al zoológico, a parques de atracciones, a museos y a otros lugares de interés. Otras actividades en las que todos pueden participar son las caminatas campestres, observación de aves y jardinería. Además, los padres pueden animar a sus hijos a aprender a tocar un instrumento musical o a tener un pasatiempo práctico. Los padres equilibrados también apartan tiempo para jugar con sus hijos. Si la familia juega junta, es más probable que permanezca unida.
19. ¿Qué tendencia moderna pudiera perjudicar a la familia?
19 Una tendencia moderna relacionada con el esparcimiento es que los jóvenes se aparten de la familia y hagan lo que quieran. Aunque no es impropio que un joven disfrute de su pasatiempo favorito, no sería prudente dejar que esos intereses lo separen constantemente del resto de la familia. Más bien, queremos observar el principio que enunció Pablo: “No [vigilemos] con interés personal solo [nuestros] propios asuntos, sino también con interés personal los de los demás”. (Filipenses 2:4.)
20. ¿Cómo pueden las asambleas ser ocasiones gozosas?
20 A todos nos alegra ver a las familias sentadas juntas en las asambleas. De esta manera los hijos mayores pueden ayudar a cuidar de los menores. Esta costumbre también impide que los hijos se sienten en grupos en las últimas filas y presten poca atención al programa de la asamblea, como algunos adolescentes hacen. El viaje de ida y vuelta a la asamblea también puede ser una ocasión alegre cuando la familia se pone de acuerdo sobre qué ruta tomará, qué lugares de interés verá y dónde se alojará. Imagínese lo emocionante que debe haber sido para las familias en los días de Jesús cuando viajaban juntas a Jerusalén. (Lucas 2:41, 42.)
Las bendiciones de estar unidos
21. a) ¿Cómo podemos esforzarnos por tener éxito en el matrimonio? b) ¿Qué cuatro buenos consejos pueden dar permanencia al matrimonio?
21 Nunca ha sido fácil lograr familias y matrimonios unidos y felices, y no se producen por casualidad. A algunos les parece más fácil “arrojar la toalla”, disolver el matrimonio y tratar de empezar de nuevo. Sin embargo, con frecuencia surgen los mismos obstáculos en el segundo y en el tercero. Es mucho mejor la solución cristiana: hacer lo posible por tener éxito aplicando los principios bíblicos de amor y respeto. La unidad de la familia depende de la existencia de un espíritu de condescendencia y altruismo. Un consejero matrimonial presentó una fórmula sencilla para ayudar a los matrimonios a permanecer juntos. Escribió: “Los cuatro elementos críticos existentes en casi todos los buenos matrimonios son estar dispuestos a escuchar, ser capaces de pedir perdón, poder dar apoyo emocional constante y el deseo de acariciarse”. Estos factores pueden contribuir mucho a la permanencia del matrimonio porque también se basan en sólidos principios bíblicos. (1 Corintios 13:1-8; Efesios 5:33; Santiago 1:19.)
22. ¿Cuáles son algunos beneficios de tener una familia unida?
22 Si obedecemos el consejo de la Biblia, tendremos un fundamento sólido para lograr una familia unida, y las familias unidas son el cimiento de las congregaciones unidas y firmes espiritualmente. Al dar de este modo una mejor alabanza unida a Jehová, recibiremos su abundante bendición.
[Nota a pie de página]
a El término “familia” está “tom[ado] del lat[ín] famĭlĭa [...], primitivamente ‘conjunto de los esclavos y criados de una persona’”. (Breve diccionario etimológico de la lengua castellana, de Joan Corominas.) De este sentido pasó a significar “aquellos que viven bajo un mismo techo y, especialmente, el padre, la madre y los hijos”. (Gran Enciclopedia Larousse.)
¿Recuerda usted?
◻ ¿Por qué es provechoso que la familia participe junta en actividades?
◻ ¿Por qué es esencial tener un estudio bíblico de familia regularmente?
◻ ¿Por qué es conveniente que los padres vayan al ministerio del campo con sus hijos?
◻ ¿Por qué es útil que la familia analice junta sus problemas?
◻ ¿Por qué no deben sentirse melancólicas ni estar malhumoradas las familias cristianas?
[Fotografía en la página 17]
¿Disfruta su familia de comer junta por lo menos una vez al día?
[Fotografía en la página 18]
Las excursiones familiares deben ser relajantes y agradables