Capítulo 6
El Agente Principal de Dios en el gobierno mundial
1. ¿Por qué fue 1914 E.C. tanto un año bendito como un año maldito?
FUE un año maldito, fue un año bendito, aquel año de 1914 E.C. “Maldito,” porque entonces estalló la I Guerra Mundial, introduciendo una Era de Violencia que ha ido empeorando constantemente hasta nuestro mismo día. “Bendito,” porque, sin que lo vieran ojos humanos, arriba en los santos cielos, un poderoso gobierno fue producido por el Creador de cielo y Tierra para que funcionara a favor de la paz duradera del hombre.
2. ¿De qué está a la espera el Agente Principal de Dios para el gobierno mundial?
2 Como anunciaron con décadas de anticipación los “embajadores” de Dios a todas las naciones, los “tiempos de los gentiles” para la dominación mundial por las potencias mundiales gentiles sin la intervención del reino de Dios terminaron. (2 Corintios 5:20; Efesios 6:20) Las naciones gentiles rehusaron reconocer ese hecho y rabiaron en guerra mundial para mantener la dominación mundial política. Sin embargo, exactamente a tiempo, en 1914 E.C., al fin de los “siete tiempos” (2.520 años) de dominación mundial gentil, Dios produjo su gobierno celestial, que dentro de poco tiempo pondrá fin total a esas naciones gentiles atizadoras de la guerra que ahora son simplemente intrusos en el “banquillo de los pies” de Dios, la Tierra. (Daniel 2:44; 4:16, 23, 25, 32; Lucas 21:24; Salmo 2:1-9) En ese reino celestial el Agente Principal de Dios para el gobierno mundial reina, a la espera del tiempo de Dios en que todas estas hostiles naciones gentiles hayan de ser puestas bajo sus pies en ruina eterna. (Salmo 110:1-6; Hebreos 10:12, 13) Entonces la paz permanente, como si fuera un arco iris, hermoseará la Tierra.
3. En 1914 o más tarde, ¿calificó algún ser humano para ser Gobernador Mundial?
3 En la Tierra, allá en 1914, no había ningún hombre que calificara para agente principal de Dios para un gobierno mundial que trajera la paz. No, ni uno solo, ni siquiera en la Jerusalén terrestre del Oriente Medio, ni en Belén. En aquel año crítico esas famosas ciudades estaban en las manos de turcos mahometanos, como parte del Imperio Turco, que se envolvió en la I Guerra Mundial el 30 de octubre de 1914. En diciembre de 1917 la posesión de Jerusalén pasó a otras manos, cuando tropas británicas bajo el mariscal de campo Allenby capturaron la ciudad. En aquellos días un súbdito británico, el famoso químico judío llamado Chaim Weizmann, hizo una contribución vital al esfuerzo de guerra británico. Esto sirvió de incentivo para la emisión de la Declaración de Balfour, según la cual el gobierno británico favoreció el establecimiento de una patria judía en Palestina. Años más tarde, en mayo de 1948, después de guerra entre árabes y judíos, se estableció la República de Israel. El distinguido Chaim Weizmann llegó a ser su primer presidente, pero no su rey davídico. No calificaba para Agente Principal de Dios.
4. ¿Por qué no nació ningún reino nuevo en Jerusalén en 1914 E.C.?
4 Hubo una destrucción de reinos como resultado de la I Guerra Mundial. En conformidad con esta tendencia destructiva, ningún reino nuevo nació en la Tierra en 1914, al fin de los “tiempos señalados de las naciones,” o “los tiempos de los gentiles.” Más tarde, la Liga de Naciones asignó a la Gran Bretaña un mandato sobre Jerusalén y territorios del Oriente Medio capturados por los soldados británicos. Este mandato caducó el 15 de mayo de 1948. Entonces surgió la República de Israel. Sin embargo, ningún reino de Dios visible había sido establecido en la Tierra para servir de agencia de la soberanía universal de Jehová con relación a nuestra Tierra. No se había encontrado a ningún hombre de descendencia judía que calificara como Su Agente Principal en Su gobierno mundial prometido. No hubo ningún judío circuncidado que pudiera presentar credenciales válidas que probaran que era descendiente real del rey David, con o derecho natural o derecho legal al trono del rey David en Jerusalén.
5. ¿Dónde, pues, había que buscar al Agente Principal de Dios?
5 Por eso, ¿dónde, al tiempo crítico, se hallaba el verdadero heredero del rey David, el que se necesitaba y al cual Jehová pudiera instalar como su Agente Principal en el gobierno mundial predicho? En medio de aquellas circunstancias, ¿a qué otro lugar podríamos posiblemente dirigir la atención sino a la región invisible de los espíritus, los cielos donde reina el mismo Soberano Universal? A ese lugar fue adonde señaló el profeta antiguo Daniel para la presentación del Agente Principal de Jehová. Es allí donde hay que buscar al individuo calificado y que tiene la aprobación divina. Es allí, también, donde el galileo Juan el hijo de Zebedeo, en el último libro de la Biblia, Revelación, reveló que se haría una búsqueda para hallar a un individuo digno que ejecutara los deberes de Agente Principal de Jehová.—Revelación 5:3-12.
6, 7. ¿Qué tres bestias vio Daniel primero en una visión?
6 Ahora, con los ojos de la profecía, miremos hacia el cielo con el profeta Daniel y observemos el cuadro del muy deseado Agente Principal que él pinta. Daniel muestra que fue hacia el fin del largo destierro de los judíos en Babilonia cuando Dios lo favoreció con la visión acerca de Su Agente Principal. Daniel fecha la visión al escribir: “En el primer año de Belsasar [nieto de Nabucodonosor] el rey de Babilonia, Daniel mismo contempló un sueño y visiones de su cabeza sobre su cama. En aquel tiempo puso por escrito el sueño mismo. La narración completa de los asuntos informó. Daniel estaba expresándose y diciendo:
7 “‘Sucedió que estuve contemplando en mis visiones durante la noche, y, ¡pues vea! los cuatro vientos de los cielos estaban agitando el vasto mar. Y cuatro enormes bestias estaban saliendo del mar, cada una siendo diferente de las otras. La primera era como un león, y tenía las alas de un águila. Seguí contemplando hasta que sus alas fueron arrancadas, y fue alzada de la tierra y se le hizo pararse en dos pies justamente como un hombre, y se le dio el corazón de un hombre. Y, ¡pues vea! otra bestia, una segunda, siendo ésta como un oso. Y de un lado estaba levantada, y había tres costillas en su boca entre sus dientes; y esto es lo que estaban diciéndole: “Levántate, come mucha carne.” Después de esto seguí contemplando, y, ¡pues vea! otra bestia, una como un leopardo, pero tenía cuatro alas de una criatura volátil en su espalda. Y la bestia tenía cuatro cabezas, y se le dio gobernación en realidad.’”—Daniel 7:1-6.
8. ¿Qué simbolizaron aquellas tres bestias, y por cuánto tiempo?
8 Aquellas tres enormes bestias que salieron del mar agitado por el viento representaban tres gobernaciones. Representaron las mismas gobernaciones que fueron representadas por la cabeza de oro, los pechos y brazos de plata, el vientre y los muslos de cobre de la imagen del sueño de Nabucodonosor, a saber, la Potencia Mundial Babilónica, la Potencia Mundial Medopersa y la Potencia Mundial Griega. Estas potencias mundiales ocuparon el espacio de tiempo de los “tiempos de los gentiles” desde la desolación de Jerusalén y la tierra de Judá en 607 a. de la E.C. y hasta 30 a. de la E.C. El año anterior el último de los cuatro reinos helénicos que resultaron del Imperio Griego de Alejandro Magno sufrió una derrota decisiva ante las fuerzas navales de la antigua Roma pagana.
9. ¿Qué cuarta bestia con cuernos vio Daniel en esta visión?
9 Al llegar a este punto, sin embargo, Daniel no ha terminado de contarnos su sueño profético. Añade: “Después de esto seguí contemplando en las visiones de la noche, y, ¡pues vea! una cuarta bestia, espantosa y terrible y extraordinariamente fuerte. Y tenía dientes de hierro, grandes. Estaba devorando y triturando, y lo que quedaba lo estaba pisoteando con sus pies. Y era una cosa diferente de todas las otras bestias que fueron antes de ella, y tenía diez cuernos. Seguí considerando los cuernos, y, ¡mire! otro cuerno, uno pequeño, salió entre ellos, y hubo tres de los primeros cuernos que fueron arrancados de delante de él. Y, ¡mire! había ojos como los ojos de un hombre en este cuerno, y había una boca que estaba hablando cosas grandiosas.”—Daniel 7:7, 8.
10. Esta bestia corresponde con ¿qué, en la “imagen” con la cual se había soñado?
10 Aquí tenemos lo que corresponde con las piernas de hierro de la “imagen” de potencias mundiales que se vio en el sueño de Nabucodonosor. La cuarta bestia representaba más que solo el Imperio Romano o Sexta Potencia Mundial de la profecía bíblica. Aprendemos esto por la conversación que Daniel tuvo con el intérprete angélico, quien le dijo a Daniel: “En cuanto a estas enormes bestias, porque son cuatro, hay cuatro reyes que se pondrán de pie de la tierra. Pero los santos del Supremo recibirán el reino, y ellos tomarán posesión del reino para tiempo indefinido, aun para tiempo indefinido sobre tiempos indefinidos.” (Daniel 7:17, 18) A pesar de esta información, todavía quedaba un misterio para Daniel en cuanto a la cuarta bestia.
11. ¿Qué otro rasgo de la visión quiso Daniel que se le explicara?
11 “Entonces fue que deseé asegurarme en cuanto a la cuarta bestia, . . . y acerca de los diez cuernos que estaban en su cabeza, y el otro cuerno que subió y delante del cual tres cayeron, aun aquel cuerno que tenía ojos y una boca que estaba hablando cosas grandiosas y cuya apariencia era mayor que la de sus compañeros. Seguí contemplando cuando aquel mismo cuerno hizo guerra contra los santos, y estaba prevaleciendo contra ellos, hasta que vino el Anciano de Días y juicio mismo se dio a favor de los santos del Supremo, y llegó el tiempo definido en que los santos tomaron posesión del reino mismo.”—Daniel 7:19-22.
12, 13. ¿Cómo nos explicó el ángel lo que es el cuerno pequeño?
12 Como Daniel, nosotros hoy quisiéramos saber qué representó aquel cuernezuelo que tenía ojos y una boca. Debemos llegar a comprender su significado bajo la guía del espíritu santo de Dios, especialmente puesto que hemos vivido hasta ver el cumplimiento del sueño profético de Daniel. Por consiguiente, ahora hacemos bien en prestar atención a lo que el intérprete angélico le dijo a Daniel en explicación:
13 “Esto es lo que dijo: ‘En cuanto a la cuarta bestia, hay un cuarto reino que llegará a existir en la tierra, que será diferente de todos los otros reinos; y devorará toda la tierra y la hollará y triturará. Y en cuanto a los diez cuernos, de ese [cuarto] reino hay diez reyes que se levantarán; y aun otro se levantará después de ellos, y él mismo será diferente de los primeros, y a tres reyes humillará. Y hablará aun palabras contra el Altísimo, y hostigará continuamente a los santos mismos del Supremo. Y tendrá intención de cambiar tiempos y ley, y serán dados en su mano por un tiempo, y tiempos y la mitad de un tiempo. Y el Tribunal mismo procedió a sentarse, y su propia gobernación finalmente quitaron, para aniquilarlo y destruirlo totalmente.’”—Daniel 7:23-26.
14. ¿Cuánto duran el “tiempo y tiempos y la mitad de un tiempo”?
14 En el Da cap 7 versículo veinticinco, donde aparece la expresión “un tiempo, y tiempos y la mitad de un tiempo,” la Sagrada Biblia, Versión Bover-Cantera (católica romana), dice: “Serán entregados [los santos] en su poder por un año, dos años y medio año.” La traducción de Torres Amat (también versión católica romana) dice: “serán dejadas a su arbitrio todas las cosas por un tiempo, o año, y dos tiempos, y la mitad de un tiempo.” Históricamente, ¿qué años fueron ésos?
LA POTENCIA MUNDIAL BINARIA ANGLOAMERICANA
15. ¿Cómo llegó a existir el cuerno “pequeño” que tenía ojos y una boca?
15 El “cuarto reino,” el Imperio Romano, se dividió en varias naciones y un brote sobresaliente que vino de aquel imperio fue la Gran Bretaña. Para establecerse como ama de los siete mares, la Gran Bretaña con sus colonias tuvo que demostrar que era superior a las potencias navales española, holandesa y francesa. Esto se logró para el año 1763 E.C., de modo que entonces el Imperio Británico llegó a ser la predicha Séptima Potencia Mundial de la profecía bíblica. El 4 de julio de 1776, colonias que habían sido británicas en la América del Norte se declararon independientes y llegaron a ser los Estados Unidos de América. Por cooperación posterior juntos en varios campos de importancia internacional, el Imperio Británico y los Estados Unidos de América llegaron a ser, en realidad, la Potencia Mundial Binaria Angloamericana. Hasta 1914 E.C. esta Séptima Potencia Mundial controló más de la cuarta parte de la superficie y población de la Tierra. Es el cuerno “pequeño” que arrancó otros tres cuernos (las potencias navales española, holandesa y francesa) y que tenía ojos de hombre y una boca que hablaba cosas grandiosas.—Daniel 7:8.
16, 17. ¿Qué culminación tuvieron aquellos tres años y medio en 1918?
16 Fue durante la I Guerra Mundial, desde el 28 de julio de 1914 hasta el 11 de noviembre de 1918, que los “santos” fueron entregados a esta Séptima Potencia Mundial para que hiciera con ellos lo que quisiera. Fue el 6 de abril de 1917 que los Estados Unidos de América se vieron envueltos en aquel conflicto mundial del lado del Imperio Británico. La profecía de Daniel se especializa en tres años lunares y medio durante esta I Guerra Mundial como el tiempo en que la Séptima Potencia Mundial, el simbólico cuerno “pequeño,” trituró a los “santos” del Dios Altísimo, Jehová. La culminación de esto fue que se sentenció bajo falsa acusación a muchos años de aprisionamiento en la penitenciaría federal de Atlanta, Georgia, a siete hombres cristianos que estaban participando prominentemente en publicar por todo el mundo, tanto verbalmente como por la página impresa, las buenas nuevas del reino establecido de Dios.
17 Esta sentencia fue dictada el 21 de junio de 1918, y el 4 de julio de 1918 estos siete prominentes fomentadores del estudio bíblico fueron llevados por tren desde Brooklyn, Nueva York, a Atlanta, Georgia. Esto sirvió de golpe espiritual triturador a los Estudiantes Internacionales de la Biblia, que entonces sufrían persecución y a los cuales ahora, desde el año 1931, se les conoce como testigos de Jehová.
18. ¿Se muestra que los “santos” sean aniquilados por el cuerno “pequeño”?
18 La profecía de Daniel no muestra que los “santos mismos del Supremo” fueran aniquilados por el hostigamiento procedente del cuerno “pequeño” simbólico, la Potencia Mundial Binaria Angloamericana. El Dios Altísimo, a cuya soberanía universal se apegan y la cual proclaman, está de parte de ellos. Él se encargará de que se les haga justicia divina. (Lucas 18:7, 8) Sin embargo, ni la Séptima Potencia Mundial ni todas las demás naciones de la Tierra toman en serio la notificación que les dan los testigos de Jehová. Esta notificación señala que, desde el fin de los Tiempos de los Gentiles en 1914, ellas han estado en juicio delante del Altísimo. El sueño de Daniel acerca de las cuatro bestias y el cuerno “pequeño” es un cuadro profético de este hecho solemne.
TOMA ASIENTO EL TRIBUNAL DIVINO
19. ¿Qué hizo el Tribunal Celestial con las cuatro “bestias”?
19 Refiriéndose a un tiempo que viene después de haber llegado a la existencia el cuerno “pequeño” y hablado cosas grandiosas, Daniel continúa describiendo su sueño profético: “Seguí contemplando hasta que se colocaron tronos y el Anciano de Días se sentó. Su ropa era blanca justamente como la nieve, y el cabello de su cabeza era como lana limpia. Su trono era llamas de fuego; sus ruedas eran un fuego ardiente. Había una corriente de fuego que fluía y salía de delante de él. Había mil millares que seguían ministrándole, y diez mil veces diez mil que seguían de pie directamente delante de él. El Tribunal tomó asiento, y hubo libros que se abrieron. Seguí contemplando en aquel tiempo debido al sonido de las palabras grandiosas que el cuerno estaba hablando; seguí contemplando hasta que la [cuarta] bestia fue muerta y su cuerpo fue destruido y fue dado al fuego ardiente. Pero en cuanto a las demás bestias, sus gobernaciones fueron quitadas, y hubo un alargamiento de vida que se les dio por un tiempo y sazón.”—Daniel 7:9-12.
20. ¿Por qué no necesita libros para consultarlos el “Anciano de Días”?
20 Es solo aquí en esta visión a Daniel que al Dios inmortal que no tiene principio se le llama “el Anciano de Días.” Él tiene prioridad sobre toda persona y todo lo demás, pues es su Creador. (Salmo 90:2) Como Aquel que es omnisapiente y totalmente justo y que ha precedido a todas sus creaciones, él correctamente se sienta como Juez de todas las cosas, entre ellas nuestra Tierra. Puesto que los días de él se extienden al pasado antiguo, él conoce toda la historia humana pasada como si estuviera escrita en un libro. Así, ha observado a las cuatro potencias mundiales semejantes a bestias en el proceder que han seguido. Él las juzga, no teniendo como fundamento lo que otros testificaran, sino según lo que él sabe de ellas directamente. Él no tiene que consultar un registro escrito, que contenga relatos escritos por ángeles. En los tribunales humanos terrestres habría que consultar libros de derecho y libros de consulta. Pero no sucede así en lo que se refiere a Jehová, “el Anciano de Días.”
21. ¿Cómo fueron alargadas las vidas de las “demás bestias”?
21 Como lo muestran los libros de historia, las cuatro “bestias” imperiales pasaron del escenario mundial una tras otra, en el orden de los cuatro metales que se vieron en el sueño de Nabucodonosor acerca de la imagen de potencias mundiales. Primero la Potencia Mundial Babilónica salió del escenario, después de ella la Potencia Mundial Medopersa, entonces la Potencia Mundial Griega y finalmente la Potencia Mundial Romana. Aunque aquellas potencias mundiales perdieron su gobernación una tras otra, sus territorios imperiales y los habitantes de ellos continuaron subsistiendo, y algunos restos de éstos existen hasta este mismo día. Por eso Daniel 7:12 dice: “Pero en cuanto a las demás bestias, sus gobernaciones fueron quitadas, y hubo un alargamiento de vida que se les dio por un tiempo y sazón.”
22. ¿Por qué se destruye a la cuarta bestia con su cuerno “pequeño”?
22 La cuarta “bestia” simbólica, con su agresivo cuerno “pequeño,” sufre destrucción debido a su violento proceder de opresión en la Tierra, debido a sus palabras de blasfemia contra el Dios Altísimo, y debido a que continuamente ha hostigado a los “santos” de Dios. Últimamente, el cuerno angloamericano sobre la cabeza de esta cuarta bestia es quien ha hecho estas obras impías.
23. ¿Qué les sucede a las gobernaciones que no son representadas por las cuatro bestias?
23 Por eso, se pinta el cuadro de que a la cuarta bestia simbólica se le destruye junto con el cuerno “pequeño.” Sin embargo, en la realidad histórica a la cuarta bestia simbólica, a saber, la Potencia Mundial Romana, se le quita su poder imperial, para hacer espacio para la Potencia Mundial Binaria Angloamericana. Varios “reyes,” o “cuernos” simbólicos, que habían estado abarcados dentro de la Potencia Mundial Romana, siguieron gobernando como “cuernos” inferiores, dominados por el astuto cuerno “pequeño” que tenía los ojos de un hombre y una boca habladora. Por eso, cuando la Potencia Mundial Binaria Angloamericana baja a la destrucción bajo los juicios ardientes del Anciano de Días, esos “reyes” parecidos a cuernos, como restos de la Potencia Mundial Romana, perecen con ella. (Daniel 7:23-26) Pero ¿qué hay acerca de esos imperios, reinos, repúblicas, y cuerpos políticos que nunca fueron parte del Imperio Romano ni de la Potencia Mundial Binaria Angloamericana, incluso la Comunidad Británica de Naciones? Todos éstos, también, tienen que ser destruidos cuando el Anciano de Días ejecute juicio ardiente sobre este mundo.—Revelación 16:13 a 19:21 inclusive.
SE PRESENTA AL AGENTE PRINCIPAL DE DIOS
24. ¿Queda la Tierra sin gobierno por la destrucción del regir humano?
24 ¿Quedarán los asuntos humanos en estado caótico, sujetos a anarquía, desafuero, y sin gobierno cuando venga esa destrucción de todos los gobiernos y gobernaciones humanos terrestres? No temamos la destrucción ardiente que a paso rápido se le acerca a este sistema de cosas mundano. El Juez Supremo, el Anciano de Días, está a cargo de nuestra Tierra. Él tiene que eliminar los gobiernos políticos de hechura humana que despliegan mala gobernación y opresión, con el fin de hacer espacio para el más excelente gobierno que alguna vez pudiera tener la humanidad. Este será una expresión de su propia Soberanía Universal con relación al hogar terrestre de la humanidad. Será un Gobierno Mundial indivisible que ejercerá su poder y autoridad desde el cielo, una ubicación superior a Londres, Washington, Moscú, Pekín, Tokio, o cualquier otra capital nacional de la Tierra. Jehová nos presenta a su Agente Principal en ese Gobierno Mundial en el sueño profético que hizo que por inspiración Daniel tuviera. Daniel señala en dirección al cielo al escribir ahora:
25. ¿Cómo se presenta al Agente Principal de Dios en Daniel 7:13, 14?
25 “Seguí contemplando en las visiones de la noche, y, ¡pues vea! con las nubes de los cielos sucedía que venía alguien como un hijo del hombre; y al Anciano de Días obtuvo acceso, y lo presentaron cerca, aun delante, de Aquél. Y a él fueron dados gobernación y dignidad y reino, para que los pueblos, grupos nacionales y lenguajes todos le sirvieran aun a él. Su gobernación es una gobernación indefinidamente duradera que no pasará, y su reino uno que no será reducido a ruinas.”—Daniel 7:13, 14.
26. Hay hombres que alegan que “alguien como un hijo del hombre” representa ¿a quién?
26 ¿Quién es ese “alguien como un hijo del hombre” que viene, no en ascenso desde la Tierra, sino desde los cielos “con las nubes” y obtiene acceso al Anciano de Días que está entronizado en la corte judicial? Algunos, en vista de que después de esto no se menciona a este “alguien como un hijo del hombre” en la profecía, sino que se dice que los “santos del Supremo” obtienen gobernación del reino, piensan que se está haciendo referencia a una persona compuesta, la “nación santa” de Dios como cuerpo. Pero hay una autoridad confiable que señala quién es realmente ese “alguien como un hijo del hombre.” ¿Cómo sucede esto?
27, 28. (a) ¿Cómo se vio obligada una autoridad a identificar al que es “alguien como un hijo del hombre”? (b) ¿Cómo se trató entonces a éste?
27 Más de mil novecientos años atrás, en la noche de la Pascua (14 de Nisán) del año 33 E.C., un descendiente natural del rey David estuvo en juicio por su vida ante el Sanedrín judicial de Jerusalén. Después que este hombre rehusó contestar a los testimonios acusadores que se ofrecían contra él, el sumo sacerdote que presidía le dijo: “¡Por el Dios vivo te pongo bajo juramento de que nos digas si tú eres el Cristo el Hijo de Dios!” ¿Reconoció ahora el acusado que estaba bajo juramento ante el Dios vivo de decir la verdad acerca de sí mismo? ¡Sí! Reconoció la autoridad judicial del sumo sacerdote para colocarlo bajo juramento de declarar la realidad, aunque sabía que el decir la verdad le daría ante el Sanedrín Supremo la apariencia de ser un espantoso blasfemador.
28 El registro del proceso judicial nos dice: “Jesús le dijo: ‘Tú mismo lo dijiste. Sin embargo, les digo a ustedes: De aquí en adelante verán al Hijo del hombre sentado a la diestra de poder y viniendo sobre las nubes del cielo.’ Entonces el sumo sacerdote rasgó sus prendas exteriores de vestir, diciendo: ‘¡Ha blasfemado! ¿Qué más necesidad tenemos de testigos? ¡Miren! Ahora han oído la blasfemia. ¿Qué opinan?’ Dijeron en respuesta: ‘Expuesto está a muerte.’ Entonces le escupieron en el rostro y le dieron de puñetazos. Otros le dieron de bofetadas, diciendo: ‘Profetízanos, Cristo. ¿Quién es el que te hirió?’”—Mateo 26:63-68.
29. ¿Qué otra cosa muestra que Daniel 7:13 no significa un cuerpo compuesto?
29 Allí estaba, pues, el único hombre en la Tierra que podía con confiabilidad referirse a la profecía de Daniel, capítulo siete, versículo trece, e identificar correctamente a aquel “alguien como un hijo del hombre.” Sesenta y tres años después, Jesucristo, resucitado de entre los muertos y glorificado en el cielo, le transmitió una revelación a su apóstol Juan en la Tierra, y por inspiración Juan escribió lo siguiente acerca de él: “¡Miren! Viene con las nubes, y todo ojo le verá, y los que lo traspasaron; y todas las tribus de la tierra se golpearán en desconsuelo a causa de él. Sí, amén.” (Revelación 1:7) Tanto esta declaración de la Biblia como otras prueban que ese “alguien como un hijo del hombre” visto en la visión de Daniel es Jesucristo el Descendiente del rey David. En Salmo 8:4 (RVR) Daniel lo llamó proféticamente “el hijo del hombre.” (Hebreos 2:5-8, RVR) Repetidamente Jesús se llamó “el Hijo del hombre.” El individuo al cual se representa en Daniel 7:13 viniendo “con las nubes de los cielos” no es la compañía de los “santos mismos del Supremo,” sino el Descendiente real de David.—Mateo 24:30.
30, 31. Daniel 7:13 se cumplió, pero ¿por qué no en 70 E.C.?
30 ¿Cuándo acontece esta venida particular? Según los versículos que preceden a Daniel 7:13 ésta acontecería después que creciera el cuerno “pequeño” que arranca a otros tres cuernos que estaban en la cabeza de la cuarta bestia, lo cual sucedió en la última mitad del siglo dieciocho de la era común. De manera que la venida del Hijo del hombre “con las nubes de los cielos” no aconteció antes de ese tiempo, ni siquiera en 70 E.C., cuando se realizó esta profecía de él: “Caerán [los judíos rebeldes] a filo de espada, y serán llevados cautivos a todas las naciones; y Jerusalén será hollada por los gentiles [las naciones no judías], hasta que los tiempos de los gentiles se cumplan.” (Lucas 21:24, RVR) Esos “tiempos de los gentiles” habían empezado cuando Jerusalén fue desolada por los babilonios en 607 a. de la E.C. Durante esos Tiempos de los Gentiles a las naciones no judías se les permitió dominar la Tierra sin intervención procedente del reino davídico de Dios.
31 Al fin de esos Tiempos de los Gentiles, en 1914 E.C., el Heredero real de David podía con derecho solicitarle a Dios el mando del Reino.
32, 33. ¿Por qué no vimos la venida del que tenía el derecho legal?
32 Los acontecimientos que han cumplido profecías bíblicas desde 1914 E.C. hasta ahora mismo prueban que la venida del Hijo del hombre aconteció ese año. Por supuesto, ninguno de nosotros vio tal venida con sus ojos literales. No pudiéramos haberla visto, porque Daniel 7:13, 14 dice que el Hijo del hombre viene, no a la Tierra, sino al Anciano de Días, el Juez en el cielo que “está cambiando tiempos y sazones, removiendo reyes y estableciendo reyes.” (Daniel 2:21) Vino por invitación del Anciano de Días, según se registra en Salmo 2:8, 9: “Pídeme, para que yo dé naciones por herencia tuya y los cabos de la tierra por posesión tuya propia. Las quebrarás con cetro de hierro, como si fueran vaso de alfarero las harás añicos.” Entonces, sin adelantarse a su horario judicial, el Anciano de Días podría hacer lo que predijo en Ezequiel 21:25-27. Allí, después de mandar la remoción del turbante y la corona de la gobernación real davídica, dijo:
33 “Póngase en alto aun lo que está bajo, y póngase bajo aun al alto [el ocupante del trono del rey David]. Ruina, ruina, ruina la haré. En cuanto a ésta también, ciertamente no llegará a ser de nadie hasta que venga aquel que tiene el derecho legal, y tengo que dar esto a él.”
34. Por eso, ¿cómo desplegó Dios soberanía universal en 1914?
34 Toda la evidencia hasta la fecha muestra que al fin de los Tiempos de los Gentiles en 1914 el Anciano de Días sí dio el reino mesiánico al Heredero davídico que tenía el “derecho legal.” Como lo predijo Daniel 7:14: “A él fueron dados gobernación y dignidad y reino, para que los pueblos, grupos nacionales y lenguajes todos le sirvieran aun a él. Su gobernación es una gobernación indefinidamente duradera que no pasará, y su reino uno que no será reducido a ruinas.” Ese fue, precisamente, el tiempo para remover las simbólicas ataduras de hierro y cobre de alrededor del “tronco con las raíces” de la Soberanía Universal Divina ahora que habían terminado los “siete tiempos” proféticos de 2.520 años. Entonces era el tiempo marcado para que se hiciera sentir una vez más la Soberanía Universal de Jehová con relación a nuestra Tierra. ¿Cómo? Al hacer que un “renuevo” o vástago creciera de aquel “tronco con las raíces” que por mucho tiempo había estado latente, y probar así que “el Altísimo es Gobernante en el reino de la humanidad y que a quien él quiere dárselo se lo da, y coloca sobre él aun al de más humilde condición de la humanidad.”—Daniel 4:17, 23, 32; Isaías 11:1; Zacarías 3:8; 6:12.
35. ¿Qué “piedra” real fue puesta en moción entonces, y contra qué?
35 Ese fue, también, el tiempo para que la “piedra” simbólica fuera cortada de la “montaña” de la Soberanía Universal de Dios y entonces fuera arrojada contra la “imagen” de poderío mundial político en la Tierra. Va apuntada a herir los “pies” de hierro y barro moldeado. Entonces tiene que moler a la entera imagen idolátrica y convertirla en polvo. Finalmente tiene que crecer hasta convertirse en una montaña, y llenar toda la Tierra.—Daniel 2:34, 45.
36. ¿Qué nacimiento real aconteció entonces, y también qué anuncio?
36 Correspondientemente, en 1914 el reino mesiánico salió del vientre de la organización semejante a esposa de Jehová en el cielo, y se realizaron las palabras de Revelación 12:5: “Ella dio a luz un hijo, un varón, que ha de pastorear a todas las naciones con vara de hierro. Y su hijo fue arrebatado a Dios y a su trono.” Indudablemente fue entonces cuando los mil millares de ángeles que le ministraban al Anciano de Días y los diez mil veces diez mil que están de pie directamente delante de él unieron sus voces en anunciar por todo el universo: “El reino del mundo sí llegó a ser el reino de nuestro Señor y de su Cristo, y él gobernará como rey para siempre jamás.”—Revelación 11:15; Daniel 7:10.
37. Por lo tanto, ¿quién tiene que ser el Agente Principal de Dios en la gobernación?
37 A la luz de todo lo que ya se ha considerado, ¿quién es, pues, el Agente Principal de Dios para nuestro gobierno mundial entrante? Jesucristo, el ahora glorificado Heredero Permanente del rey David. Como hombre perfecto en la línea real de David, él “ofreció un solo sacrificio por los pecados perpetuamente y se sentó a la diestra de Dios [en 33 E.C.], esperando desde entonces hasta que sus enemigos fuesen colocados como banquillo para sus pies.”—Hebreos 10:12, 13; 1:3, 4; Salmo 110:1-6.
38. ¿Qué preguntas surgen acerca de los “santos” que participan en gobernar?
38 En el regir mundial venidero habrá partícipes con el Agente Principal de Dios, porque Daniel 7:27, 28 declara: “‘Y el reino y la gobernación y la grandeza de los reinos bajo todos los cielos fueron dados al pueblo que son los santos del Supremo. Su reino es un reino indefinidamente duradero, y todas las gobernaciones servirán y obedecerán aun a ellos.’ Hasta este punto es el final del asunto.” Por eso surge ahora la pregunta: ¿Era el “pueblo que son los santos del Supremo” el propio pueblo carnal del profeta Daniel, la nación de judíos o israelitas naturales, circuncisos? ¿Habían de llegar a ser las doce tribus de Israel que eran descendientes de carne y sangre de Abrahán, Isaac y Jacob el pueblo más encumbrado durante el reinado indefinidamente duradero del Mesías (Cristo), y llegarían a ser todas las naciones gentiles súbditos de ellos como gobernantes mundiales? Gente de todas las razas se han hecho esta pregunta. ¿Por qué no la consideramos ahora juntos?