En éstos, los que ocupan los puestos oficiales se colocan allí por el voto popular, por un partido político organizado, por el arrebatamiento dictatorial del poder, por nombramiento del poder ejecutivo, por la ley hereditaria de una dinastía, por acción legislativa o por nombramiento parlamentario.
... “Retengan en sí mismos esta actitud mental que también estaba en Cristo Jesús, quien, aunque estaba existiendo en forma de Dios, no dió consideración a un arrebatamiento, a saber, que debía ser igual a Dios.