7 Y la tierra empezó a sacudirse y a mecerse,+
y los fundamentos mismos de las montañas se agitaron,+
y siguieron sacudiéndose de aquí para allá porque él se había encolerizado.+
... 14 Que los dichos de mi boca y la meditación de mi corazón+
lleguen a ser placenteros delante de ti, oh Jehová, mi Roca+ y mi Redentor.+