De rincones escondidos comenzaron a sacar toda clase de artículos a fin de destruirlos: trajes costosos que usaban en las danzas paganas, amuletos de la buena suerte que solían emplearse para hacer que la tierra y el ganado fuesen fructíferos, reliquias familiares que habían sido usadas para hacer ofrendas a dioses falsos, cruces y literatura religiosa falsa.
... Una hermana de edad avanzada había estado postrada en cama hasta que su hija quemó todos los amuletos paganos, después de lo cual, según se informó, mejoró y a partir de entonces nunca se perdió una reunión de congregación.