No separemos lo que Dios ha unido
“Ya no son dos, sino una sola carne. Por lo tanto, lo que Dios ha unido bajo un yugo, no lo separe ningún hombre.” (MATEO 19:6.)
1, 2. De acuerdo con la Biblia y la realidad de la vida, ¿por qué es de esperar que las parejas atraviesen problemas de vez en cuando?
IMAGINE que está a punto de iniciar un largo viaje en automóvil. ¿Surgirán problemas a lo largo del recorrido? Sería ingenuo pensar que no. Por ejemplo, las malas condiciones del tiempo quizá lo obliguen a aminorar la marcha y conducir con precaución. En algún momento, tal vez se produzca una avería que usted no pueda reparar, de modo que tenga que dejar el vehículo al lado de la carretera y buscar ayuda. ¿Lo llevarían estas situaciones a pensar que fue un error salir de viaje y que debería abandonar el auto? Claro que no. Sabemos que en un viaje largo pueden surgir problemas, y cuando esto ocurre, buscamos la manera de resolverlos.
2 Lo mismo sucede con el matrimonio. Es inevitable que surjan problemas, y sería ingenuo que una pareja que va a casarse esperara una vida de total felicidad. En 1 Corintios 7:28, la Biblia advierte francamente que las personas casadas tendrían “tribulación en la carne”. ¿Por qué razón? En pocas palabras, porque son imperfectas y porque estamos viviendo en “tiempos críticos, difíciles de manejar” (2 Timoteo 3:1; Romanos 3:23). Por eso, de vez en cuando afrontarán problemas, incluso si se llevan bien y desean seguir la guía divina.
3. a) En este mundo, ¿cómo consideran muchas personas el matrimonio? b) ¿Por qué se esfuerzan los cristianos al máximo por conservar el matrimonio?
3 En este mundo moderno, lo primero que se les ocurre a muchas parejas al afrontar problemas es poner fin al matrimonio. De hecho, el índice de divorcios crece en muchos países a un ritmo vertiginoso. Pero los verdaderos cristianos afrontan los problemas en vez de huir de ellos. ¿Por qué? Porque consideran que el matrimonio es sagrado, un regalo procedente de Jehová. Respecto a las parejas casadas, Jesús dijo: “Lo que Dios ha unido bajo un yugo, no lo separe ningún hombre” (Mateo 19:6). Hay que admitir que vivir según esa norma no siempre es fácil. A menudo, parientes, consejeros matrimoniales y otras personas que no obedecen los principios bíblicos animan a los cónyuges a separarse o divorciarse sin base bíblica.a No obstante, los cristianos saben que es mucho mejor sanar y conservar el matrimonio que apresurarse a disolverlo. Es esencial que, ya desde el principio, nos determinemos a hacer las cosas como Jehová quiere, no según los consejos de otras personas (Proverbios 14:12).
Cómo superar las dificultades
4, 5. a) ¿Qué dificultades pueden surgir en el matrimonio? b) ¿Por qué son tan útiles los principios de la Palabra de Dios, incluso cuando surgen problemas en el matrimonio?
4 Es cierto que todos los matrimonios tienen dificultades de vez en cuando, si bien en la mayoría de los casos se trata de desacuerdos de escasa importancia. No obstante, hay parejas que atraviesan problemas tan graves que amenazan los cimientos mismos de la relación. Quizás hasta tengan que pedir ayuda a un superintendente cristiano casado y con experiencia. Pero estas situaciones no son prueba de que su matrimonio sea un fracaso. Simplemente subrayan la necesidad de ceñirse a los principios bíblicos.
5 Jehová es el Creador del género humano y el Fundador de la institución marital, así que sabe mejor que nadie lo que necesitamos para tener un matrimonio feliz. La pregunta es: ¿escucharemos los consejos de su Palabra? Si lo hacemos, no nos arrepentiremos. Jehová le dijo a su antiguo pueblo: “¡Oh, si realmente prestaras atención a mis mandamientos! Entonces tu paz llegaría a ser justamente como un río, y tu justicia como las olas del mar” (Isaías 48:18). Seguir las pautas expuestas en la Biblia es la clave del éxito. Veamos primero los consejos dirigidos a los esposos.
“Continúen amando a sus esposas”
6. ¿Qué aconseja la Biblia a los hombres casados?
6 La carta del apóstol Pablo a los Efesios contiene pautas muy claras para los hombres casados. Pablo escribió: “Esposos, continúen amando a sus esposas, tal como el Cristo también amó a la congregación y se entregó por ella. De esta manera los esposos deben estar amando a sus esposas como a sus propios cuerpos. El que ama a su esposa, a sí mismo se ama, porque nadie jamás ha odiado a su propia carne; antes bien, la alimenta y la acaricia, como también el Cristo hace con la congregación. Sin embargo, también, que cada uno de ustedes individualmente ame a su esposa tal como se ama a sí mismo” (Efesios 5:25, 28, 29, 33).
7. a) ¿Qué componente esencial deben tener los cimientos de un matrimonio cristiano? b) ¿Cómo pueden los esposos demostrar que continúan amando a sus esposas?
7 Pablo no trata en detalle todo problema imaginable que pueda surgir entre los cónyuges. Más bien, llega al fondo de la cuestión señalando lo que debe ser un componente esencial de los cimientos de todo matrimonio cristiano: el amor. De hecho, el amor se menciona siete veces en los versículos antes citados. Observe también que el apóstol dice a los esposos que “continúen amando a sus esposas”. Sin duda, se daba cuenta de que enamorarse puede ser mucho más fácil que seguir enamorado. Tal afirmación es especialmente cierta en estos “últimos días”, en los que tantos hombres son “amadores de sí mismos” y “no [están] dispuestos a ningún acuerdo” (2 Timoteo 3:1-3). Esas características están destrozando muchos matrimonios hoy, pero un esposo amoroso no debe permitir que la actitud egoísta del mundo influya en su modo de pensar y actuar (Romanos 12:2).
Cómo satisfacer las necesidades de la esposa
8, 9. ¿Qué necesidades de la esposa satisface el esposo cristiano?
8 Si usted es un esposo cristiano, ¿cómo puede rechazar las tendencias egoístas y demostrar verdadero amor a su esposa? En las palabras de la carta a los Efesios citadas antes, Pablo indicó que debe hacer dos cosas: alimentar a su esposa, es decir, atender sus necesidades, y acariciarla, o cuidarla como a su propio cuerpo. ¿De qué maneras puede satisfacer las necesidades de ella? Una es materialmente, atendiendo sus necesidades físicas. Pablo escribió a Timoteo: “Ciertamente si alguno no provee para los que son suyos, y especialmente para los que son miembros de su casa, ha repudiado la fe y es peor que una persona sin fe” (1 Timoteo 5:8).
9 Sin embargo, no basta con darle un techo, alimento y ropa. ¿Por qué no? Porque un esposo podría satisfacer con creces las necesidades materiales de la esposa y, aun así, no atenderla bien en sentido emocional ni espiritual. Y esto último es esencial. Es verdad que muchos varones cristianos están muy ocupados con las tareas de la congregación. Pero el hecho de tener importantes responsabilidades teocráticas no excusa al esposo de cumplir con los deberes que Dios le ha asignado como cabeza de familia (1 Timoteo 3:5, 12). Hace unos años, esta misma revista hizo el siguiente comentario al respecto: “En armonía con los requisitos bíblicos, se puede decir que ‘el pastoreo empieza en casa’. Si un anciano descuida su familia, pudiera poner en peligro su nombramiento”.b Está claro que es vital que usted satisfaga las necesidades de su esposa, tanto en sentido físico como emocional y, por encima de todo, espiritual.
Cómo cuidar a la esposa
10. ¿Cómo puede el esposo cuidar a la esposa?
10 El amor debe moverlo a usted, esposo, a cuidar a su esposa y a mostrarle su cariño de varias maneras. En primer lugar, dedíquele suficiente tiempo. De lo contrario, el amor que ella le tiene podría enfriarse. Piense, también, que su esposa quizá sienta que necesita más tiempo y atención de lo que usted cree. No basta con que afirme que la quiere. Ella necesita sentirse querida. Pablo escribió: “Que cada uno siga buscando, no su propia ventaja, sino la de la otra persona” (1 Corintios 10:24). El esposo amoroso debe asegurarse de saber cuáles son las verdaderas necesidades de la esposa (Filipenses 2:4).
11. ¿Qué efecto tiene en la relación de un esposo con Dios y con la congregación la forma en que él trata a su esposa? (Véase también la nota.)
11 Otra manera de cuidar a su esposa es tratándola con ternura, tanto de palabra como de obra (Proverbios 12:18). Pablo escribió en su carta a los Colosenses: “Esposos, sigan amando a sus esposas y no se encolericen amargamente con ellas” (Colosenses 3:19). Según cierta obra de consulta, esta última frase de Pablo puede traducirse “no la traten como una criada” o “no la conviertan en una esclava”. De seguro, el esposo que se comporta como un tirano —ya sea en privado o en público— no demuestra amor a su esposa. Al tratarla con aspereza, su propia relación con Dios se ve afectada. El apóstol Pedro escribió a los esposos: “Continúen morando con [sus esposas] de igual manera, de acuerdo con conocimiento, asignándoles honra como a un vaso más débil, el femenino, puesto que ustedes también son herederos con ellas del favor inmerecido de la vida, a fin de que sus oraciones no sean estorbadas” (1 Pedro 3:7).c
12. ¿Qué puede aprender el esposo cristiano de la forma en que Jesús trató a la congregación?
12 Nunca dé por sentado el amor de su esposa. Dele continuas muestras de cariño. La forma en que Jesús trató a la congregación sirve de modelo para los esposos cristianos. Él fue amable, bondadoso y misericordioso con sus discípulos, incluso cuando en repetidas ocasiones manifestaron malas tendencias; de ahí que pudiera decir a sus oyentes: “Vengan a mí, [...] porque soy de genio apacible y humilde de corazón, y hallarán refrigerio para sus almas” (Mateo 11:28, 29). El esposo cristiano imita a Jesús y trata a su esposa de la misma manera como él trató a la congregación. El hombre que de veras ama a su esposa, y que lo demuestra con sus palabras y sus actos, será para ella una fuente de auténtico refrigerio y felicidad.
Esposas que obedecen los principios bíblicos
13. ¿Qué principios bíblicos son útiles para las esposas?
13 La Biblia también contiene principios útiles para las esposas. Efesios 5:22-24, 33 dice así: “Que las esposas estén en sujeción a sus esposos como al Señor, porque el esposo es cabeza de su esposa como el Cristo también es cabeza de la congregación, siendo él salvador de este cuerpo. De hecho, como la congregación está en sujeción al Cristo, así también lo estén las esposas a sus esposos en todo. [...] La esposa debe tenerle profundo respeto a su esposo”.
14. ¿Por qué no degrada a la mujer el principio bíblico de sujeción?
14 Observe cuánta importancia dio Pablo a la sujeción y el respeto. A la esposa se le recuerda que debe sujetarse a la autoridad de su esposo, según el orden que Dios ha dispuesto. Todo ser vivo, tanto en el cielo como en la Tierra, está sujeto a alguien. Hasta Jesús se somete a Jehová Dios (1 Corintios 11:3). Claro está, a la esposa le resultará más fácil permanecer en sujeción a su esposo si él ejerce su autoridad de la manera apropiada.
15. ¿Qué consejos para las esposas hallamos en la Biblia?
15 La esposa cristiana “debe tenerle profundo respeto a su esposo”, como también recalcó Pablo. Ha de manifestar un “espíritu quieto y apacible”, sin desafiar a su marido ni adoptar una actitud independiente ni arrogante (1 Pedro 3:4). Asimismo, debe trabajar con empeño por el bienestar de la familia y honrar a su cabeza (Tito 2:4, 5). Procurará hablar bien de su esposo y no hacer nada que lo rebaje a los ojos de otras personas. Y, además, se esforzará por lograr que las decisiones que él tome tengan buenos resultados (Proverbios 14:1).
16. ¿Qué pueden aprender las esposas del ejemplo de Sara y Rebeca?
16 El hecho de que la mujer cristiana manifieste un espíritu quieto y apacible no significa que carezca de opiniones o que sus puntos de vista no sean importantes. En la antigüedad hubo mujeres piadosas, como Sara y Rebeca, que tomaron la iniciativa y expresaron sus inquietudes, y la Biblia muestra que Jehová aprobó lo que hicieron (Génesis 21:8-12; 27:46–28:4). Igualmente, las esposas cristianas pueden dar a conocer lo que piensan, pero deben hacerlo con consideración, sin menospreciar al esposo. De ese modo, probablemente logren que este responda mejor a sus comentarios.
La fuerza del compromiso
17, 18. ¿De qué maneras pueden los cónyuges impedir que Satanás destruya su matrimonio?
17 El matrimonio es un compromiso para toda la vida, así que ambos deben tener el deseo sincero de que su unión funcione. La falta de comunicación franca contribuye a que las diferencias empeoren y se conviertan en problemas graves. Muy a menudo, los cónyuges dejan de hablarse cuando surgen desacuerdos, y eso abre la puerta al resentimiento. Hay quienes hasta buscan la manera de acabar con la relación, quizá alimentando un interés romántico por otra persona. Jesús advirtió: “Todo el que sigue mirando a una mujer a fin de tener una pasión por ella ya ha cometido adulterio con ella en su corazón” (Mateo 5:28).
18 A todos los cristianos, incluidos los casados, el apóstol Pablo dirigió este consejo: “Estén airados, y, no obstante, no pequen; que no se ponga el sol estando ustedes en estado provocado, ni dejen lugar para el Diablo” (Efesios 4:26, 27). Satanás, nuestro principal enemigo, procura aprovecharse de las dificultades que puedan surgir entre cristianos. ¡No deje que se salga con la suya! Cuando se presenten problemas, investigue lo que Jehová piensa al respecto con ayuda de las publicaciones bíblicas, y hable calmada y francamente con su cónyuge. Salve la distancia entre lo que usted sabe que son las normas de Jehová y lo que en realidad hace para aplicarlas (Santiago 1:22-25). Resuélvase a seguir andando con Dios en su matrimonio, sin permitir que nada ni nadie separe lo que él ha unido (Miqueas 6:8).
[Notas]
a Véase el recuadro “El divorcio y la separación” en la revista ¡Despertad! del 8 de febrero de 2002, pág. 10, editada por los testigos de Jehová.
b Véase La Atalaya del 15 de mayo de 1989, pág. 12.
c Para recibir privilegios en la congregación cristiana, el hombre no debe ser “golpeador”, es decir, no debe maltratar a otros ni física ni verbalmente. Por eso, La Atalaya del 1 de septiembre de 1990 declaró en la pág. 25: “El hombre casado que se comporta de manera piadosa en otros lugares pero es un tirano en el hogar no está capacitado para servir” (1 Timoteo 3:2-5, 12).
¿Lo recuerda?
• ¿Por qué hasta los matrimonios cristianos atraviesan problemas?
• ¿Cómo puede el esposo satisfacer las necesidades de su esposa y cuidarla?
• ¿Qué puede hacer la esposa para mostrar profundo respeto a su esposo?
• ¿Cómo pueden las parejas fortalecer su sentido de compromiso?
[Ilustración de la página 20]
El esposo no solo debe satisfacer las necesidades materiales de su esposa, sino también las espirituales
[Ilustración de la página 21]
El hombre que ama a su esposa es una fuente de felicidad para ella
[Ilustración de la página 23]
Las esposas cristianas expresan sus sentimientos con respeto