Isaías
Que se acerquen, y que entonces hablen.+
Reunámonos para el juicio.
2 ¿Quién hizo venir a alguien desde el este,*+
llamándolo a sus pies* para hacer justicia,
para entregarle naciones
y para que someta a reyes?+
¿Quién los reduce a polvo ante su espada
y los dispersa ante su arco como rastrojo que se lleva el viento?
3 Él los persigue, avanza sin que nada lo detenga
por senderos que sus pies no han pisado.
4 ¿Quién ha actuado y ha hecho esto,
convocando a las generaciones desde el principio?
5 Las islas lo han visto y les ha entrado miedo.
Los confines de la tierra empezaron a temblar.
Se juntan y avanzan.
6 Cada uno ayuda a su compañero
y le dice a su hermano: “Sé fuerte”.
7 Así el artesano anima al orfebre,+
y el que aplana con el martillo de forja,
al que martilla en el yunque.
Dice sobre la soldadura: “Quedó bien”.
Luego fijan el ídolo con clavos para que no se caiga.
8 “Pero tú, Israel, eres mi siervo,+
tú, Jacob, a quien he elegido,+
la descendencia de mi amigo Abrahán,+
9 tú, a quien traje de los confines de la tierra,+
y tú, a quien llamé de sus partes más remotas.
10 No tengas miedo, porque estoy contigo.+
No te angusties, porque yo soy tu Dios.+
Yo te daré fuerzas. Sí, yo te ayudaré.+
Con mi mano derecha de justicia, de veras te sostendré’.
11 ¡Mira! Todos los que se enfurecen contigo serán avergonzados y humillados.+
Los que pelean contra ti serán reducidos a nada y desaparecerán.+
12 Buscarás a los que luchan contra ti, pero no los encontrarás.
Los hombres que te hacen la guerra serán como nada en absoluto, como algo que no existe.+
13 Porque yo, Jehová tu Dios, tengo agarrada tu mano derecha;
soy el que te dice: ‘No tengas miedo. Yo te ayudaré’.+
14 No tengas miedo, pequeño gusano* Jacob,+
oh, pueblo de Israel, yo te ayudaré”, afirma Jehová, tu Recomprador,+ el Santo de Israel.
Pisotearás las montañas y las triturarás,
y convertirás las colinas en polvo.*
17 “Los necesitados y los pobres andan buscando agua, pero no hay.
Su lengua está seca de tanta sed.+
Yo, Jehová, les responderé.+
Yo, el Dios de Israel, no los abandonaré.+
Transformaré el desierto en una charca llena de cañas
y la tierra reseca en manantiales de agua.+
En la llanura desértica plantaré enebros,
junto con fresnos y cipreses,+
20 para que toda la gente vea y sepa,
preste atención y entienda
que la mano de Jehová ha hecho esto
y que el Santo de Israel lo ha creado”.+
21 “Expongan su caso”, dice Jehová.
“Presenten sus argumentos”, dice el Rey de Jacob.
22 “Presenten pruebas y dígannos las cosas que van a suceder.
O bien anúnciennos las cosas que están por venir.+
Sí, hagan algo, bueno o malo,
para que nos quedemos impresionados al verlo.+
Cualquiera que los escoge a ustedes es despreciable.+
26 ¿Quién ha hablado de esto desde el principio para que lo supiéramos
o desde tiempos pasados para que pudiéramos decir ‘Tiene razón’?+
Exacto, ¡nadie lo ha anunciado!
¡Nadie lo ha declarado!
¡Nadie los oyó a ustedes decir nada!”.+
27 Yo fui el primero en decirle a Sion “¡Mira! ¡Aquí están!”,+
y enviaré a Jerusalén un mensajero de buenas noticias.+
28 Pero seguí mirando, y no había nadie;
no había entre ellos ni uno que pudiera dar algún consejo.
Y seguí pidiéndoles que respondieran.
29 ¡Mira! Todos ellos son solo una ilusión.*
Sus obras nada son.