Venciendo los obstáculos a la creencia
ANTES de que puedan creer verdaderamente en Dios y aceptar la Biblia como Su Palabra, a muchas personas se les presentan obstáculos que tienen que vencer. Eso fue cierto en el caso de un ateo del Japón, quien dijo más tarde:
‘Mis padres son ateos empedernidos y dos de mis hermanas son partidarias de [la secta] Sokagakkai. Mi abuela adoraba a un famoso budista antiguo llamado Kobodaishi, practicaba la adivinación y a veces ejecutaba curaciones por fe. Por tales prácticas de ella, generalmente recibíamos una gran cantidad de dinero y una abundante cantidad de arroz, legumbres y otras cosas necesarias. Estos antecedentes influyeron profundamente en mí. Sabía que la adoración del dios de mi abuela era un medio de ganar riquezas materiales. Desde la niñez yo estuve bien relacionado con la hipocresía de personas que alegaban creer, de modo que personalmente no estaba interesado en Dios.
‘Al mismo tiempo, mi vida privada era una vida vergonzosa. Cada noche iba a jugar MahJongg (un juego chino de envite) y a jugar a los bolos. Al amanecer llegaba a casa borracho. Para el mediodía me levantaba y hacía algún trabajo en la casa. Luego volvía a la misma rutina. Como resultado de la manera en que vivía, enfermé y fui sometido a una seria operación del estómago. Constantemente peleaba con mi esposa.
‘Para ese tiempo oí que uno de mis amigos, que era un hombre serio, estaba estudiando la Biblia. Cuando él me habló por primera vez acerca de Dios, usando la Biblia, reaccioné con odio. Temía que la religión engañaría a mi amigo, de modo que hice un gran esfuerzo por impedir que siguiera estudiando la Biblia. Aunque traté vez tras vez, él estaba resuelto a persistir en su creencia, y no cedió. Así es que yo comencé a estudiar la Biblia, pero no porque deseara entenderla. Mi propósito era criticar la Biblia para convencer a mi amigo de que debería dejar de estudiarla.
‘Pero a medida que fui estudiando, comencé a entender la verdad. Llegué a convencerme de que Jehová es diferente de todos los demás dioses, de que es un Dios de amor y misericordia, el Todopoderoso, nuestro Creador, así como nuestro Dador de Vida. La Biblia dice en Hebreos 4:12 que “la palabra de Dios es viva y ejerce poder.” Estoy convencido de eso, porque el estudiar la Biblia me llevó a cambiar del anterior proceder inmoderado que seguía en la vida. Cuando dejé de pelear con mi esposa, ella se dio cuenta del cambio en mí y empezó a asistir conmigo a las reuniones de los testigos de Jehová. Ella me dice a menudo que ahora verdaderamente confía en mí, y nuestra vida familiar es feliz.’
Otra persona que era atea, también del Japón, hizo estos comentarios más tarde: ‘Yo había estudiado en la universidad, participado en actividades del comunismo, me había dedicado al placer, y ahora era una mujer casada. Pero un día me sorprendió aprender por medio de un testigo de Jehová lo que la Biblia dice que el gobierno de Dios hará para esta Tierra y cómo en verdad será la vida entonces. Leí algunos de los libros de la Watch Tower incluso uno intitulado “¿Es la Biblia realmente la Palabra de Dios?” De lo que leí pude ver que estas personas tenían algo, una confianza basada en las verdades objetivas de la Biblia, un registro libre de hipocresía, una disposición a arriesgar la vida por lo que creen. Quise asistir a sus reuniones. Y comencé a orar: “Si existes, Dios, por favor enséñame.” Pronto comprendí que había hallado lo que buscaba. Aunque en forma modesta, quiero mostrar a Jehová mi aprecio por su misericordia al haberme permitido oír las “buenas nuevas.”’