La vida es diferente en Australia
POR EL CORRESPONSAL DE ¡DESPERTAD! EN AUSTRALIA
AUSTRALIA, cuyo nombre procede del término latino australis, que significa “del sur”, es una extensa isla situada en el hemisferio sur, o austral, generalmente considerada como un continente: el continente insular de Australia.
Sí, la vida en Australia es diferente de la de muchos países del hemisferio norte, y no solo por su ubicación geográfica. Veamos algunas de las muchas peculiaridades que observan quienes visitan el continente austral.
Poblamiento europeo
El poblamiento europeo de este inmenso y soleado país empezó en 1788, cuando un convoy de naves, conocido como la primera flota, arribó a la ensenada de Sydney. La mayoría de los pasajeros eran convictos de Inglaterra, Irlanda y Escocia, y trajeron consigo la lengua inglesa. Durante los siguientes ciento cincuenta años, la mayor parte de los inmigrantes fueron de origen británico.
Ahora bien, después de la II Guerra Mundial, este patrón de inmigración cambió. Hoy día hay miles de “nuevos australianos” procedentes de distintos países, principalmente de Italia y Grecia. Los inmigrantes han dado variedad al modo de vivir australiano y han traído consigo su propio idioma y su pronunciación característica del inglés, así como su gastronomía y cultura.
De ahí la gran variedad de acentos que se oyen en Australia. Pero hasta aquellos cuyas familias han vivido en el país por muchas generaciones tienen un acento y una forma de hablar y escribir inglés peculiares. La pronunciación australiana de las vocales inglesas a, e, i, o, u adopta un sonido apagado y a menudo indistinto, que a veces requiere tiempo distinguirlo con claridad. Luego están las expresiones propias de Australia. Por ejemplo, en lugar de decir el equivalente a “Buenos días”, “Buenas tardes” o “Buenas noches”, su saludo típico a cualquier hora del día o de la noche es un amigable “¡Buen día, compañero!”. Después se sigue hablando cortésmente de la salud y tal vez se le pregunte al visitante: “¿Cómo le va, compañero?, ¿bien?”.
La gente también es distinta
Para sobrevivir en esta tierra escabrosa hacía falta adaptabilidad y carácter. Probablemente de ahí provenga gran parte del optimismo de muchos australianos, que dio lugar a la expresión: “Sin problemas, compañero. Ella estará bien”. Con esas palabras dan a entender que no hay que preocuparse mucho cuando la situación parece poco prometedora, pues a la larga todo saldrá bien.
El prólogo de la publicación The Australians (Los australianos) dice: “Es lógico que un país que inicia su vida en cadenas, y doscientos años después se convierte en una de las naciones pequeñas más activas y prósperas, tenga ciudadanos variados y fascinantes. [...] Estos son [...] Los australianos”.
Muchos australianos opinan que el fuerte sentimiento de solidaridad o camaradería que les une proviene del marcado instinto de supervivencia que desarrollaron durante los últimos dos siglos. Les gusta destacar la tenacidad de los soldados australianos en la I Guerra Mundial. Las intrépidas tropas australianas, unidas a las fuerzas armadas neozelandesas, formaron el ANZAC, sigla en inglés para Cuerpo de Ejército de Australia y Nueva Zelanda. También se les llegó a conocer como “cavadores”, pero no se sabe con certeza si fue porque cavaban trincheras o porque cavaban en los yacimientos de oro de Australia, a los que tantos hombres acudieron durante el siglo XIX.
Una importante diferencia: conducen por la izquierda
Los turistas procedentes de países donde el tráfico fluye por el lado derecho de la carretera, encuentran que conducir en Australia es muy diferente. En todo el país los vehículos circulan por la izquierda.
De modo que si llega a Australia procedente de un país en el que se circula por la derecha, el simple acto de cruzar una calle transitada puede ser muy peligroso. La costumbre de mirar a la izquierda, luego a la derecha y de nuevo a la izquierda antes de atravesar la calzada puede tener consecuencias desastrosas. En Australia debe recordar que hay que mirar a la derecha, luego a la izquierda y de nuevo a la derecha antes de cruzar. ¡Bien hecho! Está aprendiendo deprisa. ¡Huy! Por poco se mete en el auto por el lado contrario. Olvidó que en este país el volante está a la derecha.
Patrones climáticos diferentes
En el hemisferio sur las estaciones están invertidas con relación a las del hemisferio norte. Los vientos cálidos y secos soplan desde el norte y el noroeste, mientras que todos los fríos vienen del sur. Aquí nunca se habla del viento del norte que trae frío, pero tenga cuidado con el violento y helado viento del sur que puede traer hasta tormentas de nieve.
Australia es el continente más seco y caluroso de la Tierra, con temperaturas en las regiones secas del interior de hasta 30 °C. La temperatura más alta que se conoce es de 53,1 °C. La más baja, de 22 °C bajo cero, se midió cerca del monte Kosciusko, la cima más elevada de Australia, en la región de las Snowy Mountains.
Según el criterio del hemisferio norte, en Australia nunca hace mucho frío. Por ejemplo, considere Melbourne, la capital del estado de Victoria. Aunque esta ciudad se encuentra en el extremo sur de Australia, la temperatura media diaria en el mes invernal de julio oscila entre 6 y 13 °C. Compare estas cifras con la temperatura media diaria de enero en Pekín (China) —entre 10 °C bajo cero y 1 °C sobre cero—, o la de Nueva York —entre 4 °C bajo cero y 3 °C sobre cero—. Ambas ciudades se encuentran a una distancia del ecuador similar a la de Melbourne. ¿Por qué hace más calor en Australia, teniendo en cuenta su proximidad al territorio más frío del planeta, la Antártida?
La diferencia de temperaturas se debe a que en el hemisferio norte dominan las masas de tierra mientras que en el hemisferio sur dominan los océanos. Australia y Nueva Zelanda están rodeadas de miles de kilómetros cuadrados de mar, lo que crea una barrera de aire más cálido que amortigua las gélidas masas de aire antárticas, y mantiene el clima más cálido.
Debido al inmenso tamaño del continente australiano, la variación climática entre unas regiones y otras es bastante marcada. En las regiones más meridionales se observa el paso de las cuatro estaciones, aunque en invierno, tras las noches despejadas, frías o hasta de helada suelen amanecer días agradables y templados cuyas temperaturas se asemejan a las de verano en muchos países del hemisferio norte. Ahora bien, en la zona norte de Australia, el año solo tiene dos estaciones: la larga estación seca y la estación húmeda con sus lluvias monzónicas. En Darwin, la capital del Territorio Septentrional, la temperatura se mantiene a unos 32 °C todo el año.
Otras diferencias
En vista de que el clima es predominantemente cálido en gran parte del continente, la mayoría de los australianos se visten con ropa informal. Aunque es importante llevar un sombrero de ala ancha, pues debido a la mayor exposición a la luz solar, en esta parte del mundo la incidencia de cáncer de piel es superior a la de los países más templados.
Como en Australia todavía abundan los grandes espacios abiertos, se han habilitado muchas zonas para comer al aire libre y asar los alimentos en barbacoas. Dado que la carne es relativamente barata, la típica barbacoa es de salchichas y churrascos. ¿Qué hacen con la mano esas personas que están de pie alrededor de la barbacoa? ¿Se comunican algún mensaje secreto en señas? No, solo espantan las moscas con la mano que les queda libre. Las moscas y los mosquitos son un verdadero problema cuando se come en el campo, especialmente si el clima es cálido.
Quienes residen en el continente austral tienen que aprender a vivir con las moscas y los mosquitos, por eso la mayoría de las casas disponen de puertas mosquiteras tanto delante como detrás de la casa. Antiguamente la gente llevaba un sombrero de ala de la cual colgaban varios corchos que al moverse ahuyentaban las moscas. Pero desde que llegaron los repelentes de insectos, ya no son muy comunes esos sombreros.
Otra diferencia tiene que ver con las magníficas y coloridas flores de los campos, arbustos y árboles. Su fragancia no es tan fuerte como la que normalmente poseen las del hemisferio norte. Aquí, es necesario que el amante de las flores se acerque mucho a ellas para percibir bien su aroma. Aunque, por supuesto, no es así con todas. La fragancia de los arbustos del género Daphne y los jazmines, por ejemplo, constituye una verdadera delicia para el olfato. Pero en términos generales, las flores son menos olorosas que las de climas más fríos.
Grandes espacios abiertos
El espacio es un aspecto realmente diferente de la vida en Australia. El concepto de cerca y lejos difiere del de muchos países septentrionales. Las distancias entre algunos municipios son tan grandes que uno puede pasar horas viajando sin ver una población, particularmente en el interior desierto del continente, llamado cariñosamente el outback. En dicha región se percibe una sobrecogedora sensación de espacio y tranquilidad, y los visitantes pueden llenar los pulmones con aire fresco e incontaminado. Ahí cerca hay un eucalipto, y allí una acacia. Estos árboles son característicos del paisaje del interior.
Al acercarse la noche, una magnífica puesta de sol le deleita la vista. Pero en esta parte del mundo el ocaso es muy breve, por lo que la oscuridad se presenta con asombrosa rapidez. Pronto contempla un cielo nocturno despejado y brillante tachonado de estrellas, entre las que se destacan las de la famosa constelación Cruz del Sur. Los eucaliptos se recortan en el cielo mientras los animales empiezan a recogerse, y usted nota que le rodea una inmensa quietud que parece acentuar la sensación de gran espacio abierto.
No olvide apagar completamente la hoguera antes de acurrucarse en el saco de dormir. Eso es muy importante, pues en Australia, cuando el fuego se propaga sin control por la despoblada extensión de monte bajo, se convierte rápidamente en un holocausto que no respeta nada de lo que encuentra en su camino. Las copas de los eucaliptos explotan a causa del intenso calor, lo que propaga el fuego a una velocidad vertiginosa. En los calurosos y secos meses de verano, los incendios forestales constituyen una constante amenaza para los que viven cerca de las zonas de monte. De ahí que deba obedecerse estrictamente toda prohibición y regla relacionada con encender fuego al aire libre.
Pronto despunta el día, y le despierta la ruidosa risa que emite un grupo de cucaburras cuando rompen a cantar alegremente tras pasar la noche en un eucalipto próximo. Desconcertado, usted se asoma por la puerta de la tienda y ve otros árboles repletos de aves de hermosos colores. A estas alturas del viaje probablemente ya habrá visto muchas de esas aves, además de canguros, koalas, emúes y tal vez incluso algún uómbat. Con quienes seguramente no desea tropezar es con las serpientes y las arañas. Este continente alberga algunas de las serpientes y arañas más venenosas del mundo. Pero la mayoría de ellas no le harán nada si usted no las molesta.
Llegó la hora de desayunar alrededor de la hoguera. El menú es el de costumbre: huevos con tocino y unas rebanadas de pan bien tostado. El aire fresco le ha abierto el apetito. Mientras trata de saborear su desayuno en medio de las moscas, comienza a reflexionar en esta excursión por el interior del país, la cual le ha dado una visión de la inmensidad del continente australiano.
Ya ha terminado su recorrido por esta espaciosa nación, y es tiempo de regresar a casa. Seguramente, el recuerdo de los amigables australianos y su sencillo estilo de vida seguirá vivo en su memoria. Como casi todos los turistas, es probable que desee regresar algún día. Pero sea como fuere, habrá llegado a la misma conclusión que todos: La vida es diferente en Australia.
[Reconocimiento de la página 17]
Periquito y cacatúa rosada: Por cortesía de Australian International Public Relations; mujer: Por cortesía de West Australian Tourist Commission