Los jóvenes preguntan...
¿Cómo puedo sobrellevar la burla?
LOS JÓVENES que se comportan o visten de manera distinta a la de sus compañeros pueden ser víctimas de burla cruel. Esto es cierto en el caso de los jóvenes cristianos, cuya conducta difiere muy a menudo de la de otros. ¿No dijo Jesús con respecto a sus verdaderos seguidores: “Si ellos me han perseguido a mí, a ustedes también los perseguirán”? (Juan 15:20.)
¿Cómo afecta esto a los jóvenes testigos de Jehová? Hay quien se ríe de ellos porque no celebran ciertas fiestas, y otros los critican por negarse a saludar la bandera. A muchos incluso se les hostiga por no usar drogas, ser honrados y mantener los valores morales de la Biblia.
Esto no es nuevo. Es más, el apóstol Pedro dijo a los cristianos del siglo primero: “Porque no continúan corriendo con [la gente de las naciones] [...], ellos están perplejos y siguen hablando injuriosamente de ustedes” (1 Pedro 4:4). Otras traducciones dicen “se burlan de vosotros” (Barclay) o “los llenan de insultos” (Nueva Versión Internacional, 1985).
¿Te han ridiculizado en alguna ocasión por tus convicciones religiosas? Si es así, cobra ánimo, no eres el único. Y te alegrará saber que puedes aprender a sobrellevar la molestia que causa la burla debido a tu fe.
Por qué se burlan
¿Por qué se ríen algunos de los que tienen creencias y conducta diferentes a las suyas? A veces los burlones, al igual que los abusones, son personas inseguras de sí mismas. Es posible que se mofen de ti para presumir delante de sus amigos. Seguramente, cuando están solos, pocos de estos provocadores tienen la intención o el valor para burlarse de ti con descaro.
Por otra parte, como escribió Pedro, algunos burlones están “perplejos”. Sí, tal vez estén de verdad desconcertados con tu proceder. Por ejemplo, si eres testigo de Jehová, podrían ver totalmente extraño que no participes en actividades relacionadas con ciertas fiestas. Puede que hasta hayan recibido de opositores acérrimos información tergiversada sobre los Testigos.
Sea cual sea la causa, cuando te enfrentes a una avalancha de comentarios desdeñosos y burlones, quizá concuerdes con el proverbio bíblico que dice: “Existe el que habla irreflexivamente como con las estocadas de una espada” (Proverbios 12:18). Pero recuerda que los que emplean esa clase de palabras no lo hacen porque les disgustes como persona. Lo más probable es que estén haciendo justo lo que dice el proverbio: ‘hablar irreflexivamente’.
Aun así, ser objeto de burla duele como si fuera una estocada. Quizá te veas incluso tentado a transigir en cuanto a tu fe para detener el aluvión de insultos. ¿Cómo puedes, entonces, sobrellevar la burla a causa de tus creencias?
Cómo defenderte
El apóstol Pedro aconsejó a los cristianos: “[Estén] siempre listos para presentar una defensa ante todo el que les exija razón de la esperanza que hay en ustedes, pero haciéndolo junto con genio apacible y profundo respeto” (1 Pedro 3:15). Presentar dicha defensa de tu fe exige que adquieras conocimiento exacto y que llegues a entender el por qué de tus creencias.
Además, debes aprender a expresarte con “profundo respeto” o, como dice la versión de Mariano Galván Rivera, “con [...] modestia”. El conocimiento que tienes de la Biblia y sus enseñanzas no te autoriza para sentirte superior a los demás. Al contrario, debes esforzarte por cultivar la actitud del apóstol Pablo, quien escribió concerniente a su ministerio: “Me he hecho el esclavo de todos, para ganar el mayor número de personas” (1 Corintios 9:19).
Si te retraes a la hora de responder en defensa de tu fe, no te desesperes. Muchos Testigos jóvenes se han sentido igual que tú. “Cuando estaba en la escuela primaria —dice Jamal—, no sabía explicar por qué no celebraba las fiestas o no saludaba la bandera o ni siquiera por qué predicaba de casa en casa.” ¿Qué le ayudó? “Mi padre siguió instruyéndome hasta que por fin pude explicar estas cosas, lo cual marcó una gran diferencia.” Si tienes dificultad en demostrar lo que crees, tal vez puedas conseguir el apoyo de tus padres o de otro miembro maduro de la congregación cristiana a fin de que captes a plenitud el conocimiento de Dios (Efesios 3:17-19).
Una Testigo de 16 años dijo que un programa personal de estudio de la Biblia le vino muy bien para armarse de valor y defenderse en la escuela. “Antes, cuando mis compañeros de clase se burlaban de mí por ser Testigo, no sabía qué decir —admite—. Ahora, como ministra de tiempo completo, estudio la Biblia mucho más y soy capaz de dar una respuesta. Mantenerme al día con los últimos artículos de La Atalaya y ¡Despertad! me permite hablar con mis compañeros acerca de mi fe.”
Por supuesto, no hay dos situaciones idénticas. Cada circunstancia exige una respuesta diferente. Sin embargo, cuando te provoquen con un comentario desagradable, nunca es apropiado ‘devolver mal por mal’ (Romanos 12:17-21). Devolver el insulto, por ingenioso que sea, tan solo avivará el fuego y es posible que fomente nuevos insultos. Por esa razón, algunos prefieren ignorar la provocación.
En ocasiones, como cuando se dice algo gracioso, sin mala intención, puede que lo mejor sea reírse con el comentario más bien que ofenderse (Eclesiastés 7:9). Si el hostigador se da cuenta de que sus palabras tienen poco o ningún efecto, posiblemente cese el acoso (compara con Proverbios 24:29; 1 Pedro 2:23).
Expón tu postura
Por otra parte, hay veces en las que podrás hacer una breve y discreta exposición de tus creencias. Una joven de 13 años lo intentó y tuvo magníficos resultados. “Iba de camino a clase —declara— cuando varias estudiantes empezaron a burlarse de los testigos de Jehová. Me sentí impulsada a hablar francamente; pero ellas se alejaron y continuaron riéndose de mí, excepto una.” La Testigo relata: “Una muchacha de nombre Jaimee se dirigió a mí y me dijo que tenía el libro Usted puede vivir para siempre en el paraíso en la Tierra,a que lo había leído casi todo y que estaba interesada en saber más de nuestra fe. Entablé un estudio bíblico con ella”. Animada con la experiencia, la Testigo se puso a hablar con otros jóvenes. Ella añade: “Visito de manera regular a cuatro compañeras que han mostrado interés, y estoy segura de que empezarán a estudiar pronto”.
Hace años, un estudiante del país africano de Liberia tuvo una experiencia similar. En una clase de sociología expuso con respeto que, como testigo de Jehová, creía en la creación y no en la evolución. Al principio, muchos de sus compañeros fueron muy críticos; pero el profesor le permitió explicar su postura ante la clase, después de lo cual aceptó el libro La vida... ¿cómo se presentó aquí? ¿Por evolución, o por creación?b
Tras leerlo, el maestro dijo a la clase: “Este libro no tiene comparación. Es una de las mejores obras de ciencia que he leído jamás”. Luego manifestó que había decidido usarlo junto con el libro de texto durante los dos siguientes semestres, e indicó a los alumnos que pidieran ejemplares al Testigo. Se colocaron decenas de libros, y muchos estudiantes cambiaron su punto de vista sobre los testigos de Jehová.
Una fe probada es una fe sólida
Se entiende que a veces te sientas abrumado por la cantidad de personas que no comparten o no comprenden tu postura basada en la Biblia (compara con el Salmo 3:1, 2). Por eso, es sabio buscar la compañía de los que sí están de acuerdo con tus convicciones y creencias (Proverbios 27:17). Pero ¿y si no hay jóvenes de tu misma fe en la escuela o el vecindario?
Aun en ese caso, recuerda que tu mayor Amigo es Jehová Dios y que él te apoya. Jehová ha soportado la mayor parte de la mofa de Satanás el Diablo durante miles de años. Por consiguiente, puedes estar seguro de que regocijas Su corazón cuando demuestras una fe sólida, pues tal proceder le da la oportunidad de ‘responder a Satanás, que le está desafiando con escarnio’ (Proverbios 27:11).
Es natural que se pruebe tu fe de vez en cuando (2 Timoteo 3:12). A pesar de eso, el apóstol Pedro nos garantiza que la cualidad probada de nuestra fe es de “mucho más valor que el oro que perece a pesar de ser probado por fuego” (1 Pedro 1:7). Así pues, cuando te desprecien por tu fe, tómalo como una oportunidad para fortalecerla y para demostrar aguante. El apóstol Pablo escribió que el aguante lleva a “una condición aprobada” (Romanos 5:3-5). Sí, el deseo de ganar el favor de Jehová es un poderoso incentivo para enfrentarte a la burla a causa de tu fe.
[Notas]
a Editado por Watchtower Bible and Tract Society of New York, Inc.
b Editado por Watchtower Bible and Tract Society of New York, Inc.
[Ilustración de la página 13]
¿Puedes tú hacer una defensa de tu fe?