No se deje desviar en la carrera por la vida
“No de pan solamente debe vivir el hombre . . . Es a Jehová tu Dios que tienes que adorar, y es a él solo que tienes que rendir servicio sagrado.”—Luc. 4:4, 8.
1. ¿En qué carrera vital están participando los cristianos, y cuál es el premio para los que terminan con buen éxito?
Los cristianos están en una carrera muy extraordinaria. El ganar no depende tanto de la velocidad como del aguante y del adherirse a las reglas de la carrera. Y aunque quizás parezca raro, la carrera no la gana un solo vencedor, sino todos los que permanecen en la carrera hasta el fin. Es la carrera que recorre la pista, que en realidad es el camino estrecho al que se entra por una puerta angosta, a la vida eterna en el nuevo sistema de cosas de Dios. (Mat. 7:14) Todos los que terminan con buen éxito reciben el magnífico premio de la vida eterna, y vale la pena todo el entrenamiento persistente y los sacrificios que se necesitan a fin de ganar.
2. ¿Por qué no es fácil esta carrera, y cómo se deben considerar los obstáculos que hay por el camino?
2 Pero esta carrera no es fácil. No se completa en un solo día. Y hay un peligro siempre presente de ser desviado, de ser apartado del camino a la vida, que es un camino más difícil, y entrar en el ancho y espacioso camino que Jesús describió que conduce a la destrucción. (Mat. 7:13) En esta estrenua carrera por la vida, si a las debilidades de la carne en condición caída desde lo interior y a las presiones y atracciones del mundo desde lo exterior no se les considera continuamente como obstáculos que hay que vencer, llegarán a ser vallas desviadoras que aparten a uno de la carrera. Entre estas cosas principales que pueden desviar al cristiano, primero consideraremos el materialismo.
EL PUNTO DE VISTA APROPIADO ACERCA DE LAS POSESIONES MATERIALES
3. ¿Por qué es importante tener el punto de vista apropiado acerca de las posesiones materiales?
3 El hombre, hecho por Dios para vivir en la Tierra y disfrutar de sus munificencias, desea naturalmente las cosas buenas de la vida que su Creador ha provisto. Eso en sí no es incorrecto, pero ¿cómo puede uno disfrutar de las posesiones materiales que sea, si no tiene vida y cierta medida de salud? (Mat. 16:26) Dios es el Dador de la Vida, y tiene derecho a manifestar requisitos razonables que se tengan que satisfacer a fin de retener este don de la vida. Él es muy franco al decirle al hombre que los ingratos y los que simplemente buscan placeres no tendrán una herencia permanente en la Tierra. Serán cortados de la existencia. Además, el que uno sólo busque ventajas y comodidades materiales ahora, sin desarrollar valores espirituales y morales que estén arraigados profundamente en la adoración verdadera de Dios, resulta en una vida muy vacía y que frustra.
4. ¿Cómo ilustró Jesús el valor engañoso de las riquezas materiales?
4 Jesús enfocó apropiadamente las cosas cuando advirtió: “Mantengan abiertos los ojos y guárdense de toda suerte de codicia, porque aun cuando uno tenga en abundancia, su vida no resulta de las cosas que posee.” Entonces ilustró el punto con la parábola del rico que derribó sus graneros a fin de construir otros más grandes para sus cosechas, que aumentaban constantemente. Éste, pensando que el futuro era muy seguro para él ahora, se dijo a sí mismo: “Alma, tienes muchas cosas buenas almacenadas para muchos años; pásalo tranquila, come, bebe, goza.” Sin embargo, Jesús pasó a decir lo siguiente de este hombre que había cifrado su confianza en las posesiones materiales: “Pero Dios le dijo: ‘Irrazonable, esta noche exigen de ti tu alma. ¿Quién, pues, ha de tener las cosas que almacenaste?’” Remachando el clavo en conclusión, Jesús dijo: “Así pasa con el hombre que atesora para sí pero no es rico para con Dios.”—Luc. 12:15-21.
5. ¿Qué actitudes se pueden desarrollar fácilmente cuando uno busca egoístamente posesiones y comodidades materiales?
5 De modo que ¿cuál es el peligro aquí? Es el peligro de que uno llegue a estar tan envuelto en conseguir cosas para satisfacer sus deseos carnales. Así uno se olvida de que Dios creó la Tierra y al hombre sobre ella, y que por consiguiente uno realmente no puede ser feliz y cumplir el propósito que tiene la vida al cifrar su confianza en lo que puede recoger y acumular a su alrededor como seguridad material o comodidades para uno como criatura. Invariablemente la persona que hace eso se hace egocéntrica. El bienestar de su prójimo no es importante. Mientras trata de proteger sus posesiones de la codicia de otros, el resultado frecuente es violencia y muertes. La confianza en sí mismo conduce a depender solo de sí mismo. Dios realmente no cuenta, hasta se le descarta como el verdadero Proveedor. Y la promesa de vida eterna se convierte en solo un sueño apartado de la realidad. ¿Por qué procurar una cosa ilusoria, es lo que a menudo razona tal persona, cuando es posible tener comodidades materiales ahora? Así, una filosofía materialista puede desviar fácilmente a uno de la carrera a la vida eterna o impedir que uno siquiera la inicie.
6. (a) ¿Cómo podemos como cristianos imitar al que corre en una carrera al prepararnos para la carrera por obtener la vida y correrla? (b) ¿Cómo nos puso Jesús el ejemplo perfecto que podemos imitar?
6 En contraste, el corredor que triunfa no se entrega a excesos, sino que sigue una rutina estricta de ejercicio y dieta que lo mantiene en forma. En la carrera, se ha despojado de todo cuanto no es netamente esencial, y tiene mucho cuidado para no tropezar o descalificarse. (1 Cor. 9:24-27; 2 Tim. 2:5) Usando como base las experiencias de los corredores antiguos, Pablo dio este consejo a los cristianos: “Quitémonos nosotros también todo peso y el pecado [la falta de fe] que fácilmente nos enreda, y corramos con aguante la carrera que está puesta delante de nosotros, mirando atentamente al Agente Principal y Perfeccionador de nuestra fe, Jesús.” Sí, Jesús mismo tuvo que correr esta carrera y ejemplificó cómo se podría hacer con buen éxito. Aunque para él el concluir victoriosamente la carrera condujo a su muerte en un madero de tormento y a la vergüenza asociada con ello, después de eso Dios le dio el premio de la gloriosa vida inmortal en los cielos a Su diestra. En vista de tan excelente resultado, Pablo amonestó: “Sí, consideren con sumo cuidado y atención al que ha aguantado tal habla contraria de pecadores en contra de sus propios intereses, para que no vayan a cansarse y a desfallecer en sus almas.”—Heb. 12:1-3; 3:12, 13.
7. (a) ¿Qué principio manifestó Jesús que muestra que es imposible que uno divida sus lealtades? (b) ¿Cuál es la promesa de Jehová en cuanto a las cosas necesarias, lo cual nos permite poner qué en primer lugar?
7 En el Sermón del Monte Jesús expresó este principio: “Nadie puede servir como esclavo a dos amos; porque u odiará al uno y amará al otro, o se apegará al uno y despreciará al otro. No pueden ustedes servir como esclavos a Dios y a las Riquezas.” Entonces, después de haber dicho que Jehová atiende las necesidades de las creaciones, animales y vegetales, y que el hombre ‘vale más que ellos,’ declaró: “Por eso, nunca se inquieten y digan: ‘¿Qué hemos de comer?’ o ‘¿qué hemos de beber?’ o ‘¿qué hemos de ponernos?’ Porque todas éstas son las cosas en pos de las cuales las naciones van con empeño. Pues su Padre celestial sabe que ustedes necesitan todas estas cosas. Sigan, pues, buscando primero el reino y Su justicia, y todas estas otras cosas les serán añadidas.”—Mat. 6:24-33.
8. ¿Acerca de qué dos tesoros contrastantes escribió Pablo, y en qué resulta el procurar uno o el otro de éstos?
8 El apóstol Pablo advirtió: “Porque el amor al dinero es raíz de toda suerte de cosas perjudiciales, y haciendo esfuerzos por realizar este amor algunos han sido descarriados de la fe y se han acribillado con muchos dolores.” En vez de dejar que se les desvíe a este derrotero que precipita “a los hombres en destrucción y ruina,” Pablo animó a los cristianos a que “cifren su esperanza, no en las riquezas inseguras, sino en Dios, que nos proporciona todas las cosas ricamente para que disfrutemos de ellas; que trabajen en lo bueno, que sean ricos en obras excelentes, que sean liberales, listos para compartir, atesorando para sí mismos con seguridad un fundamento excelente para el futuro, para que logren asirse firmemente de la vida que lo es realmente.”—1 Tim. 6:9, 10, 17-19.
9. (a) En cuanto a obtener las cosas necesarias, ¿qué responsabilidad tiene el cristiano, y especialmente el cabeza de la casa? (b) ¿Cómo puede hacer el Diablo que las posesiones materiales desvíen a uno?
9 Nosotros, por supuesto, tenemos que conseguir nuestras necesidades de cada día, y debemos trabajar honrada y honorablemente por éstas al correr la carrera que tenemos ante nosotros. De hecho, el hombre que no suministrara las cosas necesarias de la vida para su familia sería descalificado de la carrera, pues habría así “repudiado la fe y [sería] peor que una persona sin fe.” (1 Tim. 5:8) Pero no podemos correr la carrera con buen éxito si permitimos que el atractivo que esté asociado con el trabajo que hagamos o el salario que ganemos en él se conviertan en las cosas importantes de la vida. El que tengamos un lugar en el cual vivir es una necesidad, pero el que compráramos una casa a un precio que estuviera más allá de nuestros recursos y permitiéramos que el amueblarla y el mantenerla ocuparan todo nuestro tiempo fácilmente podría hacer que nos saliéramos de la carrera por la vida. Lo mismo se pudiera decir en cuanto a un auto o un bote, un deseo excesivo de ropa nueva y a la moda, el efectuar viajes costosos por placer o el ocuparnos excesivamente en aficiones. Recuerde que el Diablo tiene muchos años de experiencia en saber cómo usar las posesiones materiales para apresar el corazón y alejar a los incautos de la carrera por obtener la vida.
10. ¿Qué preguntas se pudiera uno hacer para determinar lo aconsejable de obtener ciertas posesiones materiales?
10 Al mirar a la carrera que hay que correr, aprenda a preguntarse lo siguiente tocante a las cosas materiales: ¿Es esto algo que sea necesario para que yo siga viviendo y sirviendo a Jehová? ¿Me ayudará a ser mejor siervo de Jehová, o me hará aflojar el paso? ¿Qué obligaciones o pesos me impondrá esto? ¿Realmente necesito esto para suministrar a los de mi casa lo que necesitan? ¿Tendré que contraer una deuda para conseguirlo? ¿Acortará esto el tiempo que tengo para estudiar la Biblia, asistir a las reuniones cristianas y predicar el mensaje del Reino? ¿Va a desviarme esto de alguna manera de mi propósito en la vida?
11. ¿Por qué es inútil hacer de una carrera en este sistema de cosas la cosa importante de la vida?
11 Padres, entrenen a sus hijos a mantener enfocada la esperanza del Reino, para que eviten las tendencias materialistas. Hoy a los jóvenes se les anima a labrarse carreras para ellos mismos en este mundo materialista. Pero esto sería como el caso del joven que salió a buscar trabajo después de años de educación, y que solicitó empleo en lo que parecía ser una compañía en crecimiento y progresiva, mientras pasó por alto este letrero en la puerta: “LIQUIDACIÓN. EDIFICIO EXPROPIADO DEBIDO A NUEVO PROYECTO GUBERNAMENTAL.” Este viejo sistema, también, pronto será liquidado, aunque bulle con búsquedas materialistas. Para tener un verdadero futuro, debemos planear todo paso con relación al nuevo gobierno de Jehová para esta Tierra mediante su Rey Jesucristo.
12. Cuando ponemos en primer lugar el Reino y sus intereses, el efectuar ajustes personales pudiera permitirnos hacer ¿qué?
12 Debemos usar los recursos y habilidades que poseamos en adelantar los intereses del Reino, en vez de permitirles que sirvan de obstáculos en la carrera por la vida. Por ejemplo, si usted tiene una casa adicional, ¿pudiera venderla y usar el dinero para entrar en el servicio de precursor en vez de trabajar duro para mantener ambas casas? Si se ha jubilado o pronto se jubilará del trabajo seglar, ¿lo mueve su corazón a usar su mayor libertad para participar más plenamente en predicar el Reino? Aunque sus recursos sean limitados, ¿cómo se pueden usar de la mejor manera en servir a Jehová?
13. Si verdaderamente amamos la vida, ¿cómo consideraremos las posesiones materiales?
13 Lo que debemos procurar es hacer que las cosas materiales nos sirvan según se les necesite, y no el que lleguemos a estar esclavizados a ellas. Si verdaderamente apreciamos los valores espirituales y ponemos nuestra relación con Jehová sobre todo lo demás, él nos ayudará a seguir corriendo con aguante en la carrera y ganar el premio. El mundo con sus deseos de la carne y los deseos de los ojos y la exhibición ostentosa del medio de vida de uno “va pasando . . . pero el que hace la voluntad de Dios permanece para siempre.”—1 Juan 2:15-17.
MANTENIÉNDOSE LIBRE DEL NACIONALISMO
14. ¿Qué obstáculos que envuelven el nacionalismo arrostran los cristianos al correr la carrera por obtener la vida?
14 Otra valla que se erige para desviar a los cristianos de la carrera por obtener la vida envuelve el nacionalismo. Este obstáculo está siendo levantado a alturas cada vez mayores en todos los países mientras más profundamente penetramos en el tiempo del fin. Frecuentemente cuando uno se enfrenta a este obstáculo se hace que parezca que el derrotero sabio y práctico para uno es simplemente renunciar a la carrera y apartarse. El proceder así parecería hacer posible que uno evitara la crítica pública y los actos violentos que usan muchas veces funcionarios y chusmas que tratan de obligar a acatar leyes o actitudes no bíblicas. Por otra parte, la propaganda nacionalista tiene el propósito de incitar el orgullo nacional o racial. Se le da apariencia de causa atractiva en la cual envolverse. De hecho, en muchos países el nacionalismo se ha convertido en religión. Como resultado de esto, cada grupo nacional cree que su país y modo de vivir son los mejores y se hace intolerante para con otros.
15. ¿Qué actitud promueve el nacionalismo?
15 El autor Ivo Duchacek hizo esta observación en su libro Conflict and Cooperation Among Nations: “El nacionalismo divide a la humanidad en unidades mutuamente intolerantes. Como resultado, la gente piensa como norteamericanos, rusos, chinos, egipcios o peruanos primero, y como seres humanos en segundo lugar... si acaso.” El antiguo secretario-general de la O.N.U., U Thant, declaró: “Muchísimos de los problemas que arrostramos hoy día se deben a, o son el resultado de, actitudes falsas... algunas de ellas han sido adoptadas casi inconscientemente. Entre éstas está el concepto del nacionalismo estrecho... ‘mi país, tenga razón o no.’”
16. ¿Cómo se enfrentaron Sadrac, Mesac y Abednego a la cuestión del nacionalismo en Babilonia?
16 El nacionalismo no es nuevo. Comenzó en Babilonia con Nemrod, el primero que se estableció como rey en oposición a Jehová. Siglos después los hebreos en cautiverio en esta ciudad infame sintieron vivamente las crueles e irrazonables demandas del nacionalismo. Sadrac, Mesac y Abednego se hallaban entre los súbditos que reunió Nabucodonosor en la llanura de Dura y a quienes se les mandó que se inclinaran en adoración delante de la imagen estatal de la nación. Sin embargo, estos adoradores hebreos de Jehová el Dios verdadero rehusaron inclinarse, aun bajo la amenaza de ser arrojados vivos en el horno ardiente. Tuvieron el valor de decirle al rey enfurecido: “Oh Nabucodonosor, respecto a esto no estamos bajo necesidad de devolverte palabra. Si ha de ser, nuestro Dios a quien servimos puede rescatarnos. Del horno ardiente de fuego y de tu mano, oh rey, nos rescatará. Pero si no, séate sabido, oh rey, que no es a tus dioses que estamos sirviendo, y a la imagen de oro que has erigido ciertamente no la adoraremos.”—Dan. 3:16-18.
17-19. (a) ¿Qué preguntas similares sobre la neutralidad cristiana arrostramos hoy día? (b) ¿Cómo puso Jesús el ejemplo cuando Pilato lo estuvo examinando? (c) ¿En qué resultó para los judíos que rechazaron a Jesús el envolverse en el nacionalismo?
17 ¿Somos hoy día del mismo sentir de estos siervos fieles de Dios en el pasado? Cuando la ley nacional o la presión de comunidad parecen hacer imperativo el que nos inclinemos delante de emblemas nacionales o los saludemos en un acto de adoración, votemos por líderes políticos o apoyemos proyectos nacionalistas, ¿transigiremos y se nos descalificará y desviará de la carrera por la vida? ¿O, más bien, obraremos como lo hicieron Jesús y los cristianos primitivos?
18 Jesús puso el ejemplo perfecto cuando estuvo delante del gobernador romano Pilato para juicio. Los judíos alegaron mentirosamente que Jesús se había hecho rey terrestre. Si hubiera sido cierto, eso hubiera sido un acto de traición. Pero a la pregunta de Pilato, Jesús dijo: “Mi reino no es parte de este mundo. Si mi reino fuera parte de este mundo, mis servidores habrían peleado para que yo no fuera entregado a los judíos. Pero, como es el caso, mi reino no es de esta fuente.” Pilato estaba dispuesto a poner en libertad a Jesús con esta respuesta verídica como base, pero sus acusadores judíos contestaron: “Si pones en libertad a éste, no eres amigo de César. Todo el que se hace rey habla contra César.” Pilato les reconvino: “¿A su rey fijo en un madero?” Los principales sacerdotes contestaron: “No tenemos más rey que César.”—Juan 18:33-38; 19:12-16.
19 La historia registra las terribles consecuencias de haber escogido a “César” más bien que a Jesús como el Mesías, cuando Jerusalén fue destruida treinta y siete años después con gran pérdida de vida, yendo el resto de sus habitantes a la esclavitud entre las naciones. ¿Quién, en este caso, mantuvo neutralidad tocante a los asuntos de este mundo mientras mantuvo lealtad estricta al reino de Dios? ¡Jesucristo!
20. ¿Cómo se tentaba a los cristianos primitivos para desviarlos por medio del nacionalismo?
20 ¿Qué hicieron los cristianos primitivos? Daniel P. Mannix, en su libro Those About to Die, declaró: “Los cristianos rehusaban . . . hacer sacrificios al genio del emperador... más o menos lo que equivale hoy a rehusar saludar la bandera o repetir el juramento de lealtad. . . . Muy pocos de los cristianos se retractaban, aunque generalmente se mantenía un altar en la arena con un fuego ardiendo sobre él para la conveniencia de ellos. El prisionero solo tenía que esparcir una pizca de incienso en la llama y se le daba un Certificado de Sacrificio y se le ponía en libertad. También se le explicaba cuidadosamente que no estaba adorando al emperador, sino solo reconociendo el carácter divino del emperador como jefe del Estado romano. No obstante, casi ningún cristiano se aprovechaba de la oportunidad de escapar.”
21. ¿Por qué esperan persecución los cristianos por no envolverse en el nacionalismo?
21 Desde el primer siglo hasta hoy el nacionalismo ha hecho que se persiga con encono a los cristianos. Pero los que han amado a Dios y han mantenido la vista puesta en el premio que viene al fin de la carrera no han transigido. A ellos no les extraña el que tengan que enfrentarse a estos obstáculos, puesto que se predijo así. Jesús dijo a sus discípulos: “Guárdense de los hombres; porque los entregarán a los tribunales locales, y los azotarán en sus sinagogas. ¡Si hasta los llevarán ante gobernadores y reyes por mi causa, para un testimonio a ellos y a las naciones!” Aunque Dios permitiría esto como prueba para su pueblo y para que dieran un testimonio, Jesús añadió: “Y no se hagan temerosos de los que matan el cuerpo mas no pueden matar el alma; sino, más bien, teman al que puede destruir tanto el alma como el cuerpo en el Gehena.”—Mat. 10:16-18, 28.
22. ¿Por qué ahora, bien adentro en el “tiempo del fin,” se hace cada vez más difícil mantenerse libre del nacionalismo?
22 La Biblia advierte particularmente que, durante el “tiempo del fin,” la organización política del Diablo aplicaría un cierre económico contra el pueblo que teme a Dios por el hecho de que los que no se inclinaran bajo presión para adorar a este sistema bestial no podrían “comprar o vender salvo la persona que tenga la marca” de la bestia. (Rev. 13:17) Si en su país sucediera que se requiriera identificación con un partido político para poder obtener empleo u otras ventajas, ¿qué haría usted? Por supuesto, usted necesita empleo para atender a su familia. Bajo presión, ¿qué va a hacer? ¿En quién cifra su confianza en cuanto a las cosas necesarias de la vida? ¿Se llenará de pánico y se olvidará de que le ha orado a Dios: “Danos hoy nuestro pan para este día”? (Mat. 6:11) Jehová sabe que necesitamos alimento, ropa y abrigo, pero es importante recordar que el Adversario, Satanás el Diablo, hace surgir la cuestión de la integridad en todo aspecto de la vida. Como en el caso de Job, pudiera presentar tocante a cualquiera de nosotros la acusación de que nos volveremos contra Dios si se nos priva de algunas de nuestras necesidades materiales. Pero se da la advertencia de que en el rollo de la vida no está escrito el nombre de ninguno de los que adoran a este sistema bestial. (Rev. 13:8) Al mantener nuestra lealtad a Jehová durante tiempo de prueba, podemos estar seguros de que Él abrirá el camino y proveerá alivio.
23. (a) ¿Qué condiciones podrían hacer fácil el que los cristianos se envolvieran en causas no neutrales? (b) ¿Por qué no hay necesidad de que pensemos que debemos tomar en nuestras propias manos los asuntos cuando se cometen injusticias sociales contra nosotros?
23 A veces las barreras y prejuicios sociales, raciales y religiosos resultan en penalidad y opresión para muchos. A menudo hacen mucho más difícil la carrera del cristiano por la vida. Hay la tendencia a hablar claro, responder a un ataque con otro, tomar las cosas en las propias manos de uno, demandar justicia. Por ejemplo, un grupo minoritario pudiera ponerse en vigorosa acción para obtener más derechos. Pudiera organizar marchas de protesta para ejercer presión en el gobierno. Pudiera preparar boicoteos para poner bajo presión a los comerciantes. Los líderes entre el grupo pudieran hacer un llamamiento al orgullo de su gente, y por habla o por coerción pudieran buscar el apoyo del cristiano. ¿Qué hará usted si se ve ante esta situación o una situación similar? De nuevo se hace necesario mantener neutralidad y evitar envolverse en los asuntos de este mundo. Usted puede estar seguro de que Jehová saldará las cuentas por cualesquier males que se cometan. “No devuelvan mal por mal a nadie. Provean cosas excelentes a la vista de todos los hombres. Si es posible, en cuanto dependa de ustedes, sean pacíficos con todos los hombres. No se venguen ustedes mismos, amados, sino cédanle lugar a la ira; porque está escrito: ‘Mía es la venganza; yo pagaré, dice Jehová.’”—Rom. 12:17-19.
24. ¿Qué derrotero han emprendido algunos que alegan ser cristianos, pero qué no reconocen acerca de esto?
24 Por tanto, no deje que la propaganda o presión ejercida con el fin de hacer que usted transija en su neutralidad cristiana lo desvíen de la carrera por la vida. Lo criticarán a causa de esto, puesto que la tendencia en la cristiandad hoy es que tanto los parroquianos como sus ministros se envuelvan en causas sociales. Han dejado de esperar que el reino de Dios traiga los remedios verdaderos que se necesitan para los problemas sociales del hombre, y han tomado partido. Pero no reconocen que, sin importar del lado de quién se ponga una persona en este mundo, todavía está de parte del Diablo, si apoya activamente cualquiera de los programas y normas nacionalistas que propone este sistema de cosas.
25. ¿Por qué podemos poner nuestra confianza completa en Jehová al enfrentarnos en el futuro a cuestiones que tengan que ver con el materialismo y el nacionalismo?
25 Por consiguiente, que ni el materialismo ni el nacionalismo lo desvíen de su derrotero de cristiano. Ponga su confianza completa en Dios y en su reino por su Hijo, Cristo Jesús. “Que su modo de vivir sea exento del amor al dinero, estando contentos con las cosas presentes. Porque él ha dicho: ‘De ningún modo te dejaré y de ningún modo te desampararé.’ De modo que podemos tener buen ánimo y decir: ‘Jehová es mi ayudante; no tendré miedo. ¿Qué puede hacerme el hombre?’” (Heb. 13:5, 6) Pero hay otros obstáculos que pueden sacar al cristiano de la carrera por la vida eterna, y en estudios subsecuentes los abordaremos.