Tengan amor intenso los unos para los otros
“Tengan amor intenso los unos para los otros, porque el amor cubre una multitud de pecados.”—1 Ped. 4:8.
1, 2. ¿De qué manera confirma el escritor bíblico Juan la importancia de desplegar amor agape en nuestra vida?
EN SU primera carta a sus compañeros cristianos el apóstol Juan se refiere al amor de Dios al enviar a su Hijo para librar a la humanidad y muestra que los cristianos deben imitar esta expresión de amor. Esto no es asunto de opción, sino que realmente es una obligación que tenemos, de amarnos los unos a los otros. Él dice: “Amados, si Dios nos amó así a nosotros, entonces nosotros mismos estamos obligados a amarnos los unos a los otros.” (1 Juan 4:11) De modo que aquí Juan enfatiza la importancia del “nuevo” mandamiento de Jesús. (Juan 13:34, 35) Los cristianos deben ser dechados en mostrarse amor los unos a los otros. Jehová mismo ha puesto el ejemplo al mostrar amor que se basa en principios (agape) a sus hijos terrestres. De modo que, como hijos obedientes, y como siervos de Dios, debemos seguir ese ejemplo y mostrar amor, no solo a Jehová Dios, sino unos a otros.
2 Juan confirma nuevamente esta obligación y muestra la seriedad del asunto, en 1 Juan 4:20 y 21, donde escribe: “Si alguno hace la declaración: ‘Yo amo a Dios,’ y sin embargo está odiando a su hermano, es mentiroso. Porque el que no ama a su hermano, a quien ha visto, no puede estar amando a Dios, a quien no ha visto. Y este mandamiento lo tenemos de él, que el que ama a Dios esté amando también a su hermano.” De modo que es una cosa muy seria este asunto de mostrar amor agape, amor abnegado, a nuestro hermano o hermana cristiano, porque así mostramos que amamos a Jehová Dios mismo.
3. ¿Quién es nuestro hermano visible a quien hemos de amar?
3 ¿Quién es nuestro hermano visible a quien hemos de amar? Bueno, no podemos circunscribirlo a alguna persona de la misma raza, el mismo color o la misma nacionalidad, ¿verdad? Más bien, nuestro hermano es nuestro consiervo de Jehová en la congregación cristiana local, o en cualquier otra congregación de los testigos cristianos de Jehová por toda la Tierra. Es nuestro hermano en la fe. (Gál. 3:26-28) De modo que estamos obligados por el amor de Jehová a amar intensamente a nuestros hermanos cristianos, demostrando así que somos cristianos verdaderos.
4. ¿Qué recomienda Pablo en 2 Corintios 13:5, y por eso qué preguntas deberíamos considerar todos en esta ocasión?
4 Como organización hoy día, los testigos cristianos de Jehová se muestran ese amor unos a otros. No hay peleas entre los grupos nacionales; no hay prejuicio ni odio racial. Y así es como debe ser. La marca del cristianismo verdadero está definitivamente allí en la organización. Pero la cuestión es: ¿Cómo nos va como individuos en este asunto de mostrar amor a nuestros hermanos cristianos? ¿Estamos desplegando individualmente amor agape verdadero los unos para los otros? ¿Tenemos individualmente amor intenso los unos para los otros? Respecto a esto es bueno que cada uno se examine de acuerdo con la norma que se manifiesta en la Palabra de Jehová. Sí, como Pablo dijo: “Sigan poniéndose a prueba para ver si están en la fe, sigan dando prueba de lo que ustedes mismos son.”—2 Cor. 13:5.
5. (a) ¿Es opcional el amor como cualidad para los cristianos? (b) ¿Hasta dónde debe extenderse el amor del cristiano?
5 Hemos aprendido de las palabras de Jesús, y también de Juan, que el amor a nuestros hermanos es una cualidad cristiana necesaria. No es algo que pudiéramos llamar opcional; el amor no es algo que podamos practicar solo cuando sea conveniente. Más bien, el mandato de Jesús de que sus discípulos se amaran unos a otros realmente es una ley real, una ley que debe ejercer influencia en todas nuestras acciones. Tampoco podemos circunscribir nuestro amor a solo unos cuantos asociados allegados en la congregación, sino que, más bien, nuestro amor debe extenderse hasta abarcar a la entera asociación de hermanos en todas partes de la Tierra. Tal como Pedro escribió: “Ténganle amor a toda la asociación de hermanos.” (1 Ped. 2:17) ¡Qué importante es, entonces, que no circunscribamos nuestro amor, sino que hagamos esfuerzos por abarcar en él a la entera asociación de hermanos!
¿CÓMO SE ADQUIERE EL AMOR CRISTIANO A LOS HERMANOS?
6. ¿Cómo puede el cristiano comenzar a capacitarse para desplegar amor agape?
6 Puesto que el amor es tan importante en la vida del cristiano, ¿cómo, entonces, adquiere el cristiano ese amor? Hoy día en la congregación cristiana hay muchas personas que muy recientemente han empezado a adorar a Jehová, y es solo lo apropiado que quieran cumplir con una ley real, el ‘nuevo mandamiento’ que Jesús dictó para sus seguidores. Bueno, primero comprendemos que el amor agape en realidad es un fruto del espíritu de Dios, como lo indica Pablo en Gálatas 5:22. De modo que el cristiano tiene que buscar y seguir la guía del espíritu santo de Dios en unión con la organización que Jehová está usando hoy en la Tierra.
7. ¿Por qué es el conocimiento de la Palabra de Dios importante para el que va cultivando la cualidad del amor?
7 Además, el conocimiento de Jehová Dios y sus maravillosos atributos es importantísimo. Con relación a esto, el cristiano tiene que aprender exactamente qué es el amor y cómo obra para con su hermano y congénere. Este conocimiento, por supuesto, proviene de un estudio de la Palabra de Dios, en privado y en asociación con el pueblo de Dios en la Tierra hoy día. De modo que el cristiano tiene que desarrollar un aprecio profundo a todas las verdades que se hallan en la Palabra de Dios y llegar a ser un estudiante diligente de la Biblia. Como Pedro dijo, debemos desarrollar “el anhelo por la leche no adulterada que pertenece a la palabra.”—1 Ped. 2:2.
8. ¿Entra el corazón en el cuadro? ¿Por qué?
8 Luego, por supuesto, el corazón de uno entra en el cuadro, porque el amor es principalmente una cualidad del corazón. Es por eso que Pedro escribió: “Ámense unos a otros intensamente desde el corazón.” (1 Ped. 1:22) Teniendo uno conocimiento apropiado de lo que es el amor agape y cómo obra, puede guiar y dirigir el corazón de la manera correcta al mostrar amor, ante todo a Jehová, el Dios de amor, y entonces a los hermanos y el prójimo de uno. El que el cristiano haya desarrollado ese amor en su corazón hace posible que con el tiempo se dedique a Jehová, el Dios de amor, y luego cumpla esta dedicación cumpliendo con las leyes de Jehová y conduciendo su vida diaria en armonía con los principios de Dios que se hallan en su Palabra.—1 Juan 5:3.
9. (a) ¿Qué es más difícil a veces que el adquirir conocimiento de la Biblia o que el predicar? (b) ¿Cuánta importancia tiene el amor agape para el cristiano en lo que tiene que ver con sus relaciones con sus hermanos?
9 Pudiera haber cristianos que no encontraran muy difícil el llenar su mente de conocimiento de Jehová y sus leyes y requisitos, y pudieran disfrutar de salir y predicar a otros las buenas nuevas del reino de Dios. Sin embargo, a veces el vivir la verdad y aprender a ‘amarse unos a otros intensamente desde el corazón’ es más difícil para estos mismos individuos que solo adquirir conocimiento de los mandatos, leyes y principios, o predicar públicamente. Aquí es donde el cristiano tiene que aprender a amoldarse a principios que tienen que ver con sus actitudes, su conducta, su relación con cada persona de la congregación, y es aquí donde el amor agape es muy, muy importante. Esto significa que el cristiano tiene que aprender a vivir toda la verdad obedientemente desde el corazón.
10. ¿Qué advertencia da Juan acerca del amor, y por eso cómo debe dirigir apropiadamente su amor el cristiano?
10 Si amamos a nuestros hermanos, entonces tenemos que eliminar toda cosa que tendiera a dividirnos de alguno de ellos. Debemos tener cuidado para no empezar a amar las cosas que no deben ser amadas. Es por eso que Juan, por amor a sus hermanos cristianos, les advirtió que no estuvieran amando al mundo. Dijo: “No estén amando ni al mundo ni las cosas que están en el mundo. Si alguno ama al mundo, el amor del Padre no está en él; porque todo lo que hay en el mundo —el deseo de la carne y el deseo de los ojos y la exhibición ostentosa del medio de vida de uno— no se origina del Padre, sino que se origina del mundo.” (1 Juan 2:15, 16) De modo que si una persona fuese a comenzar a amar el mundo o las cosas que hay en el mundo, su amor estaría mal dirigido. Ese individuo estaría dividiéndose de sus hermanos que no son amadores del mundo o de cosas mundanas. Pronto no se le hallaría con sus hermanos en las reuniones de congregación ni en el servicio del campo cristiano, sino que estaría buscando asociaciones mundanas o intereses mundanos más bien que a sus hermanos cristianos. Entonces, ¡cuánto cuidado tenemos que ejercer para mantener nuestro amor dirigido hacia lo apropiado y buscar siempre la asociación de los que adoran a Jehová como nosotros lo hacemos!
11. (a) El verdadero amor agape para otros debe impedir que pensemos ¿de qué manera? (b) ¿Qué sufre los efectos de que no despleguemos amor verdadero a nuestros hermanos?
11 El verdadero amor que se basa en principios debe hacernos pensar en otros, no solo en nosotros mismos y en nuestros propios intereses con la insistencia en que tenemos derecho a hacer las cosas sin importar cómo puedan afectar a otros. De modo que debemos estar pensando en nuestra apariencia personal y nuestros intereses personales, a fin de que no perturbemos, en esos respectos, a nadie de la congregación ni le causemos tropiezo. (2 Cor. 6:3, 6) Debemos vigilar nuestra conducta, nuestra habla y nuestras asociaciones, teniendo presentes no solo nuestros propios deseos o intereses sino también los intereses de nuestros hermanos, pensando en cómo podría afectarlos lo que hiciéramos o dijéramos. (Fili. 2:4) Es bueno tener presente que si el amor agape no se está desarrollando apropiadamente en nosotros, entonces en realidad nuestra relación con Jehová sufre los efectos de ello. Recuerde las palabras de Juan: “Porque el que no ama a su hermano, a quien ha visto, no puede estar amando a Dios, a quien no ha visto.”—1 Juan 4:20.
EN IMITACIÓN DEL AMOR DE JEHOVÁ
12. ¿Qué ejemplo nos pone Jehová en este asunto del amor, y por lo tanto qué nos aconseja hacer Pedro?
12 También es bueno considerar que Jehová nos ama a todos, y todos somos imperfectos. De modo que Jehová no restringe su amor a solo unos cuantos individuos de la congregación, sino que por medio de su arreglo amoroso está dispuesto a perdonar nuestras equivocaciones y errores y a aceptar nuestro servicio amoroso. De modo que el intenso amor sincero a nuestros hermanos tiene como base la verdad y una genuina comprensión de lo que valen nuestros hermanos a los ojos de Jehová. Pedro aconsejó: “Ante todo, tengan amor intenso los unos para los otros, porque el amor cubre una multitud de pecados. Sean hospitalarios los unos para con los otros sin rezongar. En proporción al don que cada uno haya recibido, úsenlo al servirse los unos a los otros como excelentes mayordomos de la bondad inmerecida de Dios expresada de diversas maneras.” (1 Ped. 4:8-10) De modo que Jehová le da a cada uno un don para que lo use en el servicio divino y acepta nuestro servicio a pesar de nuestras imperfecciones, debilidades y faltas. Si amamos a nuestros hermanos como Jehová nos ama, entonces debemos poder mirar más allá de sus errores y equivocaciones y aprender a trabajar en estrecha cooperación con TODOS los de la congregación, cubriendo con el amor las equivocaciones de otros.
13. ¿Cómo pueden los ancianos mostrar amor a sus compañeros ancianos en la congregación?
13 Esto sería especialmente cierto en el caso de los ancianos oficiales de las congregaciones cristianas. Ciertos ancianos no deben pensar que son superiores a otros ancianos porque han estado en la organización de Dios más tiempo o porque han tenido el nombramiento de ancianos por un período de tiempo mucho más largo. Más bien, deben apreciar a sus compañeros ancianos y estimar su valor y dignidad humana a la vista de Dios y respetar sus opiniones y pensamientos, puesto que éstos tienen como base la Palabra de Dios. Jehová no hace ninguna distinción en lo que toca a cuánto tiempo haya estado sirviendo uno o cuánto tiempo haya sido anciano. Por eso los que hayan estado por más tiempo en el servicio de Jehová no deben tratar de imponer sus ideas u opiniones en otros ancianos, sino que deben aprender a trabajar con ellos en amor, mostrándoles el debido respeto por su “don” ministerial y el uso que den a éste como ancianos nombrados.
14. ¿Qué consejo da Pablo acerca de cooperar con los ancianos, y cómo pueden aplicarlo todos los de la congregación?
14 El mismo punto en realidad aplica a todos los que están en la congregación de Dios con relación a trabajar con los ancianos. Ninguno de los ancianos es perfecto, y por eso debemos ejercer cuidado para no engrandecer las faltas o imperfecciones humanas de un anciano y tender a considerar a la ligera su consejo o puntos de instrucción que se basan en la Palabra de Dios. No podemos hacer caso omiso del consejo solo porque cierto anciano despliegue algunas peculiaridades que no nos gusten. No, sino que tenemos que pasar por alto las faltas y las imperfecciones y, más bien, considerar el amor del anciano a Jehová y el celo que despliega por Su servicio, y aprender a respetar a todos los ancianos y cooperar con todos ellos en la congregación. Pablo enfatiza este punto en Hebreos 13:17, donde dice: “Sean obedientes a los que llevan la delantera entre ustedes y sean sumisos, porque ellos están velando por las almas de ustedes como los que rendirán cuenta; para que lo hagan con gozo y no con suspiros, por cuanto esto les sería gravemente dañoso a ustedes.” ¡Qué bueno es que los hermanos trabajen en estrecha cooperación con los ancianos y muestren amor sincero a ellos y a la excelente obra que llevan a cabo!
15. ¿Cómo aplicaría usted 1 Timoteo 1:5 a este asunto de amarse intensamente los unos a los otros desde el corazón?
15 Sí, el amor a todos nuestros hermanos debe provenir de un corazón limpio, y debe ser de todo corazón. Recuerde que Pablo le dijo a Timoteo: “Realmente el objetivo de este mandato es amor procedente de un corazón limpio y de una buena conciencia y de fe sin hipocresía.” (1 Tim. 1:5) Esto significa que la verdad limpia nuestro corazón, y si vemos que a nosotros mismos en algún respecto nos falta amor para nuestros hermanos, entonces debemos dejar que la verdad purifique nuestra vida por medio de un uso más frecuente de la Palabra de Dios. Un corazón limpio debe impelernos a tener una relación saludable, honrada y provechosa con todos los hermanos de la congregación. Entonces nuestra conciencia será una buena conciencia porque estará tranquila. Estaremos seguros de que estamos haciendo lo correcto. Otros observarán fácilmente nuestro amor, porque no será un despliegue hipócrita ni algo urdido solo para presentar cierta apariencia. El verdadero amor es una cualidad piadosa, una cualidad interior pura que es verdadera y que brota de un corazón bueno y limpio.
16. ¿De qué manera deben dar consejo los ancianos si verdaderamente aman a sus hermanos?
16 Los que son ancianos en una congregación pueden mostrar este amor sincero a sus hermanos al hablarles de manera que muestre consideración. En este caso la humildad ciertamente es esencial. Un anciano no debe estar lleno de orgullo y pensar que es mejor que los demás de la congregación. Cada persona de la congregación es propiedad valiosa, una de las “ovejas” de Jehová. (Juan 10:16) De modo que los ancianos, cuando hablan a otros y dan consejo, tienen que pensar en cómo sus palabras o acciones afectarán a otros. Su consejo debe darse de manera humilde y bondadosa. Gálatas, capítulo seis, versículo uno, muestra que un “espíritu de apacibilidad” es esencial cuando uno está tratando de ayudar espiritualmente a un hermano. Esta, pues, es la manera amorosa; uno sinceramente está tratando de ayudar a otro y no ensalzándose como superior a otros o más importante debido a un puesto.
TODOS MUESTRAN INTENSO AMOR “AGAPE”
17, 18. ¿Cómo podemos seguir el consejo de Pablo (a) de ‘amonestar a los desordenados,’ y (b) de ‘hablar confortadoramente a las almas abatidas’?
17 En 1 Tesalonicenses 5:14, el apóstol Pablo dio buen consejo sobre cómo TODOS nosotros en cada congregación podemos participar en un ensanchamiento que abarque atender las necesidades de nuestros hermanos, ensanchándonos así en nuestro amor de unos a otros: “Les exhortamos, hermanos, amonesten a los desordenados.” Él estaba hablando aquí, no solo a los ancianos de la congregación, sino a TODOS los de la congregación. En ocasiones quizás veamos en la congregación a alguien que posiblemente esté al borde de la mala conducta, y ésta sería una ocasión apropiada para seguir el consejo de Pablo de ‘amonestar a los desordenados.’ Esto no significa que reprenderíamos severamente a un hermano o quizás empezaríamos a chismear en cuanto a lo que está haciendo. No, más bien deberíamos tratar de ayudar amorosa y prudentemente a nuestro hermano de manera personal y ponerlo en la dirección correcta, animándolo a las obras correctas y a abandonar las obras incorrectas. Por supuesto, si vemos algo que es muy serio, entonces sería bueno considerar el asunto con uno de los ancianos que pueden dar consejo necesario al que es desordenado.
18 Pablo también escribió que debemos ‘hablar confortadoramente a las almas abatidas.’ (1 Tes. 5:14) En muchas congregaciones hay los que son de edad avanzada, quizás enfermizos, que pudieran sentirse abatidos debido a que no pueden llevar a cabo el servicio del campo como lo hicieron en otro tiempo. Quizás se sientan algo imposibilitados y limitados en lo que pueden hacer. Podemos ayudar espiritualmente a éstos en los casos en que se necesite y mostrarles cuánto aprecia toda la congregación el buen ejemplo que ponen al asistir a las reuniones y participar en el servicio, aunque sea de modo limitado, y animarlos de toda manera que podamos.
19. ¿Por qué pudiera un hermano ser débil en algunos respectos, y cómo podríamos ‘dar apoyo a los débiles’?
19 En este mismo texto Pablo también aconsejó que ‘demos nuestro apoyo a los débiles.’ Quizás usted haya observado a algunos que son débiles en la obra de predicar o en asistir a las reuniones. Usted pudiera hablar amorosamente con esos hermanos y tratar de animarlos y, en algunos casos, hacer arreglos prácticos para suministrarles ayuda. O pudiéramos hallarnos con el caso de alguien que se estuviera debilitando en la fe, quizás por estar teorizando sobre el porvenir. Hay quienes siempre están haciendo preguntas que no tienen respuestas bíblicas, y, cuando los ancianos u otros de la congregación no pueden contestar sus preguntas, empiezan a dudar del cumplimiento de las profecías o hasta a dudar de que Jehová esté usando a su organización hoy día. ¿Cómo podemos ayudar a estos débiles? Ciertamente podemos animarlos a reconocer el valor de la congregación, ¿no es verdad? ¡Vea cómo Jehová está usando a su organización hoy día para hacer que se prediquen las buenas nuevas! Esta es la obra que Jesús dijo que se tenía que efectuar, y ¿qué otra organización la está efectuando? (Mat. 24:14; 28:19, 20) Jesús también dijo que habría una clase del “esclavo fiel y discreto” que suministraría alimento espiritual al pueblo de Dios, y hoy los del pueblo de Jehová son las únicas personas bien alimentadas espiritualmente, debido a que están asociadas con este “esclavo.” (Mat. 24:45, 46) Por medio de éste hemos llegado a estar en asociación estrecha con Jehová, su Hijo y su pueblo en la Tierra. ¿Adónde podríamos dirigirnos si abandonáramos hoy la organización de Dios? ¡No hay ningún otro lugar! (Juan 6:66-69) Esta es la única organización que él está usando, y, si nosotros mismos estamos convencidos de esto, deberíamos poder ayudar a otros que son débiles en la fe.
20. ¿Qué quiso decir Pablo cuando dijo que ‘fuéramos sufridos para con todos’?
20 “Sean sufridos para con todos,” también escribió Pablo. (1 Tes. 5:14) De modo que nuestra bondad y nuestro amor fraternal deben abarcar a todos los de la congregación. Debemos estar dispuestos a pasar por alto las debilidades e imperfecciones de todos y ser sufridos para con todos, no solo para con algunos cuando vemos que es fácil. Tenemos que aprender a ser pacientes y no quejumbrosos, exigentes ni criticones para con otros. En armonía con 1 Tesalonicenses 5:15, queremos que “vean que nadie devuelva daño por daño a ningún otro, antes bien sigan siempre tras lo que es bueno los unos para con los otros y para con todos los demás.” En el 1 Tes. 5 versículo 13 del mismo capítulo, Pablo dijo: “Sean pacíficos los unos con los otros.” De modo que siempre debemos esforzarnos por estar en paz con nuestros hermanos.
21. ¿Cómo debe expresarse nuestro amor en las reuniones cristianas?
21 Nuestro amor a nuestros hermanos debe ser expresivo, no latente. Debe incluir el ser considerado con nuestros hermanos. Por ejemplo, cuando vamos a nuestras reuniones de congregación, es bueno no solo hablar a los que conocemos bien, sino también buscar a los nuevos y a los tímidos o retraídos e incluirlos en nuestros saludos y conversaciones. Así los animamos y los ayudamos a sentirse cómodos y disfrutar de la asociación con los hermanos. Tampoco quisiéramos pasar por alto a los niños. Nuestro amor debe dirigirnos a conversar con ellos también, y a encomiarlos por sus excelentes esfuerzos al servir a Jehová Dios. Debemos darles a saber lo mucho que apreciamos el buen ejemplo que ponen en el trabajo del campo y su buena conducta en la escuela y el hogar. Así amorosamente los estimulamos a continuar en el camino correcto de servir a Jehová Dios.
MOSTRANDO AMOR EN SENTIDO MATERIAL
22. (a) A veces nuestro amor quizás tuviera que expresarse ¿de qué maneras? ¿Y cómo puso Jesús el ejemplo correcto? (b) ¿Cuáles son algunas maneras por las cuales podríamos mostrar amor en sentido material?
22 A medida que seguimos adelantando dentro del “tiempo del fin” de este viejo sistema nos damos cuenta de que necesitamos acercarnos más los unos a los otros a todo tiempo en el vínculo del amor, mostrando intenso amor unos a otros. Pudieran surgir ocasiones en las cuales veamos a nuestros hermanos en necesidad de ayuda, ¡y qué bueno es que los conocemos bien y los amamos! A veces esto pudiera significar más que solo ayuda espiritual, porque pudiera haber una necesidad de ayuda material. Juan escribió acerca de esta necesidad en 1 Juan 3:17 y 18: “Pero cualquiera que tiene los medios de este mundo para el sostén de la vida y contempla a su hermano pasar necesidad y sin embargo le cierra la puerta de sus tiernas compasiones, ¿de qué manera permanece el amor de Dios en él? Hijitos, no amemos de palabra ni con la lengua, sino en hecho y verdad.” Si mostramos amor a nuestros hermanos con relación a lo material, de nuevo estamos copiando el buen ejemplo que Jesús puso. Recordamos que él a veces alimentó a multitudes tanto con alimento material como con alimentación espiritual para que pudieran volver a salvo a sus hogares y no desfallecieran en el camino. (Mat. 14:14-21; 15:32-38) Por eso a veces quizás podamos mostrar amor en sentido material también. Pudiera ser que nuestros hermanos y hermanas cristianos enfermaran. Entonces podemos mostrar amor intenso por medio de hacer cosas como llevarles alimento, ayudarles a limpiar la casa o hacerles mandados. Pudiera haber otros que necesitaran ayuda para asistir a las reuniones y posiblemente tengamos un auto disponible. Podríamos mostrar amor en sentido práctico llevándolos a las reuniones con nosotros. Sí, hay muchísimas maneras en las cuales se puede mostrar amor práctico ahora y en el futuro, por medio de suministrar la ayuda necesaria en sentido material.
23. ¿Qué pudiera requerirse de nosotros algún día si amamos intensamente a nuestros hermanos?
23 Hoy todos los siervos de Dios afrontan problemas, y todo indica que estos problemas aumentarán. De modo que es prudente que lleguemos a estar bien familiarizados con nuestros hermanos y siempre nos mostremos amor intenso unos a otros. Sabemos que estamos viviendo en los “últimos días” y Satanás lo sabe también. Dándose cuenta de que tiene poco tiempo, está causando muchos problemas a los pueblos de la Tierra. Quizás todos nosotros tengamos que enfrentarnos a situaciones en las cuales nuestra misma vida esté en peligro. Entonces quizás se exija que mostremos la clase de amor que Jesús mostró, hasta el punto de entregar nuestra vida por nuestros hermanos. El Anuario de los testigos de Jehová para 1974 suministra buenos ejemplos de cómo nuestros hermanos que vivieron en la Alemania nazi se ayudaron amorosamente unos a otros frente a terrible persecución. Verdaderamente tuvieron intenso amor los unos para los otros y su expresión de este amor fue tanto espiritual como material, pues se ayudaron mutuamente a continuar fieles en el servicio a Jehová y se protegieron unos a otros a toda costa. ¿Hará usted lo mismo? ¿Protegerá usted amorosamente a sus hermanos y nunca, nunca los traicionará? En el futuro cercano, nuestra mismísima vida quizás dependa de ese amor de unos a otros.
24. ¿Por qué no necesita el cristiano reglas detalladas que abarquen toda situación cuando se trata de expresar amor a sus hermanos?
24 Ahora mismo todos podemos edificarnos unos a otros con el espíritu del amor agape. No necesitamos reglas ni disposiciones reglamentarias que nos digan cuándo debemos amarnos unos a otros. Recuerde que el mandato de Jesús en cuanto a amar indicó que no debemos retraernos, sino tomar la iniciativa en mostrar amor a nuestros hermanos a todo tiempo. Si les tenemos amor intenso a nuestros hermanos, entonces nuestro corazón nos impelerá a suministrar toda ayuda posible siempre y dondequiera que se necesite. Por consiguiente, como cristianos verdaderos, seremos sobresalientes en mostrarnos amor unos a otros, y el mundo reconocerá la marca de identificación del amor.
25, 26. (a) ¿De qué manera obra el amor verdadero, según 1 Corintios 13:4-7? (b) ¿Por qué es tan importante amarnos los unos a los otros intensamente desde el corazón?
25 En 1 Corintios 13:4 al 7, Pablo suministra una excelente descripción de cómo debe obrar el amor cristiano verdadero. Dice: “El amor es sufrido y bondadoso. El amor no es celoso, no se vanagloria, no se hincha, no se porta indecentemente, no busca sus propios intereses, no se siente provocado. No lleva cuenta del daño. No se regocija por la injusticia, sino que se regocija con la verdad. Todas las cosas las soporta, todas las cree, todas las espera, todas las aguanta.” Y luego en el 1 Cor. 13 versículo 8 el apóstol agrega: “El amor nunca falla.” Ese amor no solo se requiere de los ancianos y los siervos ministeriales, sino de todos los cristianos que se llaman testigos de Jehová hoy día.
26 Sí, como Pablo dijo, “el amor nunca falla.” El cristiano nunca debe dejar de amar y no hay límite para el amor ni ley que pueda retardarlo. El amor verdadero se puede practicar a cualquier hora y en cualquier lugar. Pablo dijo, en Romanos 13:8, que el amor es la única deuda que los cristianos deben tener unos para con otros. Hoy se aproxima rápidamente el fin de este sistema. Por eso, ÉSTE, de entre todos los tiempos, es el tiempo en el cual tener “amor intenso los unos para los otros.” (1 Ped. 4:8) ¿No es cierto que, como siervos de Dios, esperamos vivir los unos con los otros para siempre? Eso significa que también debemos querer amarnos los unos a los otros para siempre. De modo que ahora es el tiempo en el cual fortalecer nuestros vínculos estrechos de cristianos y cultivar la habilidad de amarnos los unos a los otros intensamente desde el corazón, imitando así a nuestro Dios amoroso, Jehová.