¿Será usted fiel como Elías?
“Les envío a Elías el profeta antes de la venida del día de Jehová, grande e inspirador de temor.” (MALAQUÍAS 4:5.)
1. ¿Qué crisis tiene lugar cuando Israel ya lleva quinientos años en la Tierra Prometida?
“UNA tierra que mana leche y miel.” (Éxodo 3:7, 8.) Eso fue lo que Jehová Dios dio a los israelitas después de liberarlos de la esclavitud a Egipto en el siglo XVI a.E.C. Pero ¡mire! Han pasado cinco siglos, y ahora el reino de diez tribus de Israel está sufriendo un hambre severa. Es difícil hallar hierba verde. Los animales están muriendo y no ha llovido por tres años y medio. (1 Reyes 18:5; Lucas 4:25.) ¿A qué se debe esta calamidad?
2. ¿Cuál es la causa de la crisis nacional de Israel?
2 La apostasía ha provocado esta crisis. Desatendiendo la ley de Dios, el rey Acab se ha casado con la princesa cananea Jezabel y le ha permitido introducir la adoración de Baal en Israel. Peor aún, ha edificado un templo a este dios falso en Samaria, la capital, pues se ha persuadido a los israelitas a creer que la adoración de Baal les reportará abundantes cosechas. Sin embargo, como Jehová ha advertido, ahora están en peligro de ‘perecer de su buena tierra’. (Deuteronomio 7:3, 4; 11:16, 17; 1 Reyes 16:30-33.)
Una dramática prueba de divinidad
3. ¿Cómo dirige la atención el profeta Elías al verdadero problema de Israel?
3 Cuando empieza el hambre, Elías, el profeta fiel de Dios, le dice al rey Acab: “¡Tan ciertamente como que vive Jehová el Dios de Israel, delante de quien en efecto estoy de pie, no habrá durante estos años ni rocío ni lluvia, excepto por orden de mi palabra!”. (1 Reyes 17:1.) Al experimentar la terrible verdad de esta declaración, el rey culpa a Elías de acarrear extrañamiento a Israel. Pero Elías replica que los culpables son Acab y su casa por su adoración apóstata a Baal. Para zanjar esta cuestión, el profeta de Jehová insta al rey Acab a reunir a todo Israel en el monte Carmelo junto con los 450 profetas de Baal y 400 profetas del poste sagrado. Acab y sus súbditos se reúnen allí, quizá esperando que la ocasión ponga fin a la sequía. Pero Elías dirige la atención al asunto más importante. “¿Hasta cuándo —pregunta— irán cojeando sobre dos opiniones diferentes? Si Jehová es el Dios verdadero, vayan siguiéndolo; pero si Baal lo es, vayan siguiéndolo a él.” Los israelitas no saben qué decir. (1 Reyes 18:18-21.)
4. ¿Qué propone Elías para zanjar la cuestión sobre la identidad del Dios verdadero?
4 Por años, los israelitas han intentado fusionar la adoración de Jehová con la de Baal. A fin de zanjar la cuestión sobre la identidad del Dios verdadero, Elías ahora propone una prueba. Tanto él como los profetas de Baal deben preparar un toro joven para sacrificarlo. Elías entonces dice: “Ustedes tienen que invocar el nombre de su dios, y yo, por mi parte, invocaré el nombre de Jehová; y tiene que suceder que el Dios verdadero que responda por medio de fuego es el Dios verdadero”. (1 Reyes 18:23, 24.) ¡Imagínese fuego bajando del cielo en respuesta a una oración!
5. ¿Cómo se pone al descubierto la inutilidad de la adoración de Baal?
5 Elías invita a los profetas de Baal a que comiencen primero. Estos preparan un toro para el sacrificio y lo colocan sobre el altar. Luego cojean alrededor de este y piden en oración: “¡Oh Baal, respóndenos!”. Así estuvieron “desde la mañana hasta el mediodía”. “Llamen a voz en cuello”, se mofa Elías. Es posible que Baal tenga una urgente necesidad fisiológica o “quizás esté dormido y deba despertarse”. Pronto los profetas de Baal se ponen frenéticos. ¡Mire! Se están cortando con dagas y la sangre chorrea de las heridas. Y qué estruendo forman los 450 profetas gritando a voz en cuello. Pero no hay respuesta. (1 Reyes 18:26-29.)
6. ¿Qué preparación hace Elías para la prueba de Divinidad?
6 A continuación le llega el turno a Elías. Reconstruye el altar de Jehová, cava una zanja a su alrededor y prepara el sacrificio. Luego pide que se derrame agua sobre la leña y el sacrificio. Se vierten doce grandes jarras de agua sobre el altar hasta que se llena la zanja. Imagínese la expectación cuando Elías ora: “Oh Jehová, el Dios de Abrahán, Isaac e Israel, conózcase hoy que tú eres Dios en Israel y yo soy tu siervo y que por medio de tu palabra he hecho todas estas cosas. Respóndeme, oh Jehová, respóndeme, para que sepa este pueblo que tú, Jehová, eres el Dios verdadero y tú mismo has vuelto atrás el corazón de ellos”. (1 Reyes 18:30-37.)
7, 8. a) ¿Cómo contesta Jehová la oración de Elías? b) ¿Qué logran los sucesos del monte Carmelo?
7 En respuesta a la oración de Elías, ‘el fuego de Jehová cae del cielo y se come la ofrenda quemada, la leña, las piedras y el polvo, y lame el agua de la zanja’. El pueblo cae sobre su rostro y dice: “¡Jehová es el Dios verdadero! ¡Jehová es el Dios verdadero!”. (1 Reyes 18:38, 39.) Elías ahora toma medidas drásticas. Manda: “¡Prendan a los profetas de Baal! ¡No permitan que escape ni uno solo de ellos!”. Se les da muerte en el valle de Cisón, y al poco tiempo, negras nubes cubren el cielo. Finalmente, un aguacero termina con la sequía. (1 Reyes 18:40-45; compárese con Deuteronomio 13:1-5.)
8 ¡Qué gran día! Jehová triunfa en esta extraordinaria prueba de Divinidad. Además, estos sucesos logran que el corazón de muchos israelitas se vuelva a Dios. De esta y otras maneras, Elías demuestra ser un profeta fiel, y desempeña un papel de naturaleza profética.
¿Tiene que venir aún “Elías el profeta”?
9. ¿Qué se profetizó en Malaquías 4:5, 6?
9 Posteriormente, Dios predijo mediante Malaquías: “¡Miren! Les envío a Elías el profeta antes de la venida del día de Jehová, grande e inspirador de temor. Y él tendrá que volver el corazón de padres hacia hijos, y el corazón de hijos hacia padres; para que yo no venga y realmente hiera la tierra con un darla por entero a la destrucción”. (Malaquías 4:5, 6.) Elías vivió unos quinientos años antes de pronunciarse estas palabras. Puesto que constituían una profecía, los judíos del siglo primero de la era común esperaban la venida de Elías para que esta se cumpliera. (Mateo 17:10.)
10. ¿Quién fue el predicho Elías, y cómo lo sabemos?
10 ¿Quién fue, entonces, este Elías que tenía que venir? Su identidad se reveló cuando Jesucristo dijo: “Desde los días de Juan el Bautista hasta ahora el reino de los cielos es la meta hacia la cual se adelantan con ardor los hombres, y los que se adelantan con ardor se asen de él. Porque todos, los Profetas y la Ley, profetizaron hasta Juan; y si ustedes quieren aceptarlo: Él mismo es ‘Elías, que está destinado a venir’”. Sí, Juan el Bautista fue el predicho homólogo de Elías. (Mateo 11:12-14; Marcos 9:11-13.) Un ángel había dicho a Zacarías, el padre de Juan, que este tendría “el espíritu y poder de Elías” y que alistaría “para Jehová un pueblo preparado”. (Lucas 1:17.) El bautismo que efectuaba Juan constituía un símbolo público de que la persona se arrepentía de sus pecados contra la Ley, la cual debía conducir a los judíos a Cristo. (Lucas 3:3-6; Gálatas 3:24.) De modo que la obra de Juan ‘alistó para Jehová a un pueblo preparado’.
11. ¿Qué dijo Pedro en Pentecostés sobre el “día de Jehová”, y cuándo vino?
11 La obra de Juan el Bautista como “Elías” indicaba que se acercaba un “día de Jehová”. El apóstol Pedro también habló de la proximidad del día en el que Dios actuaría contra sus enemigos y salvaría a su pueblo. Señaló que los sucesos milagrosos que tuvieron lugar en Pentecostés del año 33 E.C. fueron un cumplimiento de la profecía de Joel sobre el derramamiento del espíritu de Dios. Pedro dijo que este suceso debía acontecer antes del “grande e ilustre día de Jehová”. (Hechos 2:16-21; Joel 2:28-32.) En el año 70 Jehová cumplió su Palabra al hacer que los ejércitos romanos ejecutaran Su sentencia contra la nación que había rechazado a su Hijo. (Daniel 9:24-27; Juan 19:15.)
12. a) ¿Qué dijeron Pablo y Pedro sobre el venidero “día de Jehová”? b) ¿Por qué debía suceder en el futuro algo representado por la obra de Elías?
12 Sin embargo, debía suceder algo más después del año 70. El apóstol Pablo relacionó la venida del “día de Jehová” con la presencia de Jesucristo. Además, el apóstol Pedro habló de ese día en relación con los “nuevos cielos y una nueva tierra”, todavía futuros. (2 Tesalonicenses 2:1, 2; 2 Pedro 3:10-13.) Debe tenerse presente que Juan el Bautista realizó una obra como la de Elías antes de que llegara “el día de Jehová” en el año 70. Todo ello, en conjunto, indicaba que aún debía acontecer en el futuro algo más representado por la obra de Elías. ¿Qué es?
Tienen el espíritu de Elías
13, 14. a) ¿Qué paralelo hay entre la actividad de Elías y la de los cristianos ungidos de la actualidad? b) ¿Qué han hecho los apóstatas de la cristiandad?
13 La obra de Elías no solo tuvo un paralelo en la labor de Juan el Bautista, sino también en la de los cristianos ungidos en este tiempo crítico y previo al venidero “día de Jehová”. (2 Timoteo 3:1-5.) Son leales defensores de la adoración verdadera que cuentan con el espíritu y el poder de Elías. ¡Y qué necesaria ha sido esta defensa! Después de la muerte de los apóstoles de Cristo, se produjo una apostasía del cristianismo verdadero, tal como la adoración de Baal floreció en Israel en tiempos de Elías. (2 Pedro 2:1.) Los que se llamaban cristianos empezaron a mezclar el cristianismo con doctrinas y prácticas religiosas falsas. Por ejemplo, adoptaron la enseñanza pagana y antibíblica de la inmortalidad del alma humana. (Eclesiastés 9:5, 10; Ezequiel 18:4.) Los apóstatas de la cristiandad han dejado de utilizar el nombre del único Dios verdadero, Jehová, y en su lugar, adoran a una Trinidad. También han adoptado la práctica baálica de inclinarse ante imágenes de Jesús y de su madre, María. (Romanos 1:23; 1 Juan 5:21.) Pero eso no ha sido todo.
14 A partir del siglo XIX, los líderes de las iglesias de la cristiandad empezaron a expresar sus dudas sobre muchas partes de la Biblia. Por ejemplo, rechazaron el relato del Génesis sobre la creación y se inclinaron ante la teoría de la evolución, llamándola “científica”, la cual está en conflicto directo con las enseñanzas de Jesucristo y sus apóstoles. (Mateo 19:4, 5; 1 Corintios 15:47.) No obstante, tal como hicieron Jesús y sus primeros seguidores, los cristianos de la actualidad ungidos por espíritu defienden el relato bíblico de la creación. (Génesis 1:27.)
15, 16. En contraste con la cristiandad, ¿quiénes han disfrutado de un suministro regular de alimento espiritual, y por qué medio?
15 Cuando el mundo entró en “el tiempo del fin”, la cristiandad fue presa de un hambre espiritual. (Daniel 12:4; Amós 8:11, 12.) Pero el pequeño grupo de cristianos ungidos disfrutó “al tiempo apropiado” de un suministro regular de alimento espiritual procedente de Dios, tal como Jehová alimentó a Elías durante el hambre de sus días. (Mateo 24:45; 1 Reyes 17:6, 13-16.) Conocidos en un tiempo como Estudiantes Internacionales de la Biblia, estos fieles siervos de Dios recibieron más tarde el nombre bíblico de testigos de Jehová. (Isaías 43:10.)
16 Elías vivió en conformidad con el significado de su nombre: “Mi Dios es Jehová”. La revista oficial de los siervos terrestres de Jehová, La Atalaya, ha usado constantemente el nombre de Dios. De hecho, el segundo número (agosto de 1879) expresó la confianza de que la revista contaba con el apoyo de Jehová. Esta revista y otras publicaciones de la Sociedad Watch Tower ponen al descubierto las enseñanzas antibíblicas de la cristiandad y el resto de Babilonia la Grande, el imperio mundial de religión falsa, y defienden la veracidad de la Palabra de Dios, la Biblia. (2 Timoteo 3:16, 17; Revelación [Apocalipsis] 18:1-5.)
Fieles bajo prueba
17, 18. ¿Cómo reaccionó Jezabel ante la matanza de los profetas de Baal, pero cómo se ayudó a Elías?
17 La reacción del clero fue similar a la de Jezabel cuando supo que Elías había dado muerte a los profetas de Baal. Mandó al fiel profeta de Jehová un mensaje en el que juraba que lo mataría. Esta no era una amenaza vana, pues Jezabel había asesinado ya a muchos de los profetas de Dios. Atemorizado, Elías huyó hacia el sudoeste, a Beer-seba. Allí dejó a su ayudante y se fue más lejos, al desierto, donde pidió a Dios morir. Pero Jehová no había abandonado al profeta. Un ángel se le apareció a fin de prepararlo para el largo viaje al monte Horeb. Así que recibió el sustento para este viaje de más de 300 kilómetros, que le tomaría cuarenta días. En Horeb, Dios le habló después de una impresionante manifestación de poder en un gran viento, un terremoto y un fuego. Jehová no estaba en estos fenómenos. Eran manifestaciones de su espíritu santo o fuerza activa. Luego Jehová habló a su profeta. Imagínese cómo fortaleció a Elías esta experiencia. (1 Reyes 19:1-12.) ¿Qué puede decirse si, como Elías, sentimos cierto miedo cuando nos amenazan los enemigos de la adoración verdadera? Su experiencia debe ayudarnos a comprender que Jehová no abandona a sus siervos. (1 Samuel 12:22.)
18 Dios dejó claro que Elías aún tenía trabajo que hacer como profeta. Además, aunque Elías creía que era el único adorador del Dios verdadero en Israel, Jehová le mostró que había otros 7.000 que no se habían inclinado ante Baal. Dios envió entonces a Elías de regreso para que cumpliera con su comisión. (1 Reyes 19:13-18.) Es posible que a nosotros también nos persigan los enemigos de la adoración verdadera, al igual que hostigaron a Elías. Quizá seamos objeto de intensa persecución, como predijo Jesús. (Juan 15:17-20.) Tal vez nos inquietemos en ocasiones. Sin embargo, podemos ser como Elías, que recibió la protección divina y perseveró fielmente en el servicio a Jehová.
19. ¿Qué experimentaron los cristianos ungidos durante la época de la primera guerra mundial?
19 Debido a la persecución intensa durante la primera guerra mundial, algunos cristianos ungidos sucumbieron al temor y dejaron de predicar. Se equivocaron al pensar que su trabajo en la Tierra había terminado. Pero Dios no los rechazó, sino que los sostuvo misericordiosamente, tal como alimentó a Elías. Los fieles ungidos aceptaron la corrección divina, como lo había hecho Elías, y se recobraron de la inactividad. Se les abrieron los ojos al grandioso privilegio de predicar el mensaje del Reino.
20. ¿Qué privilegio se da hoy a quienes son fieles como Elías?
20 En la profecía sobre su presencia, Jesús habló de la obra mundial que se realizaría antes del fin de este inicuo sistema de cosas. (Mateo 24:14.) Esta la están efectuando hoy los cristianos ungidos y sus millones de compañeros que esperan vivir en una Tierra paradisíaca. El privilegio de llevar a cabo la obra de predicar el Reino hasta su culminación se extiende solo a aquellos que son fieles como Elías.
Sea fiel como Elías
21, 22. a) ¿Qué obra encabezan los cristianos ungidos hoy? b) ¿Con qué ayuda se está efectuando la predicación, y por qué se necesita?
21 Con un celo comparable al de Elías, el pequeño resto de verdaderos cristianos ungidos ha cumplido con su responsabilidad de atender los intereses terrestres del Rey entronizado Jesucristo. (Mateo 24:47.) Y ya por más de sesenta años, Dios ha estado utilizando a estos ungidos para encabezar la obra de hacer discípulos de gente a la que ha dado la magnífica esperanza de vivir para siempre en una Tierra paradisíaca. (Mateo 28:19, 20.) Estos millones de personas pueden sentirse muy agradecidas de que los relativamente pocos ungidos que quedan estén atendiendo sus responsabilidades celosa y fielmente.
22 Esta obra de predicar el Reino la han realizado seres humanos imperfectos con la fuerza que Jehová da a aquellos que confían devotamente en él. “Elías era hombre de sentimientos semejantes a los nuestros”, dijo el discípulo Santiago cuando citó el ejemplo de oración que dio el profeta, a fin de mostrar la fuerza que tiene la oración del justo. (Santiago 5:16-18.) Elías no estuvo todo el tiempo profetizando o realizando milagros. Tenía los mismos sentimientos humanos y debilidades que nosotros, pero sirvió fielmente a Dios. Puesto que nosotros también contamos con la ayuda de Dios y su fortaleza, podemos ser fieles como Elías.
23. ¿Por qué tenemos buenas razones para ser fieles y optimistas?
23 Tenemos buenas razones para ser fieles y optimistas. Recuerde que Juan el Bautista llevó a cabo una obra parecida a la de Elías antes de que llegara el “día de Jehová”, en el año 70. Con el espíritu y poder de Elías, los cristianos ungidos han efectuado por mandato de Dios una obra similar por toda la Tierra. Esto prueba claramente que el gran “día de Jehová” está cerca.
¿Qué respondería usted?
◻ ¿Cómo se probó la Divinidad de Jehová en el monte Carmelo?
◻ ¿Quién era el ‘Elías que había de venir’, y qué hizo?
◻ ¿Cómo han demostrado que tienen el espíritu de Elías los cristianos ungidos de nuestros tiempos?
◻ ¿Por qué es posible que seamos fieles como Elías?
[Recuadro de la página 15]
¿A QUÉ CIELOS ASCENDIÓ ELÍAS?
“ACONTECIÓ que, mientras [Elías y Eliseo] iban andando, hablando al andar, pues, ¡mire!, un carro de guerra de fuego y caballos de fuego, y estos procedieron a hacer una separación entre los dos; y Elías fue ascendiendo a los cielos en la tempestad de viento.” (2 Reyes 2:11.)
¿Qué significado tiene la palabra “cielos” en este caso? El término se aplica a veces al lugar espiritual donde mora Dios junto con sus hijos angélicos. (Mateo 6:9; 18:10.) La voz “cielos” también puede referirse al universo físico. (Deuteronomio 4:19.) Y la Biblia utiliza este término con relación a la atmósfera inmediata de la Tierra, donde vuelan los pájaros y soplan los vientos. (Salmo 78:26; Mateo 6:26.)
¿A cuál de estos cielos ascendió el profeta Elías? Seguramente se le transfirió por la atmósfera terrestre a otro lugar del planeta. Elías aún estaba en la Tierra años más tarde, pues escribió una carta al rey Jehoram de Judá. (2 Crónicas 21:1, 12-15.) El que Elías no ascendió a la morada espiritual de Jehová Dios lo confirmó posteriormente Jesucristo, al decir: “Ningún hombre ha ascendido al cielo sino el que descendió del cielo, el Hijo del hombre”. (Juan 3:13.) El camino a la vida celestial se abrió por primera vez después de la muerte, resurrección y ascensión de Jesucristo. (Juan 14:2, 3; Hebreos 9:24; 10:19, 20.)