¿Qué es el Evangelio según Judas?
EN ABRIL del 2006, la prensa de todo el mundo divulgó la impactante noticia de que un equipo de investigadores había hecho público el contenido de un antiguo manuscrito descubierto en años recientes: el llamado Evangelio según Judas. De acuerdo con los informes, un buen número de expertos aseguraba que este texto cambiaría radicalmente nuestra opinión de Judas, el discípulo que traicionó a Jesús; finalmente entenderíamos que Judas fue en realidad un héroe, el apóstol que mejor conocía a su Maestro y que actuó por instrucciones suyas al entregarlo a sus ejecutores.
¿Es auténtico el documento? Si lo es, ¿revela información desconocida sobre Judas Iscariote, Jesucristo o los primeros cristianos? ¿Debería influir en nuestra manera de entender el cristianismo?
SE DESCUBRE EL EVANGELIO SEGÚN JUDAS
No se sabe a ciencia cierta cómo se descubrió el Evangelio según Judas. No se trató de un típico hallazgo arqueológico, sino que el manuscrito apareció de repente en el mercado de antigüedades a finales de los años setenta o principios de los ochenta. Parece que alguien lo encontró en 1978 en Egipto, en una antigua tumba dentro de una cueva. Era uno de cuatro textos independientes que formaban un códice (una especie de libro) escrito en copto, idioma derivado del egipcio antiguo.
Al sacarlo del clima seco donde se había conservado por siglos, el frágil códice encuadernado en cuero comenzó a deteriorarse con gran rapidez. En 1983, tres especialistas lo vieron brevemente, pero el precio de venta era tan elevado que no pudieron comprarlo. Pasaron los años, y el documento siguió deteriorándose debido al abandono y al almacenamiento inadecuado. En el año 2000 lo compró una comerciante de antigüedades suiza, quien lo entregó tiempo después a un equipo internacional de estudiosos. El grupo trabajaba con el apoyo de la Fundación Mecenas de Arte Antiguo y la Sociedad National Geographic y tenía la complejísima misión de restaurar y reconstruir el códice, parte del cual estaba muy fragmentado. Además, tenía que determinar su edad, así como traducir e interpretar el contenido.
La datación por carbono 14 confirmó que el manuscrito era del siglo III o IV de nuestra era. Sin embargo, los estudiosos concluyeron que el texto copto del Evangelio según Judas era la traducción de un texto griego aún más antiguo. ¿En qué período se escribió el original, y en qué contexto histórico?
EL EVANGELIO SEGÚN JUDAS: UN EVANGELIO GNÓSTICO
La primera mención que se hace del llamado Evangelio según Judas la encontramos en los escritos de Ireneo, obispo de Lyon, que vivió a finales del siglo II. En su obra Contra las herejías, Ireneo habla de uno de los muchos grupos que él combatía: “Dicen que Judas, el traidor, conoció exactamente todo esto, y, como ha sido él el único, entre los discípulos, en poseer el ‘conocimiento de la verdad’, ha realizado el ‘misterio de la traición’, por eso por medio de él han sido destruidas todas las cosas tanto las terrestres como las celestes. Exhiben, en este sentido, un escrito de su invención, al que llaman El Evangelio de Judas”.
“No es un evangelio escrito en la época de Judas por alguien que lo conociera”
Ireneo combatía con particular fuerza las diversas doctrinas de los cristianos gnósticos, quienes aseguraban poseer un conocimiento interior revelado. La palabra gnosticismo se refiere a un conjunto de grupos que interpretaban, cada uno a su manera, la “verdad” cristiana. Los gnósticos promovían sus interpretaciones basándose en los escritos de otros grupos gnósticos, escritos que abundaban durante el siglo II.
A menudo, los evangelios gnósticos (como se llamaba a algunos de los escritos de dichos grupos) afirmaban que los apóstoles más prominentes malinterpretaron el mensaje de Jesús y que Jesús dio a conocer una doctrina secreta que solo fue entendida por unos cuantos elegidosa. Algunos gnósticos pensaban que el mundo material era una prisión creada por el “dios creador” mencionado en el Antiguo Testamento, el cual era inferior y estaba en oposición a los dioses mayores en los que ellos creían. Quien poseía el conocimiento verdadero podía entender este secreto y buscar escape de su cuerpo material.
Este razonamiento se puede percibir en el Evangelio según Judas, el cual comienza con estas palabras: “El relato secreto de la revelación que Jesús habló en la conversación con Judas Iscariote durante una semana tres días antes de que celebrara la Pascua”.
¿Es este códice el mismo del que habló Ireneo y que estuvo perdido por siglos? Marvin Meyer, miembro del equipo original que examinó y tradujo el manuscrito, comenta que “la breve descripción de Ireneo encaja bastante bien con el texto copto que tenemos en nuestras manos y que se titula Evangelio según Judas”.
¿CÓMO PINTA EL EVANGELIO A JUDAS? UN DEBATE ENTRE EXPERTOS
El Evangelio según Judas dice que Jesús se ríe al ver la falta de conocimiento de sus discípulos. Como Judas es el único de los doce que demuestra verdadera comprensión de la naturaleza de Jesús, este le da a conocer en privado “los misterios del reino”.
El equipo que realizó la primera traducción del manuscrito estaba muy influenciado por los comentarios que Ireneo hizo sobre el evangelio. Según la traducción, Jesús ve a Judas como el discípulo que comprendería los misterios y alcanzaría el “reino”. Los otros apóstoles nombrarían un reemplazo para Judas, pero él se convertiría en el “decimotercer espíritu”. Jesús le dijo: “Tú sobrepasarás a todos ellos. Pues tú sacrificarás al hombre que me reviste”.
Reconocidos estudiosos del cristianismo primitivo y el gnosticismo, como Bart Ehrman y Elaine Pagels, que además son escritores de gran éxito, se apresuraron a publicar sus propios análisis y comentarios sobre el Evangelio según Judas, los cuales concordaban prácticamente en todo con la traducción del equipo original. No obstante, poco después, otros expertos, como April DeConick y Birger Pearson, expresaron su preocupación. Según ellos, la Sociedad National Geographic se precipitó al hacer público el antiguo texto en su afán por tener la primicia informativa. Por otro lado, el acuerdo de confidencialidad que tuvo que firmar el equipo los obligó a pasar por alto el proceso académico normal, que exige un análisis detallado y una revisión preliminar por parte de expertos independientes.
Ninguno de los expertos que han analizado el documento cree que contenga información histórica fidedigna
DeConick y Pearson evaluaron el texto cada uno por su cuenta y ambos llegaron a la conclusión de que algunas de las secciones clave del códice se habían traducido mal. En la traducción de DeConick, Jesús llama a Judas el “decimotercer demonio”, no el “decimotercer espíritu”.b También le declara tajantemente que no ascenderá al “reino”. Y lejos de decirle que sobrepasará a los demás discípulos, le asegura: “Tú harás algo peor que ellos, pues al hombre que me reviste tú lo sacrificarás”. En opinión de DeConick, el Evangelio según Judas es una parodia que los gnósticos elaboraron para burlarse de todos los apóstoles. La conclusión definitiva a la que llegaron DeConick y Pearson es que el manuscrito no pinta a Judas como un héroe.
¿QUÉ APRENDEMOS DEL EVANGELIO SEGÚN JUDAS?
Sea que consideren a Judas un héroe o un demonio, ninguno de los expertos que han analizado el documento cree que contenga información histórica fidedigna. Bart Ehrman explica: “No se trata de un evangelio escrito por Judas; ni siquiera afirma serlo. [...] No es un evangelio escrito en la época de Judas por alguien que lo conociera [...]. Por lo tanto, no se trata de un libro que suministre información adicional sobre lo que sucedió durante la vida de Jesús”.
El Evangelio según Judas es un texto gnóstico, al parecer del siglo II, escrito originalmente en griego. Si es o no igual al que se refiere Ireneo sigue siendo cuestión de debate entre los expertos. Lo que sí sabemos es que el Evangelio según Judas ofrece pruebas claras de que hubo una época en la que surgieron cristianos falsos que introdujeron sus propias doctrinas y formaron sectas rivales. Lejos de restarle autoridad a la Biblia, confirma lo atinadas que fueron las advertencias de los apóstoles, como la que hizo Pablo según Hechos 20:29, 30: “Yo sé que después de mi partida [...] de entre ustedes mismos se levantarán varones y hablarán cosas aviesas para arrastrar a los discípulos tras de sí”.
a A estos evangelios suele dárseles el nombre de quienes supuestamente comprendieron mejor las enseñanzas de Jesús. Están, por ejemplo, el Evangelio según Tomás y el Evangelio según María Magdalena. En total se conocen unos treinta de estos evangelios.
b Los especialistas que piensan que este texto pinta a Judas como un demonio —uno que comprendía la identidad de Jesús mejor que los otros discípulos— destacan que esta misma idea se puede ver en los Evangelios bíblicos, donde se señala que los demonios proclamaron la identidad de Jesús (Marcos 3:11; 5:7).