Evite las tendencias rebeldes
“Yo he llamado pero ustedes siguen rehusando,... y ustedes siguen descuidando todo mi consejo, y mi reprensión no la han aceptado.”—Pro. 1:24, 25.
1, 2. ¿Cuál fué la primera clase de pecado? ¿Qué puede ser responsable por ello, y cómo culmina?
LA REBELIÓN fue el primer acto de pecado, en el cielo y en la tierra. Resultó en juicio adverso para los que procedieron de manera rebelde. Ahora, debido a que el primer rebelde está presentando su última resistencia contra Jehová y Sus siervos leales, usando medios diversos y sutiles, es necesario que todos escudriñen cuidadosamente los pensamientos, motivos, comportamiento y toda forma de proceder, para estar alerta y vigilantes.
2 Al estar alerta y vigilar nuestros pensamientos, debemos reconocer que el juicio o las conclusiones a que llega el hombre son correctos sólo cuando están en consonancia con los de Jehová según se manifiestan por medio de su Palabra. Cuando se encuentran en desacuerdo de alguna manera, eso revela que existe cierta tendencia a dejarse guiar por los pensamientos de las criaturas. Esta es una forma de rebelión. Tal vez sólo sea leve al principio, pero cuando es manchada continuamente por los pensamientos y decisiones descarriados de los hombres, puede resultar en la condición mencionada por Santiago: “Pero cada uno es probado por medio de ser atraído e inducido por su propio deseo. Luego el deseo, cuando se ha hecho fértil, da a luz el pecado; en seguida, el pecado, cuando se ha realizado, produce la muerte.”—Sant. 1:14, 15.
3. ¿Qué determina el comportamiento de la gente, y cómo puede cambiarse éste?
3 Cuando observamos las acciones de los que pertenecen al viejo mundo vemos que sus pensamientos y comportamiento están modelados de acuerdo con el “dios de este mundo,” el rebelde original que llegó a ser Satanás. Así como los rasgos y características de los padres influyen en los rasgos y características de los hijos, así han influído en todo el género humano los padres originales rebeldes y su proceder pecaminoso en el jardín de Edén, y el pecado de la rebelión es fuerte en los hombres hoy día. Entonces, es necesario que todos se dirijan a la provisión paternal hecha por Jehová Dios para el hombre, a saber, su Hijo Jesucristo. (Juan 3:16) Esto no significa que al hacerlo las personas reciban un nuevo nacimiento físico; más bien esta aceptación del Hijo es por medio de rehacer la mente y obtener una “nueva personalidad, la cual por medio de conocimiento acertado está siendo renovada de acuerdo con la imagen del que la creó.”—Col. 3:10.
4, 5. (a) ¿Sobre qué se basó el ejemplo perfecto de Jesús? (b) ¿Por qué es tan importante la sujeción completa a la voluntad del Padre?
4 Cristo Jesús procedió de manera perfecta, estando él enteramente libre de cualesquier rasgos rebeldes, siendo, por lo tanto, el modelo perfecto. Él no hizo decisiones por su propia cuenta. “No puedo hacer ni una sola cosa de mi propia iniciativa; así como oigo, juzgo, y el juicio que yo dicto es justo, porque yo busco, no mi propia voluntad, sino la voluntad de aquel que me envió.” “He descendido del cielo, no para hacer mi voluntad, sino la voluntad de aquel que me envió.” “Yo siempre hago las cosas que le agradan.” Aquí tenemos un ejemplo hermoso de devoción completa y exclusiva al Padre—un ejemplo completamente libre de tendencias rebeldes. Verdaderamente ésta es una demostración incomparable de sujeción completa. Así como él siguió explícitamente a su Padre, invitó a otros a seguirlo: “Si observan mis mandamientos, permanecerán en mi amor, así como yo he observado los mandamientos del Padre y permanezco en su amor.” Esta declaración, naturalmente, fué dirigida a los que habían salido del mundo y se habían puesto de parte del Señor; como él mismo testificó: “Ellos no son parte del mundo así como yo no soy parte del mundo.”—Juan 5:30; 6:38; 8:29; 15:10; 17:16.
5 Sus propias palabras hacen patente que acuerdo completo con él y con su Padre es obligatorio a fin de ser reconocidos como hijos. Por lo tanto la desviación es desagradable, pues constituye una rebelión en contra de lo que es correcto. Por lo tanto, hay que vigilar cuidadosamente las decisiones que gobiernan las acciones y los hechos y los motivos para evitar la rebelión.
6. ¿Qué resulta cuando una criatura se toma libertades personales con la Palabra de Jehová?
6 El Padre estableció instrucciones justas; y puesto que son perfectas y exigentes, ni ángeles ni hombres pueden tomarse libertades. Una prominente criatura celestial tomó personalmente un derrotero de traición o insubordinación en el jardín de Edén y luego indujo a otros a seguirlo. Los que son de naturaleza rebelde casi siempre tratan de hacer que otros sean de un ánimo semejante al de ellos, y así buscan seguidores para su propio proceder rebelde. El proceder del rebelde en este respecto resultó en su expulsión. Expulsión o excomunión les resultó más tarde a los “ángeles que no guardaron su posición original,” sino que se apoyaron en su propio entendimiento. La primera pareja humana, Adán y Eva, fué desterrada del hogar paradisíaco y lugar de habitación que Jehová le había dado, debido a su deseo egoísta y codicioso, por escoger escuchar a la Serpiente y mediante ello renunciar a la palabra verdadera de Dios. Puesto que Jehová ‘no cambia,’ sin duda Adán y Eva estaban bien enterados de tal consejo de Jehová como éste: “Confía en Jehová con todo tu corazón y no te apoyes en tu propio entendimiento. En todos tus caminos tómalo en cuenta y él mismo enderezará tus sendas,” como fué registrado algún tiempo después en Proverbios 3:5, 6.—Judas 6.
7. Aunque resultó pecado para ambos, ¿cuál fué la diferencia entre el pecado de Eva y la violación de Adán?
7 El proceder de rebelión de Eva resultó por motivo de engaño, como nos enteramos del relato del Génesis: “En consecuencia la mujer vió que el fruto del árbol era bueno para alimento y que era una delicia a los ojos, sí, el árbol era deseable para contemplarlo. De modo que ella comenzó a tomar de su fruto y comerlo. Después también dió algo de él a su marido cuando él estuvo con ella y él comenzó a comerlo.” El proceder de rebelión de Adán fué deliberado y sin remordimiento, y trajo consigo el juicio adverso de Jehová contra él y también contra su esposa.—Gén. 3:6, 17-19.
ABANDONANDO A JEHOVÁ
8, 9. ¿Qué error de rebeldía cometieron los israelitas?
8 Aunque tuvieron este registro histórico de lo que sucedió primero en el jardín de Edén y subsecuentemente al tiempo del Diluvio, así como el despliegue del poder de Jehová a favor de los israelitas cuando los libró de la mano opresora de los egipcios, los israelitas eligieron un derrotero de confianza en ellos mismos, abandonando la posición favorecida que Jehová les había dado entre las naciones. Además de tener la palabra escrita de Dios para dirigirlos, tenían testimonio directo de sus antepasados en cuanto al despliegue notable de la fuerza y amor de Jehová expresados a favor de ellos. Jehová hizo aun más que esto proveyendo resguardos para su pueblo cuando le dió una ley por medio de Moisés. No sólo les dió los Diez Mandamientos, por la escritura directa de su propio dedo, sino que también se les dieron muchas otras leyes que tenían que ver con asuntos menores para proteger su comportamiento y toda acción.
9 Cuando entraron en la tierra que Jehová les dió él les advirtió especialmente acerca de la adoración de ídolos, cosa que practicaban los paganos residentes. Se dió el mandato de derribar todos los lugares de adoración a Baal para que no fueran entrampados. El no llevar a cabo esto era desobediencia directa. Donde se aflojó la estricta adherencia a la Palabra de Jehová, muchos israelitas dirigieron su atención a esta adoración falsa que se les mandó destruir, y por eso su rebelión resultó en que cayeran cautivos de la adoración falsa. Una vez se hizo necesario que Joás desafiara el poder del dios falso Baal al decir a los israelitas: “¿Serán ustedes los que hagan una defensa legal por Baal para ver si ustedes mismos pueden salvarlo? A cualquiera que le haga una defensa legal se le debería dar muerte.” (Jue. 6:31) El hecho de que él haya presentado este desafío muestra que algunos seguían esta práctica idólatra y se esforzaban por apoyar y defender esta religión extranjera, en desafío al mandato de Jehová de destruir todo vestigio de ella.
10. ¿Cuál era la posición de los israelitas a los ojos de Jehová cuando eran obedientes en contraste con cuando eran rebeldes?
10 Además, se les aconsejó a los israelitas que no levantaran para ellos mismos una imagen tallada de piedra o de madera en su tierra y se postraran ante ella, ya que esto sería practicar una adoración semejante a la de las naciones paganas que se hallaban a su alrededor. Note cuán apropiada es la instrucción que se da en el capítulo veintiséis de Levítico: “Si continúan andando en mis estatutos y guardando mis mandamientos y verdaderamente los llevan a cabo, entonces ciertamente les daré chubascos de lluvia a su debido tiempo y la tierra verdaderamente dará su producto y el árbol del campo dará su fruto. Y su trillar ciertamente llegará hasta su vendimia.” (Lev. 26:3-5) En este mismo capítulo Jehová sigue y muestra que él proveerá para todas las necesidades de ellos y hasta ayudará y estará con ellos a medida que desalojen a los extranjeros de la tierra. Sin embargo, en los versículos 14-16 se manifiesta una advertencia en cuanto a los castigos que les serían impuestos por no obedecer: “Si no me escuchan ni observan todos estos mandamientos, y si ustedes rechazan mis estatutos. . . al grado de que violen mi pacto, entonces yo de mi parte haré lo siguiente a ustedes y en castigo ciertamente traeré sobre ustedes terror repentino.” Este lenguaje era muy claro; no obstante, hallamos que los israelitas hicieron caso omiso de estos decretos. Este fué un proceder de rebelión. En realidad pudo haber comenzado como algo pequeño, pero, cuando se persistió en tal proceder, resultó en desobediencia completa y acarreó la desaprobación de Jehová. De esto tenemos que aprender a obedecer, a no rebelarnos.
11. (a) ¿Qué castigo se imponía a los violadores? (b) ¿Qué era obligatorio para los que se hallaban en autoridad?
11 La rebelión en contra de los acuerdos de pacto por parte de algún hombre o mujer de Israel exigía definitivamente que se tomara acción disciplinaria. Se dió instrucción a aquellos de la nación que ocupaban puestos responsables para que se encargaran de que los violadores fueran quitados y apedreados, porque eran dignos de muerte (expulsados) como resultado de profanar la Palabra de Dios. En realidad, si aquellos a quienes se les confiaba la responsabilidad de mantener las actividades de la nación limpias y libres de rebelión no lo hicieran, recibirían el juicio adverso de Jehová también; pues esto mostraba que confiaban en las propias ideas de ellos, y resultaba en que no se cumpliera con los requisitos de Dios. Ellos tenían la mayor responsabilidad. Esto se ilustra en Deuteronomio 17:2-7: “En caso de que se halle en medio de ti en una de tus ciudades que Jehová tu Dios te está dando un hombre o una mujer que practique lo que es malo a los ojos de Jehová tu Dios de modo que traspase su pacto, y vaya y adore otros dioses y se postre ante ellos o ante el sol o la luna o todo el ejército de los cielos, cosa que yo no he mandado, y se te ha dicho y tú lo has oído y has escudriñado cabalmente y, ¡mira! la cosa queda establecida como la verdad, ¡esta cosa detestable se ha hecho en Israel! entonces debes sacar a ese hombre o a esa mujer que ha hecho esta cosa mala hasta tus puertas, sí, al hombre o a la mujer, y debes lapidar a tal persona con piedras y tal persona debe morir. . .. y debes extirpar de en medio de ti lo que es malo.” Les era obligatorio a los hombres responsables ver que actos rebeldes de toda clase por parte de los que habían abandonado a Jehová fuesen quitados. Era evidente que Jehová detestaba la rebelión y exigía que su pueblo se mantuviera alejado de la inmundicia de la rebelión.
12. ¿Cómo puede que razonen algunas personas en cuanto a la maldad sólo porque no se les observa en su proceder descarriado?
12 El asociarse libremente con la gente de las naciones paganas marcó el comienzo de abandonar a Jehová, que exigía separación completa de esas naciones. No obstante, de esta asociación resultó contaminación, y pronto muchos de la nación de Israel llegaron a ser de la misma actitud de corazón que los paganos. De modo que decían: “¡Dios nunca ve lo que hacemos!” (Jer. 12:4, Mof) Aparentemente pensaban que Dios no observaba sus prácticas nefandas y rebelión descarada y creían que estaban logrando hacer lo que querían sin que se les descubriera o impidiera; pero la vista de Dios nunca estuvo anublada. Él aclaró este hecho diciendo: “Se ven contrariados por sus cosechas, por la furiosa ira del Eterno.” (Jer. 12:13, Mof) Verdaderamente, cuando se les descubría, cosechaban espinos. No era posible que viniese fertilidad de su rebelión deliberada—sólo espinos. No hay producción fructífera proveniente de las obras repugnantes. Hoy, también, personas de ese ánimo se ven contrariadas cuando la ira de Dios se ejerce contra ellas por medio de su organización, y son echadas fuera; o aun si sus actos secretos de maldad no son conocidos por la organización visible de Jehová para que se pueda tomar la debida acción disciplinaria, Jehová sí está enterado de esto y esas personas pronto llegan a estar muy enfermas espiritualmente, porque ya no tienen el favor de Jehová, ni sus bendiciones ni su espíritu. Jehová no tolera a los que proceden de modo contrario a la ley. La acción que se toma por una actitud insubordinada aun hoy día es la misma que en los días de la nación de Israel, y un rebelde sería echado del favor de Jehová por no adherirse a sus principios estrictos y justos. Sus siervos verdaderos, por otra parte, están dedicados a la lealtad completa.
13, 14. (a) ¿Qué resulta cuando se confía en el juicio personal? (b) ¿Qué castigos impone Jehová?
13 El pecado de abandonar a Jehová es el pecado de rebelión y se debe a confiar en uno mismo o en los juicios de otra criatura humana. Jeremías tuvo algo que decir concerniente a esto: “¡Una maldición para aquel que confía en el hombre, y se apoya en simple ayuda humana, alejando sus pensamientos del Eterno!” Al abandonar a Jehová, el siervo de Dios se hallaría en la posición que se describe con estas palabras: “Porque mi pueblo ha cometido mal doble, me ha abandonado a mí, el depósito de agua dulce, y ha labrado a pico para sí cisternas, ¡cisternas rajadas que no pueden retener nada de agua!” Donde no se ingieren verdades espirituales, las personas sufren de sed espiritual, y el continuar sin ingerirlas con el tiempo resultaría en muerte. Además, Dios preguntó al antiguo Israel: “¿Cómo te podré perdonar esto? tus hijos me han dejado a mí, y juran por los que no son dioses: cuando les he saciado de comida, cometen adulterio, y se reunen por tropas en casa de las rameras. . . . ¿y en una nación como ésta no ha de vengarse mi alma?”—Jer. 17:5; 2:13, Mof; 5:5-9, Mod.
14 Los que elegían llevarse por la instrucción o consejo que no era el que Jehová daba se hallaban reprendidos por él directamente. Se registra en Deuteronomio 28:20: “Jehová enviará sobre ti la maldición, la confusión y la reprensión en toda empresa tuya que trates de llevar a cabo hasta que hayas sido aniquilado y hayas perecido de prisa, a causa de la maldad de tus prácticas por haberme abandonado.” ¡Cuán completamente vacía y calamitosa condición para aquellos que por su proceder rebelde abandonaban la ley de Jehová!
15. Describa la naturaleza rebelde que se evidenció en los seguidores de Jesús.
15 Aunque se presentó mucha evidencia en cuanto a la trampa a que llevaba el no escuchar la Palabra de Jehová explícitamente después de estar en relación de pacto con él, eso no puso fin en aquel entonces al asunto de abandonarlo. Aun en el día de Jesús, exactamente antes del tiempo en que había de ser tomado, Jesús reconoció que bajo constreñimiento algunos de sus discípulos murmurarían, y él declaró: “Hay algunos de ustedes que no creen.” Cuando una persona ya no cree en la Palabra de Jehová, significa que por haberse apoyado en su sabiduría personal o en la opinión de otras criaturas imperfectas su atención ha sido desviada de un derrotero de sabiduría. Esto caracteriza a la rebelión. En cierta ocasión en que se evidenció esto Jesús preguntó a sus discípulos: ‘¿Se quieren ir ustedes también?’ La respuesta correcta fué dada por Pedro: “Señor, ¿A quién iremos? Tú tienes dichos de vida eterna, y hemos creído y hemos llegado a saber que tú eres el Santo de Dios.” Los que continuaron en su proceder de murmurar abandonaron al Señor en ese tiempo. El continuar en un proceder de murmurar hoy día resultará en que Jehová abandone al murmurador.—Juan 6:64, 67-69.
16. Muestre qué otra rebeldía iba a acontecer en la iglesia poco tiempo después.
16 Luego el apóstol Pablo amonestó que más tarde acontecería un mayor abandono del camino de Dios, cuando declaró: “Yo sé que después de mi partida entrarán entre ustedes lobos opresivos y no tratarán al rebaño con ternura, y de entre ustedes mismos se levantarán hombres que hablarán cosas torcidas para arrastrar a los discípulos tras sí.” Esto muestra que más personas confiarían en su propio entendimiento y se rebelarían y conducirían a un número todavía más grande de personas a hacer la misma cosa. Además, Jesús advirtió que en los ‘últimos días,’ en que ahora estamos, habría también una apostasía semejante, particularmente al tiempo de su segunda presencia invisible. Él la ilustró al hablar de una clase de ‘la virgen insensata’ que no tendría un abastecimiento adecuado de aceite en sus lámparas para el período de oscuridad que existiría. Se advirtió a los de esta clase que confiaran en la Palabra de Jehová y dejaran que ella fuese la guía gobernante en su vida, pero sus lámparas no estaban provistas adecuadamente y por eso no tuvieron la luz espiritual que los dirigiese. Esto fué el resultado de confiar en su propio juicio en lo que toca a las cosas espirituales, y por eso muchos apostataron.—Hech. 20:29, 30; Mat. 25:1-13.
17. ¿Contra qué tipo de error tiene que vigilar el cristiano hoy día?
17 Por lo tanto estemos alerta y vigilantes para que no caigamos en la trampa de sacar nuestras propias conclusiones y no elijamos llevarnos por un proceder de rebelión. Para proteger a uno contra tal proceder contrario a ley, páginas y páginas de la Biblia contienen información registrada para la guía de las personas que desean la justicia y quieren seguir un derrotero de fidelidad. Jehová no autoriza que el juicio del hombre ejerza influencia en su organización en la tierra, sino que requiere la completa sumisión del hombre a Su juicio divino. La devoción exclusiva a él es la obligación de los que libremente y de buena gana han ofrecido ser sus esclavos y dedicado su vida a él.—Jos. 24:19, 20.
REBELIÓN EN LA CRISTIANDAD
18. (a) ¿De qué manera se ha rebelado contra las reglas y principios de Jehová la cristiandad nominal? (b) ¿Qué doctrinas contrarias ha apoyado y defendido ella que deshonran a Jehová?
18 Las divisiones religiosas de la cristiandad se han rebelado contra la aceptación de la soberanía de Jehová por medio de su oficial ejecutivo, Cristo Jesús, en este tiempo. No sólo han rechazado la evidencia presentada por los que apoyan y defienden el dominio de Dios por medio de su Hijo, sino que persiguen a los siervos verdaderos de Dios. Mientras la Palabra de Dios declara que el cristiano estará separado del mundo, ellas se asocian con los elementos políticos y comerciales del mundo y son una parte integrante, aliada, de ellos. (Sant. 4:4; 2 Cor. 6:17) Dios requiere que los cristianos se abstengan de la culpabilidad por derrame homicida de sangre; sin embargo la cristiandad participa libremente en este pecado mediante coalición con las naciones que guerrean. La cristiandad se ha rebelado contra los justos principios de Jehová a tal grado que el adulterio se tolera dentro de su dominio. Esto lo autoriza ella al rehusar expulsar a los que cometen adulterio y otras violaciones. (1 Cor. 6:9, 10) Los de ella se han rebelado contra la supremacía de Jehová Dios al apoyar y defender la doctrina de la trinidad, en la cual se dice que Jehová y Jesús son coiguales y coexistentes. (Juan 14:28; Apo. 3:14) La rebelión se manifiesta en el hecho de que rechazan la verdad bíblica en cuanto a que el alma muere, y en que aceptan la doctrina falsa y pagana de la inmortalidad inherente del alma. (Eze. 18:4, Mod; Ecl. 9:5, 10; 1 Cor. 15:53) Son una parte del mundo así como lo fueron los israelitas adoradores de Baal, y pueden compararse a los escribas y fariseos del día de Jesús.—Mat. 23:9, 13, 15.
19. ¿Qué discernimiento tiene que ejercer el cristiano?
19 Cuán evidente es, entonces, que el cristiano verdadero tiene que mantenerse completamente separado de las influencias política, eclesiástica, comercial y materialista de este sistema de cosas. El que uno volviera a un proceder como el que el mundo ahora sigue ciertamente constituiría confiar en las propias conclusiones mentales de uno y sería apartarse de la Palabra de sano consejo de Dios. Sólo hay una guía segura que dirija correctamente el proceder de uno, y ésa es la Palabra de Jehová, la Santa Biblia.
EVITE TENDENCIAS MATERIALISTAS
20. ¿Qué ejemplos tenemos que muestran lo que es móvil cristiano correcto?
20 El móvil del cristiano tiene que ser puro y exclusivo en acción. Él no debe mirar ni a la derecha ni a la izquierda; éste es el modelo puesto por Cristo Jesús, quien dijo: ‘Me deleito en hacer tu voluntad, ¡oh Dios mío!’ Ningún otro derrotero puesto delante de él, tal como el de la tentación materialista que le hizo el gran rebelde Satanás al ofrecerle todos los reinos del mundo, influyó en él de manera alguna. Pablo fué del mismo ánimo firme cuando declaró que nada podía disuadirlo de su derrotero exclusivo de sujeción completa a Jehová. (Fili. 3:7-14) Ningún otro interés podía vencer al apóstol Pablo y eso incluía el yo, o cosas materiales que pudieran hacer su vida más fácil.
21. ¿Cómo amonesta el sermón del monte a los cristianos contra el preciar impropio de las cosas importantes de la vida?
21 Este consejo contra el materialismo está muy bien establecido en el sermón del monte, donde Jesús aconsejó: “Dejen de estar ansiosos acerca de su alma en cuanto a qué comerán o qué beberán, o acerca de su cuerpo en cuanto a qué se pondrán. ¿No tiene el alma [o, la vida] más valor que la comida y el cuerpo que la ropa?” (Mat. 6:25, margen) Jesús previó que algunas personas estarían muy preocupadas en cuanto a las cosas de esta vida; en realidad, estarían tan preocupadas que permitirían que estas cosas materiales y el amor a ellas les impidieran emprender el ministerio del Reino. Cuando nuestro pensar se dirige a tales deseos carnales y continuamente se cifra en ellos, eso significa confiar en uno mismo y en juicio personal. Jehová Dios reconoce los requisitos materiales de su pueblo y cuida de que se haga provisión para sus necesidades. Por nuestro proceder demostramos si realmente creemos esto o no. Las cosas que deseamos tal vez excedan por mucho a las cosas que necesitamos, y tal vez hagan que muchos sean vencidos o lleguen a estar demasiado ansiosos acerca de las cosas que desean. Advertencia contra esto expresó Jesús con estas palabras: “Por eso nunca estén ansiosos y digan: ‘¿Qué habremos de comer?’ o, ‘¿Qué habremos de beber?’ o, ‘¿Qué habremos de vestir?’” (Mat. 6:31) Estas ansiedades son las que la gente de este viejo mundo está experimentando a causa de su deseo insatisfecho de hogares cómodos, automóviles lujosos, hermosos alrededores y muchas comodidades de la vida. “Porque todas éstas son las cosas que las naciones buscan con anhelo.” Estas no son las cosas necesarias para efectuar el ministerio con buen éxito. El consejo fidedigno según se manifiesta en la Palabra de Dios es: “Sigan, pues, buscando primero el reino y su justicia, y todas estas otras cosas les serán añadidas. Por tanto, nunca estén ansiosos en cuanto al día siguiente, porque el día siguiente tendrá sus propias ansiedades.”—Mat. 6:32-34.
22. ¿Qué beneficios le provienen a la persona que edifica sobre la masa de roca figurada?
22 El cristiano que modela su vida completamente de acuerdo con la Palabra de Jehová será comparado al hombre discreto que edificó su casa sobre la masa de roca. Entonces las tormentas y las inundaciones y los vientos quizás azoten contra ella, pero no podrán moverla de su fundamento firme. Sin embargo, cuando la persona se apoya en su propio entendimiento y se aparta del consejo sabio de Jehová en este respecto y dirige sus pensamientos y atención a seguir una práctica común de las naciones, es decir, a amasar grandes riquezas, entonces deliberadamente comienza a mudarse de su casa que tiene el fundamento sólido y escoge una casa edificada sobre el fundamento arenoso del materialismo. Su proceder es de rebelión contra lo que es más sabio, ya que se le ha aconsejado cabalmente en cuanto a la insensatez de tal proceder. El fundamento de clase inferior es su propio juicio personal de buscar primero las riquezas de las naciones y poner en segundo lugar los intereses del Reino.—Mat. 7:24-27.
23. ¿Qué metas entrampan a muchos?
23 Personas que son cristianas a veces se absorben tan profundamente en sus propios planes y dependen tanto de cosas de valor materialista que pierden de vista la cosa más importante, es decir, el vivir en consonancia con su voto de dedicación a Dios, y por esto gastan su energía en conseguir riquezas. Este proceder insensato fué predicho por Salomón: “Vi otra cosa inútil debajo del sol—un hombre solo, sin parientes, sin hijo ni hermano, y sin embargo afanándose por ganar dinero; no puede satisfacerse con lo que gana, y . . . está afanándose y restringiéndose del placer. Esto también es vano, un asunto lamentable.” Tal hombre, al buscar el dinero y los placeres de este mundo, pronto se rebela contra el placer del servicio de Dios y se aparta de él. El apóstol Pablo aconsejó: “Da órdenes a los que son ricos en el presente sistema de cosas de que no sean arrogantes, y que descansen su esperanza, no en las riquezas inciertas, sino en Dios.” Cuando uno pone su confianza en la riqueza material significa que está confiando en esto para salvarse. El dinero es un poder y una defensa, pero no conduce al buscador de él a la vida eterna. Más bien, es la piedad con contentamiento lo que es gran ganancia. El fiel Moisés amonestó: “No sea que. . . aumenten para ti la plata y el oro y todo lo que es tuyo aumente; y tu corazón de veras se ensalce y de veras te olvides de Jehová. . . quien te alimentó con maná.” De modo que es mejor confiar en el brazo firme de Jehová que en el apoyo débil provisto por las riquezas; o aun en la fuerza de los príncipes.—Ecl. 4:7, 8, Mof; 1 Tim. 6:17; Deu. 8:12, 13, 14, 16; Sals. 118:9; 146:3.
24. (a) El poseer riqueza, ¿constituye en sí mismo pecado? (b) Muestre cómo el amor al dinero puede constituirse en rebelión.
24 Los que poseen riquezas saben que el poseerlas no es lo que es malo, sino que el amor a ellas o el cifrar la salvación de uno en ellas es lo que trae resultados malos. En cuanto a los que no poseen riquezas pero anhelan tenerlas, su anhelo constante y su esfuerzo continuo por conseguirlas es lo que trae resultados malos; porque esto significa usar tiempo y energía dedicados al servicio de Jehová para alcanzarlas, y es un derrotero que sólo puede traerle desilusión al que las busca, porque, cuando mucho, su poder sustentador es de corta duración. Por eso cuán absolutamente insensato es abandonar las riquezas del servicio de Jehová por esta pizca fugaz de seguridad. “La vida ocupada del hombre en verdad sólo es un fantasma, formando un bullicio vacío, amasando riquezas y no sabiendo quién ha de quedarse con su tesoro.” (Sal. 39:6, Mof) Es asombroso ver cómo el amor al dinero invade la mente del hombre y se hace como un crecimiento maligno. Prestamente reemplaza al amor a Dios y llega a ser un deseo insaciable. Pero no trae placer duradero siquiera al que logra obtener dinero, como se muestra en Eclesiastés 5:10-12 (Mof): “Un amante del dinero jamás estará satisfecho con su dinero, y un amante de las riquezas jamás hará algo de ello (¡esto también es vano!). Mientras más gana un hombre, más hay para gastarlo—mientras que el dueño sólo puede verlo. . . . la saciedad de los ricos les quita el sueño.” La falacia de las cosas materiales también se muestra en Proverbios 11:4 (Mof): “En el día de la ira de Dios de nada sirve la riqueza: la benignidad sola salva al hombre de la muerte.” Frecuentemente cuando una persona comienza a participar de prosperidad en lo comercial o material, tal vez diga: ‘Bueno, emplearé mi tiempo de esta manera sólo por un corto tiempo más y entonces tendré bastante para cuidar de mi persona para poder emprender el ministerio de tiempo cabal.’ Luego le viene más prosperidad y hay una repetición de esos pensamientos. Debe tenerse sumo cuidado para que no sea vencida la persona, como se ilustró por Jesús en el caso del hombre rico que también disfrutó de prosperidad. Después de un tiempo declaró: ‘No tengo dónde recoger mis frutos.’ En vez de hallar contentamiento con lo que poseía, declaró: “Esto haré: derribaré mis graneros y edificaré unos mayores, y allí juntaré todo mi grano y todas mis cosas buenas, y le diré a mi alma: ‘Alma, tienes tú muchas cosas buenas almacenadas para muchos años; descansa, come, bebe, diviértete.’” Esta es la manera de razonar natural cuando uno está confiando en sus propios pensamientos. Pero observe las consecuencias desastrosas que se pueden esperar juzgando por 1a respuesta que se le dió al que razonó de esta manera: “Dios le dijo: ‘Persona irrazonable, esta noche están demandando el alma tuya. . . .’ Así sucede con el hombre que atesora para sí pero no es rico para con Dios.” El apóstol Pablo también testificó concerniente a la falacia de depender de los pensamientos de uno y seguir el proceder modelado por el mundo, diciendo: “Ya no sigan andando así como las naciones también andan en la inutilidad de su mente, mientras que mentalmente están en tinieblas, y alejadas de la vida que pertenece a Dios, a causa de la ignorancia que hay en ellas, debido a la insensibilidad de su corazón.” La gente del mundo naturalmente se halla en tinieblas mentales y por lo tanto está alejada de Jehová. De modo que el seguir el modelo puesto por el mundo es un “proceder inútil,” y sería un derrotero de rebelión contra la instrucción sabia de Jehová. Los cristianos deben evitar un proceder de esa clase y no deben ser engañados por los pensamientos y ejemplos de otros.—Luc. 12:16-21; Efe. 4:17, 18.
MURMURACIÓN
25, 26. (a) ¿Cómo mostraron los israelitas un espíritu rebelde? (b) ¿Cómo amonestó Pablo contra el murmurar? ¿Qué murmuración debería evitarse hoy día, y por qué?
25 Los israelitas tuvieron muchas bendiciones durante su jornada desde Egipto hasta la Tierra Prometida, y se ejecutaron muchos milagros a favor de ellos; no obstante, murmuraron contra Jehová. Con este estado de ánimo no pasó mucho tiempo antes de que perdieran de vista los beneficios de que habían disfrutado de las manos amorosas de Jehová. Perdieron la confianza en Jehová y luego comenzaron a apoyarse en su propio entendimiento y, como resultado, murmuraron contra Jehová porque no tenían bastante de los bienes de este mundo. Aunque estaban bien alimentados demandaron más y mejor alimento; demandaron carne, y en su quejumbre mencionaron que hubiera sido mejor haber permanecido en esclavitud en Egipto. Esta fué una actitud de rebelión declarada por parte de ellos contra Jehová. Esto puede servirles de buen ejemplo a los cristianos hoy día, para que no caigan en la categoría de rebelión por medio de murmurar contra Jehová o aun contra su organización en este tiempo. Pablo exhortó en cuanto a lo que les sucedería a los murmuradores, y definitivamente aconsejó a los cristianos que evitaran que les sucediera a ellos, diciendo: “Ni seamos murmuradores, así como algunos de ellos murmuraron, de modo que perecieron por el destructor.” (1 Cor. 10:10) Esto se dió como ejemplo para que los cristianos que viven hoy eviten tal proceder trágico. Si uno no está alerta y vigila contra este estado de ánimo, pronto se halla infeliz con la manera en que Jehová dirige su organización y cómo nombra a sus diversos siervos a puestos de responsabilidad, donde él quiere que ellos sirvan.
26 El que murmure una persona que dice ser un fiel siervo dedicado pudiera significar el principio de una actitud rebelde y haría que el que participara de esta forma de rebelión sufriera disciplina con el tiempo, si continuara procediendo de tal manera. Jehová estuvo disgustado debido al espíritu rebelde que su pueblo manifestó en tiempos pasados, y él dió a saber cómo se sentía en cuanto al asunto para que los que persistieran en tal manera de proceder hoy día supieran con certeza que quedarían bajo su desaprobación. Una campaña de murmuración contra Jehová o contra cualquier parte de su organización no sería tolerada. Los que tienen la superintendencia de las congregaciones se verían obligados a actuar contra los que siembran discordia por medio de su murmuración y su manera de proceder rebelde.
27. ¿Qué actitud rebelde se revela por Santiago 3:14-17?
27 Junto con el proceder de rebelión generalmente hay un espíritu de rivalidad y celos. Este espíritu de competencia y envidia es contrario al espíritu de amor que reina en la organización de Jehová; y uno haría de su hermano su enemigo al seguir procediendo de tal manera. En Santiago 3:14-17 se da consejo en este respecto: “Pero si ustedes tienen amargos celos y espíritu de contradicción en su corazón, no estén jactándose y mintiendo contra la verdad. Esta no es la sabiduría que desciende de arriba, sino que es la terrenal, animal, demoníaca. Porque allí donde hay celos y espíritu de contradicción, hay desorden y toda cosa vil.” Luego, observe el contraste: “La sabiduría que es de arriba ante todo es casta, después pacífica, razonable, lista para obedecer, llena de misericordia y buenos frutos, sin hacer distinciones parciales, ni ser hipócrita.” Los celos y la rivalidad son indicaciones de enfermedad espiritual y pueden, como otras formas de rebelión, hacer que uno pierda la vida.
TERQUEDAD Y TESTARUDEZ
28. ¿De qué son una evidencia la terquedad y la testarudez?
28 La terquedad y la testarudez no son cualidades cristianas y no se practican dentro de la organización de Jehová. Los siervos verdaderos de Jehová actúan en completa armonía con su Palabra divina. Se les estimula a continuar en ese camino, y a esforzarse incesantemente por mejorar en comportamiento maduro propio del cristiano. Cuando uno despliega testarudez y terquedad, es evidente que la Palabra de Dios no está a grado suficiente en sus pensamientos. Jehová dió consejo firme en cuanto a ello en 2 Reyes 17:14, 15: “Ellos no escucharon, sino que continuaron endureciendo la cerviz como la cerviz de sus antepasados que no habían ejercido fe. . . continuaron rechazando sus reglamentos y su pacto. . . aun en imitación de las naciones que estaban a su alrededor.” En Jeremías 7:24 (Mod) Jehová declaró más en cuanto a esto: “Mas ellos no escucharon, ni inclinaron a mí su oído: sino que anduvieron en sus propios consejos, y en la dureza de su depravado corazón; y se han ido hacia atrás y no hacia adelante.”
29. ¿Qué hace uno en realidad cuando rechaza el consejo de Dios?
29 Cuando una persona rehusa aceptar el consejo de Dios o se aparta de la reprensión, ya sea que le venga de la Palabra de Jehová o de su organización, rechaza el consejo del Todopoderoso Dios. “Vuélvanse ante mi reprensión. . . . pero ustedes siguen rehusando, . . . y ustedes siguen descuidando todo mi consejo, y mi reprensión no la han aceptado.”—Pro. 1:23-25.
30. ¿Qué castigo administraba Jehová a los hijos testarudos?
30 En el caso de los niños, ellos frecuentemente muestran testarudez. Los padres tienen la responsabilidad de guiar apropiadamente al niño en conexión con esto para impedir que crezca esta tendencia y llegue a ser parte de la naturaleza del niño a medida que vaya desarrollándose. Dicha tendencia muy bien pudiera hacer que recibiera la desaprobación de Jehová más tarde en la vida, si no se le proporcionan la debida disciplina y guía adecuada cuando la tendencia se da a ver por primera vez. Cuando los padres no pueden hacer frente a la situación pueden solicitar la ayuda de un hermano maduro o de miembros del comité de servicio de la congregación. La Palabra de Jehová se expresa en cuanto a este asunto en Deuteronomio 21:18-21: “En caso de que un hombre llegara a tener un hijo terco y rebelde, uno que no prestara atención a la voz de su padre ni a la voz de su madre, y ellos le hayan corregido pero él no quiera escucharles, entonces su padre y su madre deben prenderlo y traerlo a los hombres de mayor edad de su ciudad y hasta la puerta de su lugar y deben decir a los hombres de mayor edad de su ciudad: ‘Este hijo nuestro es terco y rebelde, no presta atención a nuestra voz, siendo glotón y borracho.’ Entonces todos los hombres de la ciudad de él deben lapidarlo con piedras y él debe morir. Así debes eliminar lo que es malo de en medio de ti, y todo Israel oirá y verdaderamente temerá.” Con certeza, hoy el siervo joven de Dios puede saber que será desaprobado por su Dios, Jehová, si sigue un proceder de testarudez y terquedad. Estas cualidades se manifiestan únicamente en el mundo que pertenece a Satanás; y el que uno de los hijos de Jehová, joven o anciano, despliegue estas cualidades y persista en ellas resultaría en que tal persona fuera eliminada de la organización limpia y pura de Jehová.
LIBERTAD SEGÚN SU PARECER
31. ¿Por qué se rebelan muchos contra el código de justicia de Jehová?
31 Muchas personas de fuera de la organización de Jehová ejercen hoy día lo que llaman “libertad completa” de pensamiento y acción. Adoptan una filosofía que les permite satisfacer todos sus antojos. Debido a que no desean ser restringidas en ningún sentido rehusan aceptar la Palabra pura de Dios como guía, y continúan en su proceder que ellos llaman libertad. Este es un derrotero de rebeldía, y está haciendo que los que lo practican sólo sean dignos de destrucción en la batalla del Armagedón. Muchas de estas personas adoptan esta actitud porque ven el conflicto entre el error de la religión nominal y la filosofía de los líderes religiosos y creen que están igual de capacitados para escoger y establecer su propio código de ética.
32. ¿Por qué es popular la filosofía de los “librepensadores,” y por qué es seductora? ¿Qué les sobrevendrá a los que son vencidos por esta filosofía?
32 Entonces este tipo de filosofía permite que la persona haga lo que quiera hacer cuando quiera hacerlo, sin que nada se entremeta en sus deseos. Sus normas y moralidad las puede apropiar a sí misma. Dado que tales suposiciones son tan populares en el mundo, los que no se rigen por las normas morales rectas y dignas de alabanza de Dios pronto se hallan seducidos y embaucados en un derrotero bajo, descarriado, aun asociándose con otros de pensar semejante para compartir su lujuria altamente sensual y meretricia. Sin la Palabra y organización puras de Jehová para guiarlos, los cristianos también podrían llegar a ser víctimas de este razonamiento falso y caer en la trampa que ha enlazado al mundo de “librepensadores.”
33. En contraste, ¿qué reconocen los cristianos? ¿Cómo se protegen ellos?
33 Jehová no ha abandonado a su pueblo para que sea embaucado y descarriado así. El mundo de libres pensadores puede permitirse caer en el proceder inmoral que sigue este estilo de raciocinar. Pero los siervos de Jehová están bien enterados de que los adúlteros y los fornicadores no pueden alcanzar el Reino, y siempre recuerdan este consejo y es en su vida una fuerza directiva que los mantiene enteramente limpios y puros para el servicio de Jehová. Reconocen bien las fuerzas poderosas que hay dentro del cuerpo humano, que, si no se gobiernan apropiadamente, pueden conducir a un derrotero de degradación. Por lo tanto, los hombres y mujeres jóvenes dentro de la organización de Jehová están alerta para mantenerse limpios y muy alejados, por su condición moral, del comportamiento inmoral, para que no lleguen a ser depravados debido a sus propios apetitos egoístas. El no tener sus emociones dominadas sería ejercer su propia voluntad, o la voluntad de la carne, en vez de la voluntad de Jehová, y sería rebelión directa contra el consejo sabio de Jehová. Jehová no permite la inclusión de tales prácticas en su organización simplemente porque la cristiandad circunvecina las condona.
34. (a) ¿Cuál debe ser la actitud de los padres que tienen hijos que se han dejado vencer por actos inmorales? (b) ¿Cómo pueden los padres ser cómplices de una práctica incorrecta?
34 Cuando sucede que algunos padres se enteran de las faltas de sus hijos en cuanto a esto, si han caído víctimas de una relación inmoral con alguien del sexo opuesto, a veces están renuentes a informar esto a los miembros responsables de la organización que tienen la obligación de mantener la organización limpia de tales prácticas. Así los padres se hacen cómplices de un proceder contrario a ley porque la persona envuelta en ello es su propia carne y sangre. Esta relación estrecha no debe afectar la justicia, y se debe informar del caso a los miembros responsables de la congregación, ya sea la persona tan íntima como el propio hijo de uno o alguna otra persona de la congregación cristiana. Si alguien en la organización está familiarizado con tal situación y no la informa como debe hacerse, se hace cómplice directo de ella, y entonces esta persona también está participando de un proceder de rebelión. La iniquidad no tiene parte o lugar en la organización limpia de Jehová, y un siervo fiel no la condonaría quedándose callado y dejando de informar a los miembros que tienen autoridad para actuar en el asunto. Si uno no cumple con este deber cristiano está confiando en sus propios pensamientos y dejándose llevar por su propia terquedad, lo cual es una manera de proceder que conduce a la rebelión contra la organización limpia de Jehová.
35. ¿Cómo muestra crasa falta de madurez el cristiano dedicado que se casa con una persona que no está dedicada?
35 El cristiano dedicado reconoce que tiene que mantenerse enteramente separado del mundo. Esto incluye estar separado del mundo aun en el asunto de escoger un cónyuge. Así como Jehová no quiso permitir que los israelitas entraran en relaciones matrimoniales con las mujeres paganas de aquel tiempo, igualmente hoy día los cristianos obran directamente contrario al consejo de Jehová al escoger a un cónyuge que no está dedicado al servicio de Jehová. El yugo de tal unión llegaría a ser pesado e insoportable por no contar con la bendición de Jehová. (2 Cor. 6:14) Si algunos proceden directamente contrario al mandamiento y consejo de Jehová en cuanto a esto, ¿no muestra eso que confían en su propio juicio y se dejan llevar por su propia terquedad y que hay cierta tendencia a ser rebeldes? Mostraría crasa falta de madurez por parte del que procediera así, y el que lo hiciera no llenaría los requisitos para representar a la organización pura de Jehová en la capacidad de superintendente de la congregación.