¿Qué esperanzas hay de vivir más tiempo?
“El hombre nacido de mujer, vive por pocos días, y hastiado de sinsabores.” (Palabras de Job, escritas en Job 14:1, “Reina-Valera, 1977”.)
¡CUÁNTAS veces se ha descrito la brevedad de la vida en términos poéticos! Un escritor del siglo primero expresó un pensamiento parecido al de Job: “Son una neblina que aparece por un poco de tiempo y luego desaparece”. (Santiago 4:14.)
¿Ha notado usted también que la vida es demasiado breve? Hace unos cuatrocientos años, William Shakespeare escribió: “¡Extínguete, extínguete, candela fugaz! La vida es sólo una sombra que pasa”. En el siglo pasado, un jefe indio americano formuló la pregunta: “¿Qué es la vida?”, y él mismo respondió: “Es el destello de una luciérnaga durante la noche”.
¿Cuánto tiempo puede esperar vivir el ser humano? El profeta Moisés dijo lo siguiente respecto a la situación que existía en su día, hace unos tres mil quinientos años: “En sí mismos los días de nuestros años son setenta años; y si debido a poderío especial son ochenta años, sin embargo su insistencia está en penoso afán y cosas perjudiciales; porque tiene que pasar rápidamente, y volamos”. (Salmo 90:10.)
Setenta años no son más que 25.567 días. Y ochenta años solo son 29.219 días. En realidad, es muy poco tiempo. ¿Se puede hacer algo para prolongar la vida humana?
¿Puede ayudar la ciencia médica?
La revista Science hizo esta observación: “[En Estados Unidos,] la esperanza de vida al momento de nacer ha aumentado de cuarenta y siete años en 1900 a unos setenta y cinco años en 1988”. Al reducirse la tasa de mortalidad infantil gracias a una mejor atención sanitaria y nutrición, los estadounidenses pueden esperar vivir tanto tiempo como dijo Moisés. De todas maneras, ¿se prevé algún aumento espectacular en la duración de la vida de la mayoría de las personas?
Es significativo que Leonard Hayflick, destacada autoridad en la cuestión del envejecimiento, dijera lo siguiente en su libro How and Why We Age (Cómo y por qué envejecemos): “Desde luego, los adelantos en el campo de la investigación biomédica y la mejor asistencia médica que se presta en este siglo han tenido un efecto en la longevidad humana, pero solo en el sentido de hacer posible que más personas se aproximen al límite superior fijo de la duración de la vida humana”. Entonces explicó: “La esperanza de vida ha aumentado, pero la duración de la vida no; existe una gran diferencia”.
¿Cuál es el “límite superior fijo” de la duración de la vida humana? Hay quienes dicen que no existe la certeza de que en tiempos recientes alguien haya vivido más de ciento quince años. Sin embargo, la revista Science publicó: “Desde 1990, la edad verificada más avanzada que ha cumplido una persona es 120 años”. Y a principios del presente año el ministro de Sanidad francés, junto con una multitud de reporteros y fotógrafos, visitó a Jeanne Calment, de Arlés (Francia), para celebrar su 120 cumpleaños. Moisés también llegó a los 120 años, una edad muy superior a la longevidad media. (Deuteronomio 34:7.)
¿Dan esperanzas los científicos de que la gente en general pueda vivir tantos años o más? No, la mayoría de ellos no lo cree posible. Bajo el titular “Los investigadores dicen que el límite superior de la esperanza media de vida posiblemente sea 85 años”, el Detroit News publicó las siguientes palabras de S. Jay Olshansky, una reconocida autoridad en la materia del envejecimiento: “Una vez pasados los 85 años, las personas mueren como consecuencia del deterioro de varios órganos. Dejan de respirar. En esencia, mueren de vejez. Y para eso no hay cura”. Añadió: “A menos que se haga retroceder el envejecimiento humano a nivel molecular, ya no habrá más aumentos progresivos de la longevidad”.
La revista Science declaró que quizás “ya se ha alcanzado el límite superior de la longevidad y que es poco probable que se produzcan más descensos significativos en la mortalidad”. Se dice que si se pudieran eliminar todas las causas de muerte que constan en los certificados de defunción, la esperanza de vida aumentaría menos de veinte años.
De ahí que muchos científicos opinen que la duración de la vida humana ni es anormal ni es probable que cambie. Entonces, ¿por qué es razonable creer que el ser humano llegará a vivir mucho más tiempo?