Hágase diestro en su ministerio
1 El apóstol Pablo instó a que desarrolláramos destreza en el ministerio. Escribió: “Haz lo sumo posible para presentarte aprobado a Dios, trabajador que no tiene de qué avergonzarse, que maneja la palabra de la verdad correctamente”. (2 Tim. 2:15.)
2 La destreza en el ministerio es algo que se adquiere. Por lo tanto, tenemos que ‘hacer lo sumo posible’ —esforzarnos sinceramente— si queremos ser ministros diestros. Pero ¿qué nos ayudará?
APRENDA DE LA PALABRA DE DIOS
3 Nuestro conocimiento personal de las Escrituras está estrechamente relacionado con nuestra eficacia como ministros. Mientras mejor conozcamos lo que la Biblia enseña, mejor ‘manejaremos la palabra de la verdad correctamente’. Por eso, es vital apartar tiempo para estudio personal. (1 Tim. 4:15, 16.)
4 Otra manera de familiarizarnos con la Palabra de Dios es por ‘prestar más de la acostumbrada atención’ a la instrucción bíblica que recibimos en las reuniones de congregación. (Heb. 2:1.) En los discursos públicos se consideran excelentes puntos para conversación que pueden usarse en el ministerio; otros se pueden obtener del Estudio de Libro de Congregación. La Escuela del Ministerio Teocrático nos da instrucción valiosa para ser maestros hábiles, y la Reunión de Servicio provee sugerencias útiles y demostraciones prácticas para ayudarnos a ser ministros más capaces. Sin embargo, para sacar el mayor provecho tenemos que prepararnos bien y participar activamente en todas las reuniones.
PONGA EN PRÁCTICA LAS SUGERENCIAS
5 Pablo dijo a los de la congregación de Filipos que practicaran las cosas que aprendieron relacionadas con él. (Fili. 4:9.) Nosotros también tenemos que poner en práctica las cosas que aprendemos mediante la organización de Jehová. Por ejemplo, en La Atalaya del 15 de julio de 1988, páginas 15 a 20, aprendimos cómo crear territorio “nuevo” en zonas que se trabajan muy a menudo. Además de enfatizar que debemos tener una nueva manera de abordar a la gente, que llame la atención y que sea positiva, el artículo nos animó a preparar al amo de casa para que espere nuestras visitas regulares. Se nos aconsejó ser concienzudos al buscar a las personas merecedoras y tratar de hablar con todos los que viven en la misma casa. Al poner en práctica esas sugerencias podremos aplicar las cosas aprendidas y mejorar nuestras habilidades en el ministerio.
6 ¿Usamos con regularidad el libro Razonamiento en el ministerio del campo? Las introducciones que se sugieren, además de la sección sobre cómo responder a las expresiones que pudieran detener la conversación, pueden ayudarnos a aguzar nuestras habilidades al testificar. Adicionalmente, el preparar y practicar el Tema de Conversación y la manera como presentaremos la oferta del mes contribuirá a nuestro éxito en el ministerio.
7 Si desea sugerencias adicionales sobre cómo mejorar su ministerio, aborde al superintendente de servicio o al conductor del estudio de libro y pida ayuda. Todos podemos mejorar nuestras habilidades como ministros que ‘manejan la palabra de la verdad correctamente’. Dentro de poco, Jehová Dios pondrá fin a este sistema inicuo. Mientras tanto, nuestro deseo sincero es ayudar a tantas personas como podamos a alcanzar la salvación y así traer honra a nuestro Dios Jehová. (Juan 15:8.)