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Del Seder a la salvaciónLa Atalaya 1990 | 15 de febrero
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Del Seder a la salvación
“La copa de magnífica salvación alzaré, y el nombre de Jehová invocaré.” (SALMO 116:13.)
1. ¿Qué canción entre las favoritas desde mucho tiempo atrás puede afectar su futuro?
¿LE DELEITARÍA una canción sobre un futuro largo y feliz para usted? Pues hay una canción como esa entre las favoritas desde mucho tiempo atrás. Pero usted está mejor capacitado que muchas otras personas para entender esa canción significativa y disfrutar de ella. Los judíos la llaman el Hallel (Alabanza). Esta composición, que abarca los Salmos 113 hasta 118 inclusive, nos insta a cantar el “Aleluya”, o ‘Alabar a Jah’.
2. ¿Qué uso se da a esa canción, y qué relación tiene con el Seder?
2 Los judíos cantan el Hallel en su servicio de la Pascua, y evidentemente el cantarlo se remonta al tiempo en que Dios tenía un templo donde se sacrificaban animales. Hoy se canta en los hogares judíos durante el servicio y cena de la Pascua llamado el Seder. Pero pocos de los que lo cantan en su Seder captan el verdadero sentido de Salmo 116:13: “La copa de magnífica salvación alzaré, y el nombre de Jehová invocaré”. Sin embargo, ¿por qué se relaciona con la Pascua la salvación? ¿Pudiera estar implicada en esto la salvación suya?
La Pascua... fiesta de salvación
3. Relate los antecedentes del Seder.
3 Recuerde que los israelitas eran esclavos en Egipto bajo un Faraón opresivo. Finalmente Jehová levantó a Moisés para que condujera a Su pueblo a la libertad. Después que Dios envió nueve plagas contra Egipto, Moisés anunció la décima. Jehová derribaría al primogénito de cada familia egipcia. (Éxodo 11:1-10.) Pero los israelitas podían ser exceptuados de esto. ¿Cómo? Tenían que degollar una oveja, poner la sangre de este animal en las jambas y el dintel de las puertas, y permanecer dentro mientras cenaban cordero, pan sin levadura y hierbas amargas. Durante ese Seder, Dios ‘pasaría por alto’ a los primogénitos israelitas y no los mataría. (Éxodo 12:1-13.)
4, 5. ¿Cómo llevó a la salvación de muchos la Pascua? (Salmo 106:7-10.)
4 Faraón, en reacción a esta décima plaga, dijo a Moisés: “Levántense, salgan de en medio de mi pueblo, tanto ustedes como los demás hijos de Israel, y vayan, sirvan a Jehová”. (Éxodo 12:29-32.) Después que los hebreos y “una vasta compañía mixta” de simpatizantes partieron, Faraón cambió de parecer y salió en persecución de ellos. Dios entonces ayudó milagrosamente a Su pueblo a escapar a través del mar Rojo, pero allí murieron Faraón y su ejército perseguidor. (Éxodo 12:38; 14:5-28; Salmo 78:51-53; 136:13-15.)
5 Moisés dijo a Israel en el mar Rojo: “No tengan miedo. Estén firmes y vean la salvación de Jehová, que él ejecutará para ustedes hoy”. Después ellos cantaron: “Mi fuerza y mi poderío es Jah, puesto que él sirve para mi salvación. Este es mi Dios, y yo lo elogiaré”. (Éxodo 14:13; 15:2.) Sí, la liberación de Israel, tanto de la décima plaga como del mar Rojo, fue una salvación. El salmista bien pudo describir a Jehová como un Dios “que ejecuta magnífica salvación en medio de la tierra”. (Salmo 68:6, 20; 74:12-14; 78:12, 13, 22.)
6, 7. ¿Por qué se instituyó la Pascua, pero por qué difiere de la primera Pascua su observación actual?
6 Los hebreos habían de celebrar la Pascua como acto conmemorativo de salvación. Dios dijo: “Este día tiene que servirles de memoria, y tienen que celebrarlo como fiesta a Jehová durante todas sus generaciones”. (Éxodo 12:14.) En cada cena de la Pascua, o Seder, el padre recordaría a su familia aquella salvación. Jehová dio estas instrucciones: “Cuando sus hijos les digan: ‘¿Qué significa este servicio para ustedes?’, entonces tienen que decir: ‘Es el sacrificio de la pascua a Jehová, que pasó por alto las casas de los hijos de Israel en Egipto cuando plagó a los egipcios, pero libró nuestras casas’”. (Éxodo 12:25-27.)
7 El hecho de que todavía, en nuestro tiempo, los judíos celebren el Seder de la Pascua confirma la historicidad de ese relato. Con todo, algunas de sus prácticas difieren de las que Dios mandó. El libro The Origins of the Seder (Los orígenes del Seder) dice: “La Biblia contiene consideraciones extensas de la Pascua y de la fiesta del Pan Ácimo; sin embargo, esas descripciones no se conforman a las observaciones del día festivo en tiempos posteriores. En particular el ceremonial bíblico enfoca atención en el sacrificio pascual, que no ocupa una posición central en la literatura posbíblica”. Una de las razones principales es que los judíos no tienen un templo para sacrificios de animales.
8. ¿Qué razón especial tenemos para considerar la Pascua?
8 Los cristianos pueden estudiar para su beneficio todas las fiestas dadas por Dios al Israel de la antigüedada, pero por ahora ciertos aspectos de la Pascua merecen nuestra atención especial. Jesús, quien era judío, celebró la Pascua. En la última ocasión que lo hizo, delineó la única celebración divina que tendrían los cristianos: la Cena del Señor, la conmemoración de la muerte de Jesús. Como se ve, esta celebración cristiana tiene relación con la Pascua.
Más que un cordero pascual
9, 10. ¿En qué sentido era el cordero pascual un sacrificio especial o excepcional?
9 Hebreos 10:1 nos dice que ‘la Ley fue una sombra de las buenas cosas por venir’. La Cyclopædia of Biblical, Theological, and Ecclesiastical Literature (Enciclopedia de literatura bíblica, teológica y eclesiástica), por M’Clintock y Strong, dice: “Ninguna otra sombra de buenas cosas por venir de la ley puede rivalizar con la fiesta de la Pascua”. En particular el cordero de la Pascua tenía un significado que iba más allá de la ceremonia que conmemoraba el hecho de que Dios había salvado a los primogénitos, y luego, de Egipto, a todos los hebreos.
10 Aquel cordero era excepcional en varios sentidos. Por ejemplo, muchos sacrificios de animales prescritos por la Ley de Moisés eran presentados por una sola persona por pecados o culpas personales, y varias partes de los animales se quemaban en el altar. (Levítico 4:22-35.) Alguna de la carne de la ofrenda de comunión se daba al sacerdote que oficiaba, o a otros sacerdotes. (Levítico 7:11-38.) Pero el cordero pascual no se utilizaba en el altar, y lo ofrecía un grupo de personas, comúnmente una familia, quienes lo comían. (Éxodo 12:4, 8-11.)
11. ¿Qué opinaba Jehová del cordero pascual, y a qué señalaba este? (Números 9:13.)
11 Jehová atribuyó un valor tan alto al cordero pascual que lo llamó “mi sacrificio”. (Éxodo 23:18; 34:25.) Algunos eruditos han dicho que “el sacrificio pascual era el sacrificio por excelencia para Jehová”. Aquel cordero indudablemente señalaba al sacrificio de Jesús, o lo tipificaba. Sabemos esto porque el apóstol Pablo llamó a Jesús “nuestra pascua [que] ha sido sacrificado”. (1 Corintios 5:7.) A Jesús se le identificó como “el Cordero de Dios” y “el Cordero que fue degollado”. (Juan 1:29; Revelación 5:12; Hechos 8:32.)
Sangre que salva vidas
12. ¿Qué papel desempeñó la sangre del cordero en la primera Pascua?
12 Allá en Egipto la sangre del cordero fue esencial para la salvación. Cuando Jehová degolló a los primogénitos, pasó por alto las casas donde había sangre en las jambas de las puertas. Además, porque los hebreos no estaban de duelo por la muerte de sus primogénitos, estuvieron listos para marchar a través del mar Rojo hacia la libertad.
13, 14. ¿Cómo salva vidas y es necesaria para la salvación la sangre de Jesús? (Efesios 1:13.)
13 También hay sangre implicada en la salvación hoy día... la sangre derramada de Jesús. Cuando “estaba cerca la pascua, la fiesta de los judíos”, en 32 E.C., Jesús dijo a un gran auditorio: “El que se alimenta de mi carne y bebe mi sangre tiene vida eterna, y yo lo resucitaré en el último día; porque mi carne es verdadero alimento, y mi sangre es verdadera bebida”. (Juan 6:4, 54, 55.) Todos sus oyentes judíos estarían pensando en la Pascua, que se avecinaba, y en que en Egipto se usó la sangre de un cordero.
14 En aquel momento Jesús no estaba considerando los emblemas que se usarían en la Cena del Señor. Aquella nueva celebración que tendrían los cristianos no fue instituida sino hasta un año después, y por eso ni siquiera los apóstoles que oyeron a Jesús en 32 E.C. sabían nada de ella. Con todo, Jesús estaba manifestando que su sangre era esencial para la salvación eterna. Pablo explicó: “Por medio de él tenemos la liberación por rescate mediante la sangre de ese, sí, el perdón de nuestras ofensas, según las riquezas de su bondad inmerecida”. (Efesios 1:7.) Solo mediante el perdón sobre la base de la sangre de Jesús podemos vivir para siempre.
¿Qué salvación, y dónde?
15. En el caso de los hebreos en Egipto, ¿qué salvación y privilegios fueron posibles, y qué no fue posible? (1 Corintios 10:1-5.)
15 En el Egipto antiguo solo hubo una salvación limitada. Ninguno de los que partieron de Egipto esperaba recibir vida sin fin después del éxodo. Es cierto que Dios nombró a los levitas para que fueran sacerdotes de la nación, y algunos de la tribu de Judá llegaron a ser reyes temporales, pero todos morirían. (Hechos 2:29; Hebreos 7:11, 23, 27.) Aunque la “vasta compañía mixta” que también salió de Egipto no tenía esos privilegios, ellos, junto con los hebreos, podían tener la esperanza de llegar a la Tierra Prometida y disfrutar de una vida normal adorando a Dios. Sin embargo, los siervos precristianos de Jehová tenían base para esperar que, con el tiempo, podrían disfrutar de vida sin fin en la Tierra, donde, según el propósito divino, viviría la humanidad. Esto concordaría con la promesa de Jesús en Juan 6:54.
16. ¿Qué clase de salvación podían esperar los siervos de Dios de la antigüedad?
16 Dios utilizó a siervos suyos de la antigüedad para que escribieran palabras inspiradoras respecto a que la Tierra había sido creada para ser habitada y a que los rectos vivirían para siempre en ella. (Salmo 37:9-11; Proverbios 2:21, 22; Isaías 45:18.) Con todo, ¿cómo podrían los verdaderos adoradores alcanzar esa salvación si morían? Por restauración divina a la vida en la Tierra. Por ejemplo, Job expresó la esperanza de que se le recordara y se le llamara de vuelta a la vida. (Job 14:13-15; Daniel 12:13.) Está claro que una forma de salvación es para vida eterna en la Tierra. (Mateo 11:11.)
17. Según la Biblia, ¿qué salvación diferente pueden alcanzar otros?
17 La Biblia también habla de salvación para vivir en el cielo, adonde fue Jesucristo después de su resurrección. “Él está a la diestra de Dios, porque siguió su camino al cielo; y ángeles y autoridades y poderes fueron sujetados a él.” (1 Pedro 3:18, 22; Efesios 1:20-22; Hebreos 9:24.) Pero Jesús no será el único humano a quien se habrá llevado al cielo. Dios ha determinado que también tomará de la Tierra a un grupo relativamente pequeño de otras personas. Jesús dijo a los apóstoles: “En la casa de mi Padre hay muchas moradas. [...] Voy a preparar un lugar para ustedes. También, si prosigo mi camino y les preparo un lugar, vengo otra vez y los recibiré en casa a mí mismo, para que donde yo estoy también estén ustedes”. (Juan 14:2, 3.)
18. ¿Qué razón tenemos ahora para enfocar la atención en la salvación para vida celestial?
18 Ciertamente la salvación para vida celestial en unión con Jesús es mucho más grandiosa que la limitada salvación enlazada con la primera Pascua. (2 Timoteo 2:10.) Fue en la noche del último Seder válido, la última cena pascual válida, cuando Jesús instituyó la nueva celebración para sus seguidores, que enfocó la atención en salvarse para vida celestial. Dijo Jesús a los apóstoles: “Sigan haciendo esto en memoria de mí”. (Lucas 22:19.) Antes de considerar cómo deben observar esta celebración los cristianos, consideremos el asunto de cuándo debemos observarla.
Un “tiempo señalado”
19. ¿Por qué es lógico relacionar la Pascua con la Cena del Señor?
19 Jesús había dicho: “En gran manera he deseado comer con ustedes esta pascua antes que sufra”. (Lucas 22:15.) Después delineó la Cena del Señor, que sus seguidores habrían de celebrar en memoria de Su muerte. (Lucas 22:19, 20.) La Pascua se celebraba una vez al año. Por lo tanto, es razonable que la Cena del Señor se celebre anualmente. ¿Cuándo? Lógicamente sería en la primavera, para el tiempo de la Pascua. Eso querría decir al llegar el 14 de Nisán (del calendario judío), más bien que adherirse siempre al viernes porque en ese día de la semana murió Jesús.
20. ¿Por qué se interesan los testigos de Jehová en el 14 de Nisán?
20 De modo que el 14 de Nisán sería la fecha que Pablo tenía presente cuando escribió: “Cuantas veces coman este pan y beban esta copa, siguen proclamando la muerte del Señor, hasta que él llegue”. (1 Corintios 11:26.) Por los siguientes dos siglos, muchos cristianos —se les llegó a conocer como cuartodecimanos, del latín para “decimocuarto”— se adhirieron al 14 de Nisán. La enciclopedia de M’Clintock y Strong informa: “Las iglesias de Asia Menor celebraban la muerte del Señor el día correspondiente al 14 del mes de Nisán, día en que, según opinaba toda la Iglesia antigua, tuvo lugar la crucifixión”. Hoy los testigos de Jehová celebran la Cena del Señor anualmente en la fecha correspondiente al 14 de Nisán. Sin embargo, algunos han notado que esto a veces difiere de la fecha en que los judíos celebran su Pascua. ¿Por qué?
21. ¿Cuándo se había de sacrificar el cordero pascual, pero qué hacen los judíos hoy día?
21 El día hebreo se extendía desde una puesta de sol (cerca de las seis de la tarde) hasta la siguiente puesta de sol. Dios mandó matar el cordero de la Pascua el 14 de Nisán “entre las dos tardes”. (Éxodo 12:6.) ¿Cuándo sería eso? Los judíos modernos se aferran al punto de vista rabínico de que el cordero tenía que ser degollado hacia el final del 14 de Nisán, entre el tiempo en que el Sol empieza a descender (cerca de las tres de la tarde) y la puesta misma del Sol. El resultado de esto es que celebran su Seder después de la puesta del Sol, cuando el 15 de Nisán ya ha empezado. (Marcos 1:32.)
22. ¿Cuál es una razón por la cual la fecha de la Conmemoración puede diferir de la fecha en que los judíos celebran su Pascua? (Marcos 14:17; Juan 13:30.)
22 No obstante, tenemos buena razón para entender de otra manera esa expresión. Deuteronomio 16:6 dijo claramente a los israelitas que habían de “sacrificar la pascua por la tarde, al ponerse el sol” (versión judía Editorial Sigal). Esto indica que “entre las dos tardes” se refería al período crepuscular, desde la puesta del Sol (que da comienzo al 14 de Nisán) hasta la oscuridad misma. Los antiguos judíos caraítasb entendían esto así, tal como lo han hecho los samaritanosc hasta la actualidad. El que aceptemos que el cordero pascual fue sacrificado y comido “a su tiempo señalado” el 14 de Nisán, y no el 15 de Nisán, es una razón por la cual la fecha de nuestra Conmemoración a veces difiere de la fecha judía. (Números 9:2-5.)
23. ¿Por qué se añaden meses al calendario hebreo, y cómo se encargan de esto los judíos de tiempos modernos?
23 Otra razón por la cual nuestra fecha quizás difiera de la de los judíos es que ellos emplean un calendario determinado de antemano, un sistema que sólo quedó fijo en el siglo IV E.C. Mediante este pueden fijar fechas con décadas o siglos de anticipación para el 1 de Nisán o para fiestas. Además, el antiguo calendario lunar necesitaba que se le añadiera un decimotercer mes de vez en cuando para sincronizar las fechas del calendario con las estaciones. El calendario judío actual añade este mes en puntos fijos; en un ciclo de 19 años, se añade a los años 3, 6, 8, 11, 14, 17 y 19.
24, 25. a) En el tiempo de Jesús, ¿cómo se fijaban los meses y cómo se determinaba si se necesitaban meses adicionales? b) ¿Cómo establecen los testigos de Jehová la fecha para la Cena del Señor?
24 Sin embargo, Emil Schürer dice que “para el tiempo de Jesús [los judíos] todavía no tenían un calendario fijo, sino que basados en la observación puramente empírica comenzaban cada nuevo mes con la aparición de la luna nueva, y basándose igualmente en la observación” añadían un mes según fuera necesario. “Si [...] hacia el final del año se notaba que la Pascua fuera a caer antes del equinoccio vernal [alrededor del 21 de marzo], se decretaba la intercalación de un mes antes de Nisán” (The History of the Jewish People in the Age of Jesus Christ [Historia de los judíos en la era de Jesucristo], tomo I). Así, el mes adicional entra de forma natural y no se añade arbitrariamente.
25 El Cuerpo Gobernante de los Testigos de Jehová establece la fecha para la Cena del Señor según el método antiguo. El 1 de Nisán se determina según el tiempo en que la luna nueva más cercana al equinoccio de primavera probablemente se pueda observar durante la puesta del Sol en Jerusalén. Al contar 14 días desde esa fecha se llega al 14 de Nisán, que generalmente corresponde al día de la luna llena. (Véase La Atalaya del 1 de noviembre de 1977, páginas 671, 672.) Sobre la base de este método bíblico, a los testigos de Jehová de todo el mundo se les ha anunciado que este año la Conmemoración se celebrará después de la puesta del Sol el 10 de abril.
26. ¿Qué otros aspectos de la Cena del Señor merecen nuestra atención?
26 Esta fecha corresponde al 14 de Nisán, que fue cuando Jesús celebró la última Pascua válida. Sin embargo, el celebrar la Conmemoración enfoca una salvación que sobrepasa a lo que conmemora el Seder judío. Todos tenemos que entender lo que sucede durante la Cena del Señor, lo que significa, y cómo está implicada nuestra salvación.
[Notas a pie de página]
b La enciclopedia de M’Clintock y Strong los describe como “una de las sectas más antiguas y sobresalientes de la sinagoga judía, cuyo dogma distintivo es la adherencia estricta a la letra de la ley escrita”.
c “Degüellan el animal por la tarde [...] A medianoche cada familia come la carne [...] y entonces quema la carne restante y los huesos antes del amanecer [...] Algunos eruditos han sugerido que puede ser que la religión samaritana se parezca mucho a lo que era la religión bíblica antes de que el judaísmo rabínico le diera nueva forma” (The Origins of the Seder [Los orígenes del Seder]).
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‘Discernamos lo que somos’ al tiempo de la ConmemoraciónLa Atalaya 1990 | 15 de febrero
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‘Discernamos lo que somos’ al tiempo de la Conmemoración
“Si discerniéramos lo que nosotros mismos somos, no se nos juzgaría [...] para que no lleguemos a ser condenados.” (1 CORINTIOS 11:31, 32.)
1. ¿Qué desean evitar definitivamente los cristianos verdaderos, y por qué?
LO QUE menos desea un cristiano es que Jehová lo juzgue desfavorablemente. Desagradar al “Juez de toda la tierra” pudiera llevar a que ‘fuéramos condenados con el mundo’ y no alcanzáramos la salvación. Eso pudiera ocurrir fuera que esperáramos vivir en el cielo con Jesús o vivir para siempre en una Tierra paradisíaca. (Génesis 18:25; 1 Corintios 11:32.)
2, 3. ¿En qué asunto pudiéramos recibir juicio adverso, y qué dijo Pablo sobre eso?
2 En el capítulo 11 de 1 Corintios el apóstol Pablo consideró un asunto por el cual se nos pudiera juzgar. Aunque dirigió sus comentarios a cristianos ungidos, su consejo es importante para todos, especialmente en este tiempo. El que discernamos lo que nosotros mismos somos puede ayudarnos a tener la aprobación de Dios y no ser juzgados. Pablo, al considerar la celebración anual de la Cena del Señor, escribió:
3 “El Señor Jesús, la noche en que iba a ser entregado, tomó un pan y, después de dar gracias, lo partió y dijo: ‘Esto significa mi cuerpo a favor de ustedes. Sigan haciendo esto en memoria de mí’. Hizo lo mismo respecto a la copa también, después de haber cenado, al decir: ‘Esta copa significa el nuevo pacto en virtud de mi sangre. Sigan haciendo esto, cuantas veces la beban, en memoria de mí’. Porque cuantas veces coman este pan y beban esta copa, siguen proclamando la muerte del Señor, hasta que él llegue”. (1 Corintios 11:23-26a.)
4. ¿Qué se celebrará la noche del 10 de abril de 1990?
4 Después de la puesta del Sol el 10 de abril de 1990 los testigos de Jehová celebrarán la Conmemoración de la muerte de Cristo. Por lo general el grupo que se reúne compone una congregación; así que habrá espacio que pueden ocupar personas que todavía no son Testigos. ¿Cómo se llevará a cabo esa reunión? Se presentará un discurso bíblico. Luego, después de una oración, se pasará el pan. Se hace otra oración antes de pasar la copa. En vez de hacer todo esto por rito formal o procedimiento rígido, la cantidad de panes o copas utilizados y la manera de pasarlos se efectúa de acuerdo con las circunstancias locales. Lo importante es que esos artículos se hagan asequibles a todos los concurrentes, aunque la mayoría de ellos sencillamente se los pasarán unos a otros sin participar. Pero ¿qué cosas se pasan, y qué significan? Además, ¿qué debemos considerar de antemano para discernir lo que nosotros mismos somos?
“Esto significa mi cuerpo”
5, 6. a) ¿Qué hizo Jesús con el pan? b) ¿Qué clase de pan usó?
5 Hemos leído lo que Pablo ‘recibió del Señor’ respecto a la Conmemoración. También tenemos los relatos de tres evangelistas, uno de los cuales estuvo presente cuando Jesús instituyó esta celebración. (1 Corintios 11:23; Mateo 26:26-29; Marcos 14:22-25; Lucas 22:19, 20.) Esos relatos dicen que primero Jesús tomó un pan, oró, y entonces lo partió y lo distribuyó. ¿En qué consistía aquel pan? Correspondientemente, ¿qué se usa hoy día? ¿Qué significa o representa ese pan?
6 Había a la mano cosas que se habían usado en la cena de la Pascua judía, y una de estas era el pan ácimo, o sin levadura, el cual Moisés llamó “tortas no fermentadas, el pan de aflicción”. (Deuteronomio 16:3; Éxodo 12:8.) Este pan se hacía con harina de trigo, pero sin usar levadura, sal ni condimentos. Como era ácimo (hebreo: mats·tsáh), era plano y quebradizo; había que partirlo en pedazos cuyo tamaño facilitara el comerlo. (Marcos 6:41; 8:6; Hechos 27:35.)
7. ¿Qué clase de pan usan los testigos de Jehová en la Conmemoración?
7 Jesús usó pan sin levadura en la Cena del Señor, y los testigos de Jehová hoy día hacen lo mismo. El pan ácimo común que usan los judíos puede servir si no se le han añadido otros ingredientes, como malta, cebolla o huevo. (Difícilmente cuadraría con la descripción de “pan de aflicción” el pan ácimo que contuviera tales ingredientes.) O los ancianos de la congregación pueden pedir a alguien que prepare el pan sin levadura con masa de harina de trigo y agua. Si no puede conseguirse harina de trigo, el pan sin levadura puede hacerse con harina de cebada, de arroz, de maíz o de cualquier otro grano. Se le pasa un rodillo a la masa hasta que queda fina y se la hornea sobre una lámina de cocer engrasada con un poco de aceite.
8. ¿Por qué es un símbolo apropiado el pan sin levadura, y qué significa el participar de él? (Hebreos 10:5-7; 1 Pedro 4:1.)
8 Este pan es apropiado porque no contiene levadura, que en la Biblia representa corrupción o pecado. Pablo aconsejó lo siguiente respecto a cierto hombre inmoral de una congregación: ‘Un poco de levadura hace fermentar toda la masa. Quiten la levadura vieja, para que estén libres de fermento. Cristo nuestra pascua ha sido sacrificado. Guardemos la fiesta, no con levadura de maldad e iniquidad, sino con tortas no fermentadas de sinceridad y verdad’. (1 Corintios 5:6-8; compárese con Mateo 13:33; 16:6, 12.) El pan sin levadura es un símbolo apropiado del cuerpo humano de Jesús, quien fue “leal, sin engaño, incontaminado, separado de los pecadores”. (Hebreos 7:26.) Jesús estaba allí, en cuerpo humano perfecto, cuando dijo a los apóstoles: “Tomen, coman. Esto significa mi cuerpo”. (Mateo 26:26.) El participar del pan comiendo de él significa que el que eso hace cree en el beneficio del sacrificio que Jesús hizo a su favor y acepta tal beneficio. Pero hay más implicado.
Vino que tiene significado
9. ¿Qué otro emblema dijo Jesús que se debía usar?
9 Jesús usó otro símbolo: “También, tomó una copa y, habiendo dado gracias, la dio a ellos, diciendo: ‘Beban de ella, todos ustedes; porque esto significa mi “sangre del pacto”, que ha de ser derramada a favor de muchos para perdón de pecados [...]’”. (Mateo 26:27, 28.) ¿Qué había en aquella copa para participación en común que él pasó, y qué significa esto para nosotros mientras nos esforzamos por discernir lo que nosotros mismos somos?
10. ¿Cómo llegó a ser parte de la Pascua judía el vino?
10 Cuando Moisés describió inicialmente la cena de la Pascua, no mencionó ninguna bebida. Muchos eruditos creen que el vino se introdujo en la Pascua mucho tiempo después, tal vez en el siglo II a.E.C.b. Sea como sea, el uso de vino en esta cena era común en el primer siglo, y Jesús no se opuso a ello. Cuando instituyó la Conmemoración, usó el vino de la Pascua.
11. ¿Qué clase de vino es apropiado usar en la Cena del Señor?
11 Puesto que la Pascua judía se celebraba mucho después de la vendimia, Jesús no habría usado jugo sin fermentar, sino vino tinto que fácilmente podría representar su sangre. (Compárese con Revelación 14:20.) La sangre de Cristo no necesitaba añadiduras, así que el vino puro es apropiado en vez de los vinos encabezados con coñac (tales como el oporto, el jerez o el moscatel) o vinos a los que se añaden especias o hierbas (vermú, Dubonnet o muchos aperitivos). Sin embargo, no tenemos que preocuparnos por cómo se haya elaborado un vino: si se le añadió o no un poco de azúcar durante la fermentación para hacerlo de sabor o contenido alcohólico medio, o si se usó o no un poco de azufre para que se conservarac. Muchas congregaciones usan algún vino tinto comercial (como quianti, borgoña, beaujolais o clarete) o simple vino tinto hecho en casa. El vino y el pan son sencillamente emblemas o símbolos; por lo tanto, si sobra algo del pan o del vino, se puede llevar a casa y usarse después como cualquier otro artículo de consumo.
12. Jesús explicó que el vino tiene ¿qué significado representativo?
12 El que Jesús haya hablado de su sangre la noche de la Pascua puede haber traído a la memoria la sangre del cordero allá en Egipto. Pero note que Jesús en realidad hizo una comparación diferente cuando dijo: “Esta copa significa el nuevo pacto en virtud de mi sangre, que ha de ser derramada a favor de ustedes”. (Lucas 22:20.) Anteriormente Dios había hecho un pacto con la nación del Israel carnal, y este fue inaugurado con la sangre de animales sacrificados. Había una correspondencia entre la sangre de aquellos sacrificios y la sangre de Jesús. En ambos casos hubo sangre implicada cuando Dios inauguró un pacto con la nación de su pueblo. (Éxodo 24:3-8; Hebreos 9:17-20.) Un rasgo distintivo del pacto de la Ley fue que el Israel carnal tenía la perspectiva de componer una nación de reyes y sacerdotes. (Éxodo 19:5, 6.) Pero después que Israel no guardó su pacto con Jehová, Dios dijo que reemplazaría “el pacto anterior” con “un nuevo pacto”. (Hebreos 9:1, 15; Jeremías 31:31-34.) La copa de vino que Jesús pasó entonces entre los apóstoles fieles representó aquel nuevo pacto.
13, 14. a) ¿Qué significa tener parte en el nuevo pacto? b) ¿Qué significado tiene el que una persona participe de los emblemas?
13 Los cristianos admitidos en ese nuevo pacto llegan a formar una nación espiritual de reyes y sacerdotes. (Gálatas 6:16.) El apóstol Pedro escribió: “Ustedes son ‘una raza escogida, un sacerdocio real, una nación santa, un pueblo para posesión especial, para que declaren en público las excelencias’ de aquel que los llamó de la oscuridad a su luz maravillosa”. (1 Pedro 2:9.) Queda claro cuál es la salvación que reciben: vida en el cielo como cogobernantes con Jesús. Revelación 20:6 lo confirma: “Feliz y santo es cualquiera que tiene parte en la primera resurrección; [...] serán sacerdotes de Dios y del Cristo, y reinarán con él por los mil años”.
14 De hecho, después que Jesús mandó a sus apóstoles que participaran del pan y del vino emblemáticos, les dijo que ‘comerían y beberían a su mesa en su reino, y se sentarían sobre tronos para juzgar a las doce tribus de Israel’. (Lucas 22:28-30.) Por consiguiente, el participar de los emblemas de la Conmemoración significa más que sencillamente creer en el sacrificio de Jesús. Todo cristiano tiene que aceptar el rescate y ejercer fe si quiere alcanzar vida eterna donde sea que la alcance. (Mateo 20:28; Juan 6:51.) Pero el participar de los emblemas significa que uno tiene parte en el nuevo pacto, que ha sido escogido para estar con Jesús en su Reino.
Se necesita discernimiento al tiempo de la Conmemoración
15. ¿Cómo introdujo Jesús una nueva esperanza para los siervos de Dios?
15 Como se explicó en el artículo anterior, antes del tiempo de Jesús los siervos leales de Dios no tenían la esperanza de ir al cielo. Anhelaban alcanzar vida eterna en la Tierra, el hogar original de la humanidad. Jesucristo fue el primero en ser resucitado como espíritu, y llegó a ser el primero de la humanidad que fue llevado al cielo. (Efesios 1:20-22; 1 Pedro 3:18, 22.) Pablo confirmó esto así: “Tenemos denuedo respecto al camino de entrada al lugar santo por la sangre de Jesús, el cual él nos inauguró como camino nuevo y vivo”. (Hebreos 10:19, 20.) ¿Quiénes lo seguirían después que Jesús abriera el camino?
16. ¿Qué encierra el futuro para los que participan del pan y del vino?
16 La noche en que Jesús instituyó la Cena del Señor, dijo a sus apóstoles leales que estaba preparando un lugar para ellos en el cielo. (Juan 14:2, 3.) Sin embargo, recuerde que Jesús también dijo que los que participaran del pan y del vino estarían con él en su Reino y se sentarían sobre tronos para juzgar. ¿Serían solo los apóstoles? No; porque después el apóstol Juan se enteró de que también otros cristianos vencerían y ‘se sentarían con Jesús en su trono’, y juntos llegarían a ser ‘un reino y sacerdotes para gobernar sobre la tierra’. (Revelación 3:21; 5:10.) Juan también se enteró de la cantidad total de cristianos que son “comprados de la tierra”: 144.000. (Revelación 14:1-3.) Como este es un grupo relativamente pequeño, un “rebaño pequeño” en comparación con todos los que han adorado a Dios a través de los siglos, se requiere discernimiento especial al tiempo de la Conmemoración. (Lucas 12:32.)
17, 18. a) ¿Qué hábito desarrollaron algunos cristianos de Corinto? b) ¿Por qué era un asunto tan serio el comer y beber en demasía? (Hebreos 10:28-31.)
17 Pablo sacó a relucir este asunto en su carta a los corintios cuando algunos apóstoles todavía estaban vivos y Dios estaba haciendo un llamamiento a los cristianos para que ‘fueran santos’. Pablo dijo que se había desarrollado una práctica mala allí entre los que tenían que participar de los emblemas. Algunos tomaban comidas de antemano y comían o bebían demasiado, lo cual los ponía soñolientos y embotaba sus sentidos. Como resultado, no podían ‘discernir el cuerpo’, el cuerpo físico de Jesús representado por el pan. ¿Era muy serio eso? ¡Sí! Por participar indignamente se hacían ‘culpables respecto al cuerpo y la sangre del Señor’. Si se mantenían alerta tanto mental como espiritualmente, ‘podrían discernir lo que eran y no se les juzgaría’. (1 Corintios 1:2; 11:20-22, 27-31.)
18 ¿Qué tenían que discernir aquellos cristianos, y cómo? En primer lugar tenían que comprender en el corazón y la mente que se les había llamado para estar entre los 144.000 herederos de la vida celestial. ¿Cómo discernían eso?, y ¿deberían creer muchos hoy que son parte de ese grupito que Dios ha escogido desde los días de los apóstoles?
19. ¿Qué situación reveladora hubo en la Conmemoración de 1989?
19 En realidad, solo una minoría muy pequeña de cristianos verdaderos hoy día discierne eso acerca de sí. En la celebración de la Cena del Señor de 1989, más de 9.479.000 personas se reunieron en las congregaciones de los testigos de Jehová por toda la Tierra. Alrededor de 8.700 personas manifestaron tener la esperanza de ser ‘salvadas para el reino celestial’. (2 Timoteo 4:18.) La inmensa mayoría —sí, otros millones de cristianos leales y benditos que se reunieron— discernió que su esperanza definitivamente era vivir para siempre en la Tierra.
20. A los que son de los 144.000, ¿cómo se les hace saber que han sido llamados? (1 Juan 2:27.)
20 En el Pentecostés de 33 E.C. Dios empezó a escoger a los 144.000 para la vida celestial. Puesto que esa esperanza era nueva, una que no habían tenido los siervos de Dios antes del tiempo de Jesús, ¿cómo llegarían a saber de ella, o a tener la seguridad de ella, los escogidos? Lo disciernen por el testimonio que de ello les da el espíritu santo de Dios. Esto no significa que de hecho ven el espíritu —no es una persona— ni que tienen alguna vista mental del espíritu comunicándose con ellos, ni que oyen voces de la región de los espíritus. Pablo explica: “El espíritu mismo da testimonio con nuestro espíritu de que somos hijos de Dios [...] También somos herederos: herederos por cierto de Dios, pero coherederos con Cristo, con tal que suframos juntamente para que también seamos glorificados juntamente”. (Romanos 8:16, 17.)
21. a) ¿Cómo saben los ungidos que tienen la esperanza celestial? (1 Corintios 10:15-17.) b) ¿Qué clase de personas son los ungidos, y cómo dan testimonio, modestamente, de su esperanza?
21 Ese testimonio, o comprensión, da nueva orientación a su modo de pensar y su esperanza. Siguen siendo humanos y disfrutan de las cosas buenas de la creación terrestre de Jehová, pero lo más importante en su vida y lo que más les interesa es ser coherederos con Cristo. No han llegado a tener estas perspectivas por emoción. Son gente normal y equilibrada en sus puntos de vista y su conducta. Pero por haber sido santificados mediante el espíritu de Dios, están convencidos de su llamamiento y no están constantemente en dudas al respecto. Comprenden que alcanzarán la salvación en el cielo si demuestran que son fieles. (2 Tesalonicenses 2:13; 2 Timoteo 2:10-12.) Después de entender lo que el sacrificio de Jesús significa para ellos, y discernir que son cristianos ungidos por espíritu, participan con modestia de los emblemas en la Conmemoración.
22. ¿Qué discernirá la mayoría de los que asistan a la Cena del Señor?
22 La mayoría de los que obedientemente se reunirán el 10 de abril no tienen esa esperanza, porque Dios no los ha ungido con espíritu ni los ha llamado a la vida celestial. Como indicamos, Dios empezó a escoger a los 144.000 allá en los días de los apóstoles. Pero cuando terminara ese llamamiento, era de esperarse que otros que llegaran a adorarlo tendrían la esperanza que tuvieron Moisés, David, Juan el Bautizante y otros fieles que murieron antes de que Jesús abriera el camino a la vida celestial. Por eso, actualmente hay millones de cristianos leales y celosos que no participan de los emblemas en la Conmemoración. Estos cristianos disciernen lo que son ante Dios en el sentido de que perciben su esperanza válida. Se benefician de la sangre y del cuerpo de Jesús al recibir el perdón de sus pecados y luego alcanzar vida sin fin en la Tierra. (1 Pedro 1:19; 2:24; Revelación 7:9, 15.)
23. ¿Por qué será una celebración gozosa la Conmemoración? (Compárese con 2 Crónicas 30:21.)
23 Por lo tanto, anhelemos la feliz celebración del 10 de abril. Será un tiempo para ejercer discernimiento, pero también un tiempo de gozo. Gozo para el pequeño número de los que tienen la esperanza celestial, quienes debida y obedientemente participarán del pan y del vino. (Revelación 19:7.) También será causa de regocijo para millones de cristianos felices que esa noche observarán y aprenderán, quienes tienen la esperanza de recordar para siempre en la Tierra esa significativa celebración. (Juan 3:29.)
[Notas a pie de página]
a “La misma noche que el Señor Jesús fue traicionado, tomó en sus manos pan y, después de dar gracias a Dios, lo partió y dijo: ‘Esto es mi cuerpo, entregado a muerte para bien de ustedes. Hagan esto en memoria de mí.’ Así también, después de la cena, tomó en sus manos la copa y dijo: ‘Esta copa es el nuevo pacto confirmado con mi sangre. Cada vez que beban, háganlo en memoria de mí.’” (Versión Popular.)
b Un erudito da esta opinión en cuanto a por qué se añadió el vino: “[La Pascua] ya no sería una reunión anual solemne de varones adultos; llegaría a ser la ocasión de festividad para la familia, en la que el beber vino tenía un lugar natural” (The Hebrew Passover—From the Earliest Times to A.D. 70 [La Pascua hebrea... desde el comienzo hasta A.C. 70], por J. B. Segal).
c Desde la antigüedad se han empleado sal, clara de huevo y otras sustancias para aclarar el vino o dar realce a su color o su sabor, y los romanos hasta usaban azufre como desinfectante al hacer vino.
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