Nombrando a los hijos... a la manera africana
Por el corresponsal de “¡Despertad!” en Rodesia
UNOS amigos nuestros nombraron a su pequeña hija No temas. Puede ser que usted piense, “¡Qué extraño!” Pero antes que sienta lástima por ella, permítame explicarle que los padres de ella son africanos y que hablan cishona. En su lengua No temas se convierte en Musatye, un nombre muy bonito si uno lo pronuncia correctamente.
Ahora, ¿probamos a decirlo otra vez? Musatye. Si uno lo repite varias veces, le suena en los oídos como el reclamo de un pájaro.
Sin duda, entre nuestros muchos lectores hay los que dieron a sus hijos nombres bíblicos tales como Sara, Noemí, Daniel y David. Estos son fáciles de pronunciar y nunca pasan de moda.
En el antiguo Israel se daban los nombres debido al significado que comunicaban. Y esto en sumo grado es cierto hoy día en el África. Usted hallará muy interesante el saber los porqués y los motivos de poner nombres a los bebés africanos.
Hablan los padres
A la mano está una carta de los padres de habla cishona de Musatye. Tanto el padre como la madre son siervos dedicados de Jehová Dios, y dedican 150 horas al mes a predicar a otros acerca de los maravillosos propósitos del Dios verdadero. Esto es además de cuidar de su familia de siete. Dennis, Stella y Reuben son sus primeros tres, pero tres de los últimos cuatro recibieron nombres en cishona: Musatye, Vimbai “Ten confianza,” y Kurirai “Vencer.” El cuarto fue nombrado Witness (Testigo). El padre explicó:
‘Al nombrar a nuestros últimos cuatro hijos, lo hicimos con la idea de estimularnos como familia en la fe cristiana. Por ejemplo, al llamar a Testigo, toda la familia sabe que somos testigos de Jehová. Al llamar a nuestra hija Musatye, todos en la familia saben que no debemos ser temerosos de los que matan el cuerpo pero no pueden matar el alma. (Mat. 10:28) Al llamar a Vimbai, la familia sabe que debe ser confiada, leal a Jehová y a su organización. Al llamar Kurirai, la familia sabe que debemos vencer las dificultades que el Diablo y otros enemigos de Jehová y de su organización pondrán ante nosotros.’
Si el padre de Musatye llamara a estos últimos cuatro hijos uno detrás de otro, prácticamente estaría dando un sermón, y uno muy alentador. Otra buena idea es que esta familia cotidianamente recibe agradables recordatorios de lo que quieren ser o hacer. Ciertamente éstas son buenas razones para considerar la elección de excelentes nombres.
La madre de otra familia escribe que el solo tener hijos no es un cuadro tan alegre como el tener tanto a hijos como hijas, y ella refleja esta actitud en su elección de nombres:
“La primera hija en mi familia fue Chiedza. Chiedza significa ‘luz.’ La llamé Chiedza porque quería hijos de ambos sexos en mi familia. Ya había dado a luz a dos varones, así que cuando di a luz a una niña hubo luz en la familia. La segunda hija fue Tsitsi. Tsitsi significa ‘bondad.’ La llamé Tsitsi debido a que Chiedza era la única niña en la familia y no tenía con quien jugar, así es que fue una bondad que naciera la segunda hija en la familia.”
Dígalos en voz alta
En los cuatro principales grupos de dialecto de la gente que habla cishona existe una abundancia de nombres bonitos. Ciertamente disfrutará de la siguiente selección si los lee en voz alta.
Tendai... “Dé gracias.” Un hombre nombró así a su hijo porque aunque amaba a sus cuatro hijas, estaba agradecido de que su quinto hijo fuera un varón.
Ngoni... “Misericordia.” Una pareja apreciativa dio este nombre a su segundo hijo porque consideraron una gran misericordia el tener otro hijo después de la muerte de su primogénito.
Chipo... “Dádiva.” Farisa... “Alegrar.” Hemos conocido a muchos Chipos y Farisas, pero quedé muy impresionada por una madre que tenía cuatro parejas de mellizos y otros siete hijos. ¿Le alegraría recibir la decimacuarta y decimaquinta dádiva de hijos? Ella se alegró. Me permitió sostener a estos dos preciosos bebés con piel de terciopelo, y compartí su alegría.
Rudo... “Amor.” Este nombre se encuentra en toda comunidad de habla cishona, y su popularidad es igual a la de Juan y María entre los europeos. En vista del hecho de que Dios es amor, y que a los cristianos se les ordena amar a Dios y amar a su prójimo, no es de extrañarse que Rudo sea uno de los nombres favoritos. Como con otros nombres africanos, es uno que se le puede dar tanto a una niña como a un varón.
Significados más profundos
El significado de los nombres no es siempre tan claro. El nombre dado al bebé quizás traiga a la memoria una larga lista de acontecimientos o tal vez la historia de la familia. Por ejemplo, me intrigaban los nombres de los hijos de un amigo, y había ideado el significado de los mismos. Sin embargo, vea cuán equivocada estaba, según lo señaló el padre:
Hatina... “No tenemos.” Dado que ella era su primogénita razoné que los padres pensaron, “No tenemos más hija que ésta.” Pero el padre explicó: ‘Es la costumbre africana el desear grandes familias y muchos parientes, pero de la familia de diez de mi abuelo paterno, solo han sobrevivido tres. La descendencia de mi propio padre fueron solo dos. Por consiguiente al nacer mi hija dije, “No tenemos parientes.”’
Tapfuma... “Somos ricos.” Pensé: “Tienen dos hijas y ahora un hijo por lo tanto son ricos.” Pero eso es solo una parte pequeña del porqué el padre escogió ese nombre. Sus razones: ‘Provengo de una familia pobre y recibí muy poca educación seglar, y sin embargo, cuando nació mi tercer hijo podía contar mis riquezas de esta manera: Como relojero trabajé y pude comprar un automóvil; tenemos como heredero a un hijo; y, lo más importante, tenemos el privilegio de la oración y un conocimiento de la verdad de Dios que nos da la esperanza segura de obtener vida eterna. Al pensar en todo esto, dije entonces, “Ahora somos ricos.” Por eso es que nombré a este hijo Tapfuma.’
Netsai... “Aflicción.” Esta palabra también puede significar “Fatiga.” A mi modo de pensar, cuatro hijos en seis años y medio haría que la madre sintiera fatiga. Pero las dificultades que hicieron surgir el nombre no se atribuyeron a la hija. El padre dijo que su esposa había estado peligrosamente anémica, la madre de él estaba enferma y también su primogénita Hatina. Puesto que la hija vino al mundo durante un período de aflicción, recibió ese nombre, pero no como un desdoro para ella. ¿Leyó en voz alta Netsai? Encantador, ¿no es cierto?
Nombres en otros idiomas
Como usted ya habrá notado, a veces los padres usan palabras en inglés para nombrar sus hijos. Por ejemplo, algunos hijos crecen con nombres tales como Gift (Dádiva), Precious (Precioso), Shepherd (Pastor) y así por el estilo. Un maestro africano dijo concerniente a su hijo: “Lo llamé Blessing (Bendición) porque pensé que es Jehová Dios el que da buenas dádivas [Sant. 1:17], así es que mi hijo vino como una bendición de Jehová.”
Muchos matrimonios africanos terminan en divorcio si su unión no produce hijos, y el tener solamente un hijo parece ser algo deshonroso para mucha gente. Pero no es así para cierto hombre y su esposa de la tribu nsenga quienes, por diez años de matrimonio, tuvieron solamente un hijo, Samuel. A su segundo hijo le pusieron de nombre Lundu, que tiene dos significados, “calma” y “tardío.” Esto describe bien la condición matrimonial tranquila, sin problemas, la calma durante la tardanza de diez años entre Samuel y Lundu.
La gente de habla cinyanja que vive en Rodesia han venido de Zambia o de Malawi, y ellos también eligen nombres interesantes y dulces para su descendencia. Para mencionar unos pocos: Chisoni “Compasión,” Chifundo “Misericordia,” Chuma “Rico.” Un superintendente de circuito de los testigos de Jehová expresó lo que sintió al ser padre de mellizos nombrando Madalitso “Bendiciones” al hijo y Chimwemwe “Gozo” a la hija. De vez en cuando estos padres también se dirigen a los mellizos por las palabras inglesas.
El dar a su hijo el nombre bíblico de una persona de fe es por cierto digno de encomio, especialmente si uno conoce la idea encerrada en el nombre: Sara, “princesa”; Noemí, “Mi deleite”; Daniel, “Dios es (mi) juez; David, “Amado.” Como esos israelitas de la antigüedad, vemos que muchos de nuestros amigos africanos también dan nombres que encierran una idea. Puede ser una manera muy agradable de escoger un nombre. Y No temas es un pensamiento animador y un nombre muy apropiado para una pequeña señorita, especialmente si uno lo dice en cishona, Musatye.