El agua pura... una maravilla de la naturaleza
EL AGUA no es algo que se puede usar solo una vez. ¡Por miles de años la gente ha usado la misma agua que usamos actualmente todos los días!
El proceso de depuración que se lleva a cabo en la creación natural, y que permite que generación tras generación disfrute de agua pura, revela gran sabiduría. Al mismo tiempo, los seres humanos tienen la responsabilidad de cooperar con este sistema para que pueda funcionar sin que se le obstaculice indebidamente.
Sistema de autodepuración
El calor del sol evapora el agua de la superficie de los océanos, lagos y otras masas de agua, así como también de las superficies húmedas. Cada día esta evaporación levanta a la atmósfera tremendas cantidades de vapor de agua. Aun si éstas son aguas o superficies sucias o saladas, el agua evaporizada es casi pura.
Con el tiempo, esta agua vuelve a la Tierra en la forma de lluvia (o nieve). A la vez ayuda a purificar el aire al llevarse consigo polvo u otras sustancias. Cuando llega al suelo, da a la vegetación y otras superficies un enjuague limpiador. Parte del agua fluye a los ríos y parte de ella penetra en el suelo.
No obstante, cuando uno saca agua subterránea de un pozo bueno, ésta no está sucia. ¡Se ha convertido en agua potable buena y pura! ¿Qué ha pasado para que esto sea así?
Cuando el agua penetra en la tierra, en primer lugar se le purifica mecánicamente puesto que el suelo sirve de filtro. Las partículas sólidas que estaban en el agua permanecen en el suelo a medida que el agua pasa por él.
Sin embargo, en el agua hay impurezas orgánicas y de otras clases que no son eliminadas por la acción filtrante del suelo. Pero también se han hecho arreglos para purificar el agua de estas impurezas.
Depuración biológica
La depuración biológica se encarga de las impurezas del agua que la filtración por el suelo no elimina. En este proceso, un sinnúmero de diferentes microorganismos presentes en el suelo se ponen a trabajar en las impurezas. A medida que el agua penetra lentamente en la tierra, bacterias y otros organismos utilizan las diferentes impurezas en el agua como alimento. Su sistema digestivo descompone las impurezas y las convierte en materia nutritiva para la vegetación.
A la vez que el agua está siendo purificada de este modo, absorbe del suelo diferentes minerales provechosos. Esos minerales también sirven para darle mejor sabor al agua potable. Esto explica por qué en muchos lugares el agua subterránea es agua potable de buen sabor sin tener que someterla a más depuración.
También hay un proceso para la depuración del agua parecido a éste y de diseño maravilloso que rige en los ríos, lagos y océanos. En el caso de estas aguas, la mayor porción de las impurezas sólidas se asientan en el fondo, y el proceso biológico se encarga de las otras impurezas. El agua de lluvia acarrea grandes cantidades de sustancias nutritivas del suelo y las deposita en las masas de agua. Entre estas sustancias están varios compuestos de nitrógeno y fósforo, así como un sinnúmero de otras sustancias. Los microorganismos que están en los ríos, lagos y océanos actúan sobre estas sustancias y las descomponen, transformándolas en sustancias nutritivas que les sirven de alimento a las plantas acuáticas. Cuando las extensiones de agua reciben de modo adecuado estas sustancias nutritivas, se conserva el equilibrio, y el agua permanece suficientemente pura.
Además, cuando las plantas acuáticas reciben la luz del sol producen oxígeno en el agua. Los microorganismos y los peces necesitan este oxígeno para vivir. Se ve, pues, que todo el arreglo es una maravilla de orden, cooperación y eficiencia.
Problemas causados por el hombre
El sistema de autodepuración de la naturaleza funcionó bien por miles de años sin que surgiera problema alguno. Pero poco a poco la gente empezó a juntarse en ciudades de expansión continua, lo cual causó problemas con el equilibrio de la naturaleza.
En tiempos primitivos se construyeron alcantarillados en las ciudades. Estos vertían las aguas residuales y los desechos directamente en las extensiones de agua sin que primero fueran sometidos a tratamiento. Pudiera decirse que esto fue el comienzo de la contaminación del agua. Andando el tiempo, se sobrecargó tanto el sistema de depuración natural que ya no pudo cumplir con su tarea. Así, muchos de los ríos que fluían por las ciudades fueron convirtiéndose poco a poco en cloacas malolientes al descubierto.
¿Qué pasa cuando se vierten demasiados desechos en una extensión de agua? Al principio los microorganismos se multiplican rápidamente, como también lo hacen las plantas. Por eso, las aguas empiezan a ponerse cenagosas. Para poder producir oxígeno en el agua, las plantas necesitan la luz del sol. Pero el estado cenagoso del agua impide que la luz penetre más abajo de la superficie. Por eso, las plantas que están a mayor profundidad en el agua empiezan a morir y descomponerse.
La descomposición de las plantas utiliza el oxígeno en el agua tan rápidamente que las plantas vivas no pueden producirlo al mismo paso. Poco a poco se agota el abastecimiento del oxígeno. A su vez, esto significa la muerte de los microorganismos y los peces que dependen del oxígeno.
En muchos lugares el crecimiento demográfico y el aumento de la industria han resultado en problemas como éste. Debido en parte a la ignorancia y en parte a la indiferencia, se han vertido inmensas cantidades de desechos y sustancias tóxicas en el agua. El proceso de depuración natural no puede neutralizar éstos con suficiente rapidez.
Como resultado, algunas sustancias muy peligrosas han podido introducirse en plantas, peces, aves y humanos. Gradualmente se hizo patente que se necesitaban leyes para controlar el asunto de los desechos. Y cuando se ha actuado para mejorar una masa de agua contaminada, el resultado ha sido un mejoramiento señalado. Pero, ¿cómo se logra esto?
Tratamiento de las aguas residuales
El tratamiento de las aguas residuales ha sido el factor clave. Los métodos que se utilizan se valen del proceso de depuración biológico natural. Demos una mirada a lo que les pasa a las aguas residuales a medida que pasan por una instalación de tratamiento típica.
Puesto que hay sustancias sólidas grandes en las aguas residuales, primero se filtra el agua por una criba para eliminar esos sólidos grandes. Entonces el agua fluye lentamente por un depósito pequeño donde las sustancias pesadas, tales como la arena, se asientan en el fondo, de donde son quitadas. Este depósito se llama la cámara de grava o arena.
Entonces el agua fluye a un depósito grande de sedimentación, donde se mueve lentamente por una o dos horas. Aquí la tierra o el lodo presente en el agua se asientan en el fondo, de donde se pueden eliminar con una bomba.
Sin embargo, al llegar a este punto, todavía hay muchas sustancias orgánicas en las aguas residuales. Por eso, el siguiente paso es el de canalizar el agua a la etapa biológica para el “tratamiento de gran potencia” mediante microorganismos. En las grandes instalaciones de tratamiento esto se hace por lo general por medio de añadir una concentración de microorganismos a las aguas residuales cuando éstas entran en el tanque de aireación. Como sugiere el nombre del tanque, se inyecta o insufla aire u oxígeno puro en el agua. Entonces los microorganismos tienen una abundancia tanto de oxígeno como de alimento en las aguas residuales. De modo que se multiplican rápidamente y descomponen eficazmente las impurezas.
Después de esto se necesita un tanque de clarificación para separar los microorganismos del agua purificada. Estos se asientan en el fondo de este tanque, y el agua relativamente limpia ya puede verterse en los lagos o ríos. No obstante, es posible que esta agua todavía contenga muchas bacterias, algunas de las cuales pudieran ser patógenas, es decir, de las que causan enfermedades. A eso se debe que casi siempre se desinfecta esta agua con, por ejemplo, cloro u ozono para matar las bacterias peligrosas.
Mejoras en la depuración
En los últimos años muchos países han tratado de mejorar su tratamiento de las aguas residuales. Tienen por meta una eliminación más eficaz de los compuestos de fósforo y nitrógeno presentes en el agua. Los excrementos humanos y muchísimos detergentes contienen mucho fósforo, del cual el tratamiento biológico solo elimina la tercera parte.
El fósforo causaría el crecimiento de algas en el agua a menos que fuera removido. Por eso, después que se haya cumplido el tratamiento biológico, se añade una sustancia química que produce un precipitado o que hace que se adhiera a ella el 90 por ciento del fósforo presente en el agua. Entonces puede recogerse como sedimento del fondo del tanque. Se pueden emplear para este propósito el sulfato de aluminio o el de hierro, los cuales son productos residuales de la industria.
También se han adoptado otros métodos fisicoquímicos para lograr un grado mayor de pureza. Algunos de estos métodos son: absorción sobre carbono activado u otros absorbentes, la osmosis a la inversa, el intercambio de iones y la destilación.
Claro está que la construcción de instalaciones para el tratamiento de las aguas residuales, y el tratamiento mismo, son muy costosos. Pero es parte del precio que hay que pagar por la concentración de la población y la industrialización. Puesto que la mayoría de las personas reconocen el valor del agua pura, sin duda estarán dispuestas a hacer algunos sacrificios para que el ciclo natural de este líquido vital continúe relativamente inalterado.
[Diagrama en la página 23]
(Para ver el texto en su formato original, consulte la publicación)
MODELO SIMPLIFICADO DE UNA INSTALACIÓN PARA TRATAMIENTO DE AGUAS DE DESECHO
AGUAS RESIDUALES
CONTROLES CENTRALES
CRIBA
ELIMINACIÓN DE ARENA
BOMBA DE TORNILLO
PRE AIREACIÓN
SEDIMENTACIÓN
PRIMARIA
DEPÓSITO DE AIREACIÓN
CLARIFICADOR SECUNDARIO
LODO EXCEDENTE
DIQUE DE MEDIDA
AL AMBIENTE