Ponderando las noticias
‘No se piensa en un Diseñador’
● Cuando el biólogo George Wald, ganador del premio Nóbel, habló recientemente a la Asociación Nacional de Maestros de Ciencia de los Estados Unidos, hizo algunas admisiones pasmosas acerca del modo de pensar “científico.” “Vivimos en un universo muy particular,” empezó, “uno que parece diseñado para la mucha variación y desarrollo [necesarios para la vida].”
Pero el informe del “Times” de Seattle hace notar que “precisamente cuando parecía que Wald estaba acercándose a la conclusión de que el ‘muy particular’ universo era la obra de un Creador, abruptamente cambió de dirección.” ¿Por qué?
“Los científicos están renuentes a reconocer un diseño,” dijo Wald, “porque están deseosos de evitar la idea de un Diseñador, con D mayúscula. A mí mismo no me gusta pensar en un Diseñador.”
¿No le recuerda esta manera de pensar la imagen popular de tres monos, cada uno con las manos sobre los ojos, los oídos y la boca respectivamente? ¡Cuán similar a los líderes religiosos del día de Jesús, de quienes él dijo: “Ven y se quedan como si no vieran; oyen y se quedan sin comprender, como si no oyeran”!—Mat. 13:13, “Versión Popular.”
La bandera... “¿cosa viva?”
● Las reglas que gobiernan el uso de la bandera de los Estados Unidos han sido revisadas por primera vez en treinta y cuatro años. La nueva legislación tiene que ver con cuándo se puede desplegar la bandera y dónde se autoriza a usarla en los automóviles; también suprime el requisito de que las mujeres saluden con la mano sobre el corazón. El código revisado también añade: “La bandera representa a un país vivo y a ella misma se le considera cosa viva.”
Si oficialmente se considera a la bandera “cosa viva,” ¿se puede decir que los cristianos que respetuosamente rehúsan participar en la ceremonia de la bandera son irrazonables cuando citan como su base el mandato de la Biblia: “Huyan de la idolatría”? (1 Cor. 10:14) El autor Whitney Smith, director del Centro de Investigación de la Bandera y a quien se considera el principal perito estadounidense en las banderas, aboga por enarbolar y saludar la bandera. Sin embargo, hasta él recientemente admitió que “hemos convertido la bandera en una religión civil.”
Ciertamente donde hay libertad religiosa no se debe criticar a la gente cuya conciencia no le permite participar en los ritos de la “religión civil.” Como declaró el Tribunal Supremo de los EE. UU. en 1943: “El que estas personas rehúsen participar en la ceremonia no estorba o niega los derechos de otros a que lo hagan. Tampoco hay duda alguna en este caso de lo pacífico y ordenado de su comportamiento.”
Dios... ¿Padre y Madre?
● Según el periódico “Upsala Nya Tidning” del 18 de noviembre de 1976, Ulla Barth, una sacerdotisa de la Iglesia Estatal Sueca Luterana, objeta a considerar a Dios como varón. “Tenemos que alejarnos de la personalización: Dios es un movimiento, una liberación, un poder creativo,” dijo ella. De modo similar, algún tiempo atrás el Dr. Leonard Swidler, teólogo e historiador eclesiástico católico romano de la Universidad Temple de Filadelfia, Pensilvania, preparó una revisión tentativa de la liturgia que eliminaba la clasificación sexual al aludir a Dios. Swidler sugirió oración que diga: “Oh Dios, Padre y Madre de nosotros.”
Algunos pudieran considerar muy deseables estas ideas. Pero ¿qué indica la Biblia?
En vez de indicar que Dios sea “un movimiento, una liberación, un poder creativo,” las Escrituras dicen: “Jehová es persona varonil de guerra.” (Éxo. 15:3) También, Jesucristo inició la Oración Modelo con las palabras: “Padre [no Padre y Madre] nuestro que estás en los cielos.” (Mat. 6:9) En ninguna parte de la Biblia se caracteriza a Dios como de género femenino. Más bien, se dice: “Como un padre muestra misericordia a sus hijos, Jehová ha mostrado misericordia a los que le temen.”—Sal. 103:13; 104:31.
Sin embargo, físicamente Dios no es como un varón humano carnal. “Dios es un Espíritu,” dijo Jesús, “y los que lo adoran tienen que adorarlo con espíritu y con verdad.”—Juan 4:24.